miércoles, 24 de julio de 2024

Hacen y Dicen Lo Que Se Les Ocurre

Como dijo hace poco Bukele en un discurso, Chile era "un país de ensueño" antes de la insurrección del 2019. Como él mismo añadió, lamentándolo, el país después ha quedado irreconocible. 

Es que hemos dejado que sucediera. Todo es consecuencia de que la izquierda ha hecho lo que ha querido, en un grado inverosímil. Y por eso el exMIR  Cristián Castillo Echeverría recibe el Premio Nacional de Arquitectura y  se permite decir que considera "legítimas" las tomas de inmuebles. Es que es de extrema izquierda y, por eso, goza de fuero. Perteneció a una asociación ilícita terrorista "a mucha honra" y por lo tanto es premio nacional. Consagrado "inmortal" por los chilenos. Dicta cátedra de violencia y "sienta doctrina".

¿Por qué no, si Gabriel Boric, agitador revolucionario experto, puede ser Presidente de la República?. La izquierda en Chile dice y hace lo que quiere.

¿Cuándo se le rindió Chile? ¿Cuando Piñera entregó la Constitución? Antes, mucho antes. Cuando dejó levantar una estatua y elegir, en público concurso, a Salvador Allende como "el mejor chileno de todos los tiempos", junto con proscribir y denostar al que nos había salvado del comunismo, pacificado y puesto a la cabeza de América Latina. 

Chile se rindió cuando dejó meter presos a los que derrotaron a la violencia e indultó y llenó de dinero y prebendas --hasta hoy-- a quienes la emplearon para llegar al poder. 

Chile se rindió cuando Aylwin suprimió la Llama de la Libertad del cerro Santa Lucía e indultó a los que asesinaron a su custodio, el carabinero Heriberto Novoa.  

Chile empezó a rendirse, en realidad, cuando la derecha eligió senador a un adversario de Pinochet y después lo hizo Presidente, tras haber el mismo afirmado, en foro presidencial, que Pinochet había sido el peor Jefe de Estado de la historia. 

Chile se rindió cuando nadie le replicó nada al acusar a los mismos que lo habían elegido de ser "cómplices pasivos" del inexistente delito de salvar a Chile del comunismo. 

Chile se rindió cuando Piñera senador votó por destituir a un ministro de la Suprema acusado por la izquierda de aplicar la Ley de Amnistía, texto expreso y vigente. 

Chile se rindió cuando el mismo Piñera, siendo Presidente, nombró ministro de la Suprema a Mario Carroza, que había condenado a Miguel Krassnoff por el "asesinato" de Miguel Enríquez. Krassnoff había sido el teniente que había descubierto en 1974 la guarida de ese terrorista y asaltante de bancos, tras éste recién haber robado la sucursal Huelén del Banco de Chile y ordenado acribillar a su agente Julio Robinson del Canto con seis balazos, por no entregarle la llave de la caja fuerte. 

Chile se rindió cuando dejó al mismo Carroza condenar al coronel (r) Julio Castañer por haber prendido fuego a los quemadores-quemados, Rojas y Quintana, cosa que no había hecho. 

Lo anterior es el uno por mil de una larga historia de entreguismo desde que Aylwin indultara a los mil terroristas que Pinochet mantenía presos, los llenara de dinero (lo que sigue hasta hoy) y se tolerara la prevaricación judicial sin precedentes, que convirtió en presos políticos a 328 exuniformados (sin contar los fallecidos y suicidados).

Chile ya se había rendido antes cuando, en un paroxismo de desvergûenza izquierdista, Ricardo Lagos les diera pensiones vitalicias a 28 mil sospechosos de terrorismo interrogados entre 1973 y 1990, a título de que habían sido "víctimas de prisión política y tortura". ¿Por qué tanto escándalo el año pasado, cuando Boric hizo lo mismo con unos pocos facinerosos culpables de acciones terroristas más recientes?

La izquierda dice y hace lo que quiere y se autopremia, porque desde hace muchos años el país ha capitulado ante ella. Y esto irá para más. Por eso la misma dictadura judicial que encarcela militares, ahora les roba a las isapres. Y se marcha United Health Group, el mayor inversionista mundial en salud, dueño de dos isapres, y anuncia que demandará a Chile ante el CIADI.  Tal vez al invertir pensaron, "la izquierda hace lo que quiere con los chilenos, pero nosotros no somos chilenos". Como decía el pastor Niemoller cuando Hitler apresaba a los primeros judíos.



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lunes, 22 de julio de 2024

"¡Es la Izquierda, Estúpido!"

El país es un desastre y todo el mundo se da cuenta ("todo el mundo" es sólo una manera de decir, pues el orbe apenas sabe que Chile existe y simplemente no lo sabría si no hubiera nombres famosos como Pinochet, Allende y Alexis Sánchez, en ese orden).

Hoy ese Chile es un desastre porque gobierna la izquierda. La mayoría lo sabe y, dado que vienen elecciones, votará por la derecha, la derecha a secas. 

El gobierno trata de hacer trampa, despenalizando el voto obligatorio, para que menos gente sufrague y no haya una avalancha de derecha. Pero lo pillaron y tuvo que poner marcha atrás. Fue impresentable. 

Además, Argentina está demasiado cerca y eligió a la derecha, a un ultra. La corriente dominante acá, que contemporiza con la izquierda, confía en que fracase, pero Milei no está fracasando. La inflación le disminuye. El PIB allá cayó el año pasado y éste, como en Chile en 1975, cuando Pinochet hizo lo que le dijo Friedman. Pero ya a fines de los '70 Chile crecía al 7 y 8 % y allá pasará lo mismo: el FMI ha dicho que si bien el PIB de Argentina caerá de nuevo este año, el próximo crecerá 5 %. ¿Cómo votará la gente acá con un Milei exitoso allá? Adivine.  

Y Milei ha anunciado que el presupuesto va a dejar de financiar a los partidos. Acá la gente lee eso y dice que también es lo que necesitamos nosotros, con un presupuesto que regala miles de millones a los partidos, tantos que les da vergûenza y están estudiando rebajar ese subsidio a sí mismos.

Acá la gente ya hasta está aprendiendo algunas cosas que se le han ocultado, como que Pinochet era de derecha y entregó un país sin terrorismo ni puerta giratoria para los "patos malos", creciendo 10%, a la cabeza de América Latina y donde todos andaban tranquilos por las calles. Donde no había gente matándose a diario ni conflicto mapuche ni inmigración descontrolada. El electorado votará por lo más parecido a eso, que es lo que ofrece sólo la derecha a secas. 

Pues además ese Chile 1985-2015 fue top-one mundial en disminución de la pobreza. Por lo mismo la mayoría quiere repetir "los mejores 30 años". ¿Qué nos impide todo eso? ¡La izquierda, estúpido! 

¡Que se vaya! 

Ella sabe que se va a hundir en las elecciones de gobernadores, consejeros, alcaldes, concejales, parlamentarios y presidente. 

¿Y quién las va a ganar? La derecha. Porque va a ofrecer dar la plata fiscal en vouchers a los pobres para salud, educación y mayores pensiones, suprimiendo el financiamiento de las fundaciones y los partidos políticos, los sueldos excesivos de los funcionarios y las dietas y gastos de los parlamentarios, que son cinco veces los de países europeos. Y suprimir la jubilación millonaria a los ex presidentes, como lo está haciendo Milei. 

La gente va a votar derecha para que en las calles manden los carabineros y no los delincuentes. 

Y a la izquierda se le viene la derecha, en fin, porque se le murió Piñera y no encuentra con quién reemplazarlo para que contemporice con ella y la salve de su inminente naufragio popular.


viernes, 19 de julio de 2024

Del Erizo al Zorro

Chile se ajusta perfectamente a la descripción que hace Isaiah Berlin de las dos modalidades de la Humanidad: el erizo, que sabe una sola cosa y sólo trabaja para conseguirla. Y el zorro, que está siempre oteando el ambiente para elegir la mejor alternativa entre una infinita variedad de cosas.

El comunismo es el erizo. Lo único que sabe es tomarse el poder por la fuerza y no moverse de ahí. Mire usted a Cuba. El erizo apalea, miente, se disfraza, injuria hasta la saciedad a sus adversarios. 

Cuando se toma el poder no lo suelta más, porque sigue usando la violencia, el engaño o la trampa para permanecer. Y no le importa que el pueblo se muera de hambre, sea un kulak o un guajiro o un roto.

El pueblo chileno, "que no ha sido por rey jamás regido (salvo por Fernando VII) ni a extranjero dominio sometido (salvo por la Hermana Mayor, bajo Allende), sin embargo ha elegido dos veces al erizo para gobernarlo y los efectos han sido en ambas desastrosos. Hemos tropezado dos veces con el mismo erizo. "El que no aprende de su historia, está condenado a repetirla" (George Santayana).

En 1973 el caos era tan grande que los zorros despertaron y les pidieron a los militares tirar al erizo de vuelta al mar, porque había generado la ruina total. Si ustedes oyen la proclama con que los militares se tomaron el poder a las ocho de la mañana del once de septiembre de 1973 (muchas veces reproducida en estos días en las redes) lo más repetido en ella es la palabra "caos". 

¿Y ahora? Bueno, hubo "la seguidilla de casi 20 asesinatos en tres días" (Carlos Ominami en La Tercera de hoy). Eso es caos.

Pero los zorros chilenos se preocupan sólo de sus propios asuntos. Dejaron que el erizo volviera y se tomara el país de nuevo. Y por eso de nuevo hay caos. 

Pero el zorro estaba sólo dormido. ¿Quién, si no, salvó a Chile del caos el 4 de septiembre de 2022, el 7 de mayo de 2023 y el 17 de diciembre de 2023? Impredecibles zorros, que en número de cinco millones acudieron a las urnas y les dijeron a los erizos y sus seguidores "párele, qué se han figurado, no queremos comunismo otra vez." 

Pero el erizo resiste. Sólo sabe una cosa. No sabe otra. Y hace lo que sabe y sólo eso. ¿No han oído a Jeannette Jara? Y busca cualquier truco o "chispeza" para seguir en el poder, aunque viole la Constitución y la ley. 

Y en eso está, haciendo trampa, dilatando, engañando. No importa que muchos sigan entrando, muriendo, matando. Que todo siga. 

Confía en que los zorros no van a ir a votar si no les cobran multa. Y si se la imponen, diciéndoles que no se la van a cobrar. Y que los electores extranjeros no tendrán multa si se abstienen. Sin multa el erizo gana y de ahí nadie lo mueve más. Es lo único que sabe. En otras partes se ha quedado sesenta, setenta años. ¿Por qué no acá?


martes, 16 de julio de 2024

Pensar Distinto de Marta Lagos

En los últimos días ha muerto en balaceras más de una decena de personas, más que todos los caídos por enfrentamientos durante todo el año 1978, en pleno gobierno militar, que fueron 8, según el Informe Rettig. 

La Fundación Paz Ciudadana ha dicho que la cifra de homicidios actual es la mayor de nuestra historia. La encuestadora Marta Lagos ha replicado, en un muy leído tuit, que durante el gobierno militar había muchas más muertes, pues se quitaba la vida a las personas por "pensar distinto". 

Pero las cifras del Informe Rettig no la respaldan. Si bien efectivamente en 1973 hubo 1.200 caídos por el enfrentamiento, fue precisamente el período en que los líderes del partido con que simpatiza Marta Lagos, Patricio Aylwin y Eduardo Frei, defendían a los militares. El primero decía que había sido indispensable para evitar una tiranía comunista y el segundo criticaba a los europeos por no darse cuenta de que la subversión tenía armas y combatientes superiores a los del Ejército. 

La verdad, que en Chile poco importa, fue que después de 1973 el país se pacificó completamente, hasta llegar a sólo 8 caídos en 1978. Posteriormente, cuando se fundó el FPMR comunista, con guerrilleros chilenos instruidos en Cuba, hubo un aumento en los años 80, pero siempre en niveles inferiores a los que alarman a la ciudadanía actual. Y la gente de entonces se paseaba por las calles a toda hora y sin temor.

Además, nunca se supo en los 70 u 80 de alguien que hubiera muerto "por pensar distinto". Al contrario, las libertades que el régimen garantizaba con sus reformas liberales favorecían también a quienes "pensaban distinto". Por eso hasta el Partido Comunista pudo crear su Colegio Latinoamericano de Integración y su Universidad Arcis. 

Y también la literatura ha recogido el exitoso homenaje a Salvador Allende. en el Teatro Cariola, en 1987, sin que nada sucediera a la numerosa concurrencia que, por cierto, "pensaba distinto". Era menos riesgoso que "en plena democracia".

Pues bajo el primer gobierno de Sebastián Piñera, se quiso presentar un documental favorable a Pinochet en el Teatro Caupolicán, pero los concurrentes fueron atacados y no pocos (ni pocas) quedaron heridos por "pensar distinto" a Marta Lagos. El gobierno de Pinochet garantizaba mejor la posibilidad de discrepar que el de Piñera.

Yo mismo tuve que ser rescatado en 2012, junto a otros, en un bus de Carabineros, a medianoche, del Estadio Providencia, porque estábamos rodeados de extremistas que nos apedreaban por haber presentado el libro de Gisela Silva Encina sobre Miguel Krassnoff, "Prisionero por Servir a Chile". Bajo gobiernos "plenamente democráticos" es peligroso pensar distinto a Marta Lagos.

En 1985, según un informe de la embajada norteamericana, el mayor peligro para la vida de los chilenos lo representaba el FPMR comunista. Los mártires de la UDI, Simón Yévenes y Jaime Guzmán, que "pensaban distinto a Marta Lagos" lo acreditan. 

Aún hoy es más peligroso "escribir distinto" que bajo el gobierno militar, cuando circulaban numerosas revistas opositoras como Hoy, Cauce, Análisis, La Bicicleta, APSI, Punto Final, contra una sola gobiernista, Ercilla.

Y no puedo terminar sin rendir homenaje a Heriberto Novoa, mártir de Carabineros que custodiaba la  Llama de la Libertad de pensar distinto de Marta Lagos y tantos más y que fue asesinado en 1980 por el MIR. 

Después el partido de Marta Lagos suprimió esa irritante Llama, no bien llegó al poder. Y Marta no dijo nada. Como no había dicho nada (¿o tal vez no tenía edad?) cuando su partido, que era el gobernante, prohibió el libro "Frei, el Kerensky Chileno", que me vi obligado a comprar en edición pirata en una vereda, y aún conservo.

domingo, 14 de julio de 2024

Sebastián Zamora: Un Privilegiado

En comparación con muchos excarabineros y exmilitares, Sebastián Zamora es un privilegiado: tuvo derecho a un debido proceso. Como resultado, fue absuelto. Si se hiciera real justicia, debería ser reincorporado a su institución. Más aún, debería ser indemnizado por el Estado, que lo envió a cumplir una misión peligrosa, como era la de enfrentarse con vándalos armados de molotovs, piedras, palos y, frecuentemente, armas de fuego (léase el libro de Claudio Crespo "G3: Honor y Traición" para comprobar la frecuencia con que los carabineros y sus vehículos reciben disparos). 

Sebastián Zamora, por contraste con sus camaradas enfrentados a la in-justicia, tuvo derecho a un debido proceso. La politizada fiscal Chong pretendió imputarle dos delitos claramente inexistentes en los hechos: homicidio frustrado y apremios ilegítimos. Salta a la vista de cualquier persona con sentido común que un policía enviado por orden superior a enfrentar a sujetos violentos no es por eso un "homicida" ni ello pasa por su mente. Ese funcionario se da por satisfecho con evitar delitos de destrucción, agresiones, incendios y saqueos. Utilizar la figura del "homicidio" presupone que Zamora tenía la intención de quitar la vida a otras personas, supuesto desvirtuado por el hecho de que, comprobadamente, en ningún momento extrajo siquiera una arma. Luego ni jurídica ni racionalmente podía imputársele un "homicidio frustrado". 

De otro lado, toda la evidencia apunta a que en momento alguno quiso infligir al joven que cayó al río un "apremio ilegítimo", figura penal que se refiere a la aplicación de tormentos con algún propósito policial. Simplemente, como lo demostraron grabaciones y testimonios, su conducta estaba dirigida a detener a un sujeto que había perpetrado una agresión contra un carro policial.  

En Chile se da la paradoja inconstitucional de una abierta desigualdad ante la ley, ya que un sector de exuniformados han sido y siguen siendo juzgados por un sistema procesal antiguo, que ofrece menos garantías a los imputados y es excesivamente dependiente de la calidad moral de los jueces, hoy gravemente deteriorada. 

Cuando había más jueces probos y caracterizados por su independencia política y elevación moral, el antiguo sistema funcionaba pasablemente. Pero desde que la justicia cayó en manos de activistas de izquierda se ha generado la más escandalosa y extendida prevaricación que registra nuestra historia. El examen de cualquier expediente que afecte a exuniformados revela la falta de pruebas, la violación de leyes expresas y vigentes y el empleo de "ficciones jurídicas" y figuras legales creadas con posterioridad a los hechos, todo lo cual repugna a la sana doctrina penal y al propio texto constitucional.

Por eso Sebastián Zamora, víctima de injusticia, persecución politizada y completamente inocente es, sin embargo, un privilegiado. Porque a él por lo menos lo ampara el derecho en un país que no vive un "estado de derecho" ("rule of law") sino una "ley de la selva" judicial, una anomia legal donde agonizan el derecho, la justicia y la verdad, con centenares de presos políticos ancianos, que ven a diario todos sus derechos humanos impunemente atropellados.


miércoles, 10 de julio de 2024

Voto Obligatorio "Sin Dientes"

Todo el poder que tiene hoy la izquierda se lo debe al voto voluntario: la Presidencia de la República, el empate en el Senado, el equilibrio en la Cámara, su mayoría de Gobernadores, Consejeros Regionales, Alcaldes y Concejales; y su mayoría en la Corte Suprema (integrada con votos de senadores y propuesta presidencial). Así se desprende del estudio Panel Ciudadano-Universidad del Desarrollo. 

Pero a los políticos les daba un poco de vergüenza que hace tres años, en la anterior elección de Gobernadores, segunda vuelta, con voto voluntario, sólo hubiera votado el 20 % del padrón. Y que en la anterior elección municipal lo hubiera hecho sólo el 38 %. Y que en la presidencial lo hubiera hecho menos de la mitad. Aparentemente poco democrático. 

De modo que se consagró el voto obligatorio, sobre todo porque la izquierda creía que aumentaría su ventaja. Pero se equivocó y con la obligatoriedad no sólo perdió el plebiscito constitucional del 4 de septiembre de 2022 sino también la elección de Consejeros Constitucionales del 7 de mayo de 2023, que consagró como mayoritario al Partido Republicano, entonces de extrema derecha y cuyo líder José Antonio Kast todavía no se había cambiado al "Acuerdo por Chile" de Piñera y Boric. De otro lado, si hubiera habido voto obligatorio en 2021 probablemente el presidente habría sido José Antonio Kast y habría tenido amplia mayoría en ambas cámaras.

La izquierda creía que era más popular entre los pobres, pero se equivocó. Entre los no-pobres de los grupos medios superiores C1 y C2 Boric tiene 40 % de apoyo. Entre los más pobres de los grupos D y E tiene apenas 19 % de apoyo, dice Panel Ciudadano-UDD.

Entonces los diputados Soto y Leiva, de izquierda, no pudiendo derogar el voto obligatorio, han procurado desvirtuarlo, suprimiendo la multa a quienes no sufraguen. La Cámara y el Senado han acogido su punto de vista, hasta ahora. Lo hacen porque, de otro modo, avizoran una debacle electoral de la izquierda: si sigue habiendo voto obligatorio de verdad la derecha arrasará en la elección de Gobernadores, Consejeros, Alcaldes y Concejales de octubre y en las de Diputados, Senadores y Presidente de la República de diciembre de 2025.

Es decir, este otro año Gustavo Petro volvería a gritar, "¡Resucitó Pinochet!". Pero por siete veces más razones que cuando lo hizo el 4 de septiembre de 2022.

A la inversa, si hubiera seguido habiendo voto voluntario en el plebiscito de 2022 y 2023 y en la elección de Consejeros del segundo proceso constituyente, todos los resultados habrían sido distintos. El estudio Panel Ciudadano-UDD señala que el "mamarracho" de la Convención habría sido aprobado por el 51 % de los votos; que en la elección del 7 de mayo de 2023 (del segundo proceso) la izquierda habría sido primera, con el 34 % de los votos y 17 consejeros, y no  el Partido Republicano.

Entonces Soto y Leiva, no pudiendo derogar el voto obligatorio, lo que no habría tenido presentación, decidieron "dejarlo sin dientes", suprimiendo la multa por no sufragar. 

O sea, sin derogarlo lo convierten en voluntario. De manera que tenemos circo para rato.

domingo, 7 de julio de 2024

Soy un Ultra

La corriente dominante sostiene que quienes piensan como yo son "ultras". Esto no es nuevo. Cuando todavía escribía en El Mercurio, al cual renuncié en 2008, su dueño, con quien mantenía una buena relación de amistad, me dijo con toda franqueza una vez que hablábamos de política: "Tú eres un ultra". En la única entrevista política que le conocí, concedida a La Tercera, la izquierdista Elisabeth Subercaseaux le preguntó cuándo se iba a deshacer de un "ultra" como yo, y él contestó que era un tema que estaba considerando.

Soy partidario de la democracia, entendida como el sistema en que las cosas de índole colectiva se resuelven votando y cada ciudadano tiene un voto. Como esto implica que las mujeres no tienen privilegios y no debe haber paridad de género ni un ministerio de la Mujer, soy un "ultra".

Pero soy "ultra" preocupado de nuestra soberanía. Me alcé contra la intervención millonaria y falseadora de los hechos de EE. UU. y Europa en el plebiscito de 1988, que impidió la reelección de Pinochet. Pero ni siquiera los comunistas protestaron contra esa "intervención imperialista yanqui".

Creo que todos somos iguales ante la ley y que ésa es la única igualdad que puede imponerse. Ni cuotas de género ni escaños reservados.  

Promoví como diputado el Acuerdo que convocó a los militares a deponer a Allende. Y no me arrepiento. Estimo al de Pinochet el mejor gobierno de la historia, atendidos los desafíos que venció. Y escribí su historia, probando que no fue un régimen violador de DD. HH. Y creo que éstos son un tema usado por la izquierda para dejar inerme a la sociedad ante la violencia y el terrorismo. Por sostener todo eso, soy un "ultra".

Lo mismo por denunciar que los funcionarios públicos tengan sueldos 50 % mayores que los de mercado y que los políticos puedan llamar a cambiar la Constitución sin plebiscito de entrada, siendo el ciudadano el titular de la potestad constituyente. Todo eso también me constituye en "ultra".

Creo que los seres humanos velan  preferentemente por su propio interés, de lo cual Dios por supuesto que se dio cuenta y por eso su mandamiento fundamental es "ama al prójimo como a ti mismo", sabiendo que esto es mucho, lo máximo. Por sostener que la legislación debe siempre tener en cuenta eso me llaman "ultra".

Creo que hay que perseguir y castigar a los delincuentes y respaldar a carabineros y policías, autorizándolos de hecho, como lo están por la ley, a usar sus armas de servicio. 

Si todo eso me hace un "ultra", quiero seguir siéndolo.

martes, 2 de julio de 2024

Hora de Pagar la Cuenta

El país ideal, sin jueces prevaricadores de DD. HH., sin conflicto en la Araucanía, donde Temucuicui era chileno y no entraban extranjeros indeseables. Fue el de los mejores treinta años, 1985-2015. Una sociedad libre, donde se respetaban las leyes. Democracia protegida, privatizaciones, estado reducido y una economía de mercado con bajos impuestos. Todos querían imitar el milagro. Claro, "los primeros fueron los militares chilenos. Thatcher y Reagan vinieron después", como reconoció el inglés Niall Ferguson.

Pero después de los presidentes DC Chile eligió izquierdistas. Al principio sólo le "rayaron la pintura" al modelo y el país creció cada vez menos. Entonces, siguiendo la Ley de Murphy ("todo siempre puede ser peor") vinieron extremistas de izquierda, marchando a cuya cabeza un tipo malo de la ídem decía tantas mentiras y recetaba tantos disparates que lo eligieron presidente. 

Afirmaba que Chile era un país desigual e injusto, que los mejores treinta años se habían logrado violando los derechos humanos y que la electricidad barata contaminaba el aire. Todo falso. Hidroaysén generaba electricidad barata y limpia, pero, tras perderse 200 millones de dólares en el proyecto, los políticos lo enterraron y eligieron las "energías renovables no convencionales", más caras y que contaminaban igual, porque necesitaban centrales tradicionales de respaldo. 

Y un estudio de Ignacio Briones probó que el  modelo chileno era de los mas igualitarios del mundo. (La Tercera, 05.11.22). Nadie lo contradijo.

Entonces en 2019, cuando la cuenta de luz del Metro subió 210 % debido a las "energías limpias renovables no convencionales", tuvieron que proponer un alza de $30 en la tarifa y se desató la revolución. "No son 30 pesos, son  30 años". 

Había un presidente demagogo y sin autoridad, que cedió en todo ante los revoltosos, en lugar de meterlos presos, y se rindió, entregando hasta la Constitución.

Pero nada de lo que decían era verdad. Rolf Lüders probó el 01.11.19 en La Tercera que si el gasto social llegara al 20 % más pobre, no habría pobres, pues tendrían $2 y medio millones mensuales por familia. Es que el grueso del gasto social va a manos de la burocracia dorada estatal. El Estado es el botín de los políticos, que se quedan con "la parte del león". Ahora hay que pagarles hasta por los votos que obtienen en la seguidilla de elecciones que han ideado "con fines de lucro".

Y de tanto crear impuestos el país dejó de crecer y la recaudación se estancó, porque subieron las tasas pero disminuyó la base, que sólo aumenta con el crecimiento y el país sólo creció 0,2 % en 2023. Volvimos a los últimos lugares de América Latina, como bajo Salvador Allende.

Para disimular el alza de la luz por culpa de las energías renovables no convencionales más caras, congelaron las tarifas. Pero ahora resulta que el gobierno les debe 6 mil millones de dólares a las empresas generadoras y, como hay que pagarlos, el consumidor va a ver aumentada su cuenta en 50 % o más. Y los políticos del gobierno no hallan cómo disimularlo ni explicarlo. 

Por eso y mil razones más, ya casi nadie se atreve a salir de noche. Van a perder las elecciones, pues una mayoría exclama lo mismo que el hombre común en todo el mundo, cuando su país está con el agua al cuello: "¡Necesitamos un Pinochet!" (lo dice Gonzalo Vial, no precisamente su admirador, en su biografía de aquél).

Los votos van a ir a quienes más se le parezcan. Y los políticos se han puesto a temblar.

viernes, 28 de junio de 2024

El Triunfo del Miedo

La derecha a secas va a ganar por paliza. El que más se parezca a Pinochet va a ser el próximo presidente. ¿Por qué? Porque la mayoría tiene miedo. Miedo de la delincuencia y el terrorismo, miedo a la inmigración desatada, miedo a los jueces que persiguen carabineros y dejan libres a malhechores. Los carabineros son los únicos que protegen a la gente, pero cuando los acusan en los procesos, el alto mando los "da de baja" (echa a la calle) y deben vender su auto y su casa para defenderse de fiscales y jueces tipo Chong y Urrutia. Eso está pasando. 

Hace un tiempo asesinaron a tres carabineros en el sur y todavía no hay un detenido. Esto se fue de las manos. Chile es el país con más miedo del mundo. El paraíso del delito y la guerrilla. Y el único gobernante que los derrotó fue Pinochet. Eso lo sabe la gente.

No se equivoquen. Hoy viene José Joaquín Brûnner, uno de la falange de  columnistas de izquierda de El Mercurio, sacando cuentas alegres por la mejoría de Boric en las encuestas y porque en el ambiente de negocios parece haber mayor tranquilidad. Pero es porque se acerca la elección de sucesor.

Al mismo tiempo viene la noticia de que a un padre de familia, que fue con sus hijos al estadio Monumental a ver Colo Colo vs. Alianza de Lima, por el hecho de vestir la camiseta del cacique lo golpearon, apuñalaron y asesinaron unos hinchas peruanos inmigrantes cuando fue a estacionar. Los hijos lo quedaron esperando.

La primera carta a El Mercurio de hoy es del dueño de un auto a  quien se lo robó un grupo de imberbes con pistolas en una bomba. Lo golpearon, apuntándole. Se queja de que se haya naturalizado decir "salí con vida, eso es lo único que importa." No es lo único. Sugiere irse a vivir a otro país.

En las cercanías de la casa presidencial asesinaron a un turista, no obstante que entregó su dinero y su teléfono. Aquí ya se mata sin ninguna necesidad, porque es casi gratis.

En Santiago roban 34 autos diarios, más de doce mil al año. Es otro gran negocio del "crimen organizado", el que más prospera en este momento. 

Vivimos en una sociedad en descomposición, la cual persigue policías y libera delincuentes. No se respeta la ley e impera el miedo. Miedo a salir a pie, por los motochorros, generalmente extranjeros. Miedo a salir en auto, por las encerronas. Miedo a estar adentro de la casa, por los "turbazos" en que llega un grupo de encapuchados, rompe la puertas y se lleva lo que quiere, mientras los dueños miran aterrorizados y después dan gracias por seguir vivos. ¡Qué sociedad más fantástica, hay tantos que seguimos vivos!

¿Cómo lo hacía Pinochet? Metía presos a malhechores y terroristas. Se les podía exigir documentos a todos y eso se hacía. Mandaba  regimientos a las poblaciones, reunían a los hombres y les examinaban los antecedentes en un computador. Los "patos malos" con orden de detención se iban presos. En ese tiempo el Instituto de DD. HH. no era parte del gobierno y por lo tanto no se dedicaba a proteger malhechores y perseguir uniformados. Al contrario, éstos estaban a salvo gracias a las disposiciones del Código de Justicia Militar que los eximen de responsabilidad por usar sus armas de servicio cuando son llamados a mantener el orden. Era otro país.

Hoy la gran mayoría de los chilenos quiere ese otro país, pero no se atreven a decirlo para que no los fune la izquierda. Y, acuérdense de mí, lo van obtener votando. Que José Joaquín Brûnner no cante victoria. Se va a llevar grandes sorpresas en las elecciones que vienen. Y la "dura", "extrema", "ultra" derecha que él vitupera va a obtener grandes votaciones. 

Pues el del votante con miedo es, lejos, el partido mayoritario del país.

martes, 25 de junio de 2024

¡Casi Hay un Partido de Derecha!

En Chile no hay partido de derecha desde que los existentes en los '90 arrancaron hacia el centro y la izquierda. Presa del pánico ante las invectivas comunistas y bajo la égida de Patricio Aylwin, que pedía perdón a la guerrilla mientras la llenaba de plata a través de la infausta Comisión Rettig, la UDI y RN suprimieron de sus Declaraciones de Principios el reconocimiento al régimen militar, en una "Operación Groucho Marx": "Estos son mis principios, pero si no le gustan, tengo otros..."

Ambos partidos, ya de centroderecha, se arrepintieron, pidieron perdón por haber colaborado a salvar a Chile del comunismo y después, liderados por Piñera, se proclamaron "defensores de los derechos humanos", que son el ardid mediante el cual la izquierda asalta el poder por las armas impidiendo a las entidades castrenses usar las suyas. 

La peor traición de la centroderecha fue perseguir judicialmente a los militares. Piñera triplicó las querellas, su ministra Evelyn Matthei se manifestó a favor del traslado del Penal Cordillera, encasquetada la hoz y el martillo sobre su portón de entrada, a Punta Peuco. Añadía que si ella hubiera sido presidente habría hecho lo mismo. En su delirio entreguista Piñera acusó en 2013 a los propios votantes que lo eligieron de ser "cómplices pasivos". 

Como reacción apareció el Partido Republicano, que fungió como de derecha, pero no se atrevió a poner en su Declaración de Principios el reconocimiento borrado por la UDI y RN. Con todo, se llenó de votos porque defendió la Constitución de 1980, pero después de obtenidos se alió con Piñera para derogarla y dictar otra en su lugar.

Diversos intentos por formar una colectividad confiable de derecha han fracasado hasta ahora. El único presidenciable de esa postura que marca en las encuestas, Johannes Kaiser, ha presentado al Servel los antecedentes para constituir oficialmente el partido Nacional Libertario.

Pregunté dónde firmar, pero me dijeron que había objeciones del Servel. Deben estar temerosos de un partido que gane las elecciones, respalde a los carabineros y encarcele a los delincuentes. De un cambio tan grande que el país no lo pueda resistir.



sábado, 22 de junio de 2024

El Prurito del Rector Sánchez

El rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, escribe cada cierto tiempo cartas a El Mercurio denostando al Gobierno Militar. Hoy ha publicado otra contra "la dictadura" y ofreciendo los servicios de la UC para la "búsqueda de detenidos-desaparecidos", un montaje del gobierno. 

Comenté antes otra carta al diario donde decía del régimen que salvó la libertad en Chile: "se atropellan los derechos humanos, se persigue a las personas por sus ideas y se presenta con fuerza una acción brutal" (El Mercurio, 09.07.23).

Ofreció el aula magna de la UC para un libro injurioso y falso del anterior comandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, donde acusaba a Pinochet de usar a la comitiva de Arellano para asesinar gente y culpar a los regimientos locales. Lo malo fue que usó como ejemplo un caso de 13 ejecuciones en Copiapó el 16 de octubre de 1973 que se perpetraron cuando la comitiva no había salido de Santiago. 

Párrafo aparte merece el teniente coronel (r) Jaime Manuel Ojeda Torrent, que se trepó a la mesa de honor del aula magna de la UC ese día y denunció la traición de Martínez y la falsedad de su libro. Ojeda Torrent es el más valiente de los perseguidos políticos militares. Iba con megáfono a los tribunales a denunciar a los jueces prevaricadores. Éstos al fin lograron condenarlo a diez años por hechos de 1973. Pero tengo entendido que no han podido apresarlo. "No se ha hecho injusticia". 

Volviendo a la teatral "búsqueda" a que quiere sumarse Sánchez: como es obvio, el Gobierno Militar sólo tiene que explicar los casos denunciados durante su mando. La escritora francesa Suzanne Labin se preocupó de investigarlos y en su libro "Chili: le Crîme de Résister", p. 243, dijo que la Vicaría de la Solidaridad le había informado que eran 651.

Y quien fuera director de la DINA, el general Manuel Contreras, precisó en su libro "La Verdad Histórica II: *¿Desaparecidos?", Editorial Encina, Santiago, 2001, los paraderos de esas personas:

1) Restos en el Instituto Médico Legal 96
2) Restos en patios 9,12, 25,26,27,28 y 29 del Cementerio General 113           
3) Exhumados en la Cuesta Barriga y lanzados al mar 153
4) Muertos en combate y lanzados al mar por la DINA  174
5) Personas sin existencia legal según el Registro Civil 26
6) Personas que pasaron a Argentina según Extranjería 56
7) Personas que viajaron a otros destinos según Extranjería 33
Total 651.

La Universidad Católica puede, utilizando las capacidades de sus académicos y alumnos, hacer interesantes aportes, como Identificar restos en el Instituto Médico Legal y en el Cementerio General, verificar personas sin existencia legal o que pasaron a Argentina u otros destinos.

También la Universidad puede identificar los restos de supuestos detenidos-desaparecidos que hay en la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), de acuerdo con La Tercera de fecha 18 de julio de 2018.                                        

Todas esas investigaciones, salvo la  última, pudieron hacerse a partir del 11 de marzo de 1990 en adelante y también antes. Sin embargo, no se hicieron.

La Universidad Católica puede prestar un gran servicio a la verdad histórica al verificar esos antecedentes y confirmar que el paradero de todos los detenidos-desaparecidos durante el Gobierno Militar es conocido. Es decir, que ya no hay detenidos-desaparecidos durante el Gobierno Militar. 

El rector Ignacio Sánchez estará feliz de corroborarlo. Y se despejará toda sospecha de que sus cartas estén inspiradas en odiosidad política hacia el gobierno que nos salvó del comunismo.


martes, 18 de junio de 2024

La Derecha Dura y la Democracia

Leyendo en Ex Ante un artículo de Pepe Auth, un experto electoral de izquierda bastante objetivo y que suele errar por menos que los demás, advierto que tiene un prejuicio sin fundamento: dice que "la extrema derecha" es una amenaza para la democracia en Europa y hace extensivo ese "peligro" a Chile.

Pero en Chile la derecha simplemente no puede ser una amenaza para la democracia, porque es la autora, la progenitora de la democracia chilena. Fue un presidente de derecha como el que más, Augusto Pinochet, quien entregó el poder después de la única transición a la plena democracia que ha habido, la de 1981 a 1989. Y ahí entró a regir la democracia prevista en la Constitución de 1980. En el articulado transitorio se contemplaba un plebiscito presidencial en 1988 que, si hubiera ganado el Sí, implicaba plena democracia desde el 11 de marzo de 1989. Y si ganaba el No, como sucedió, se prolongaba un año el mandato del presidente en ejercicio, hasta el 11 de marzo de 1990.

Pepe Auth, como toda persona informada, sabe que la derecha va a volver al poder en 2025, porque es lo que evidentemente quiere la gente. Por eso en todas las encuestas aparecen a la cabeza Evelyn Matthei y José Antonio Kast, ambos de centroderecha. Los de la derecha dura tenemos a nuestro candidato, Johannes Kaiser, confiados en que una mayoría, la misma que rechazó los proyectos constitucionales contemporizadores con la izquierda que apoyaban Matthei y Kast, va a votar por aquél porque representa la firmeza y la continuidad --largo tiempo interrumpida-- del país plenamente democrático, ordenado del 11 de marzo de 1990. Ése donde los delincuentes y terroristas estaban presos; ése que no sufría la guerrilla en la Araucanía ni el arribo masivo de delincuentes extranjeros por el norte; ése que, de haber continuado el mismo camino, creciendo 10 % anual como en 1989, habría alcanzado el status de desarrollado antes del siglo XXI. 

Entonces, los que somos de derecha pura y dura nos sentimos padres legítimos de la democracia chilena antes de que la enfermaran las izquierdas y los contemporizadores con ellas. Y queremos mejorarla y restablecerla. Hoy está desvirtuada, fallida. Se violan flagrantemente la Constitución y las leyes, reina el delito en calles y campos y los jueces persiguen más a los agentes del orden que a los malhechores. Hay una dictadura judicial que contraviene la Constitución y las leyes, mantiene a centenares de presos políticos  exuniformados seniles y cuyos derechos humanos son crónicamente atropellados, entre ellos ancianos privados de libertad por más de treinta años, que nunca tuvieron un debido proceso y privados hasta de derechos carcelarios que se respetan hasta a los peores delincuentes. En este país degradado, devora todo un Estado acromegálico enorme, cuya permisología no deja producir, que se autopaga remuneraciones en exceso (un 50 % más que en el mercado) y es incapaz de garantizar el orden público y evitar el deterioro de instituciones centenarias como el Instituto Nacional y la Universidad de Chile, hoy en proceso de descomposición; un país donde no rige la institucionalidad sino un confeso "parlamentarismo de facto" y los porcentajes de convencidos de que va por mal camino y de los que viven con miedo crónico son los más altos del mundo.

Somos la derecha, la madre legítima de nuestra democracia. Queremos rescatarla. Impedir que los verdaderos enemigos de ella sigan en el poder y la terminen de destruir. Y con el voto de la misma mayoría que nos ha respaldado en la última elección y en dos plebiscitos, venciendo a la izquierda y a los contemporizadores con sus dislates, lo vamos a conseguir.

sábado, 15 de junio de 2024

La Dictadura Judicial Contraataca

Después de que la Corte de Apelaciones de San Miguel, siguiendo el dictamen del fiscal de la misma, dictó un fallo respetando la ley y, por tanto, anulando una condena contra exmilitares, por una muerte de 1973, de la ministra sumariante Marianela Cifuentes, la Corte Suprema ha arremetido con todo contra sus subordinados de San Miguel: les invalidó el fallo y ordenó dictar otro, no sin antes ordenar reemplazar a todos los ministros que dictaron la sentencia por otros que den garantías de prevaricar fallando contra leyes expresas y vigentes.

Los ministros reemplazantes de San Miguel ya saben: tienen que condenar a como dé lugar a los ancianos exmilitares y, lo más importante (la médula del negocio) condenar al fisco a pagar decenas o, en lo posible, centenares de millones de pesos. Éste es el móvil principal en esta cuarta categoría del crimen organizado en Chile que son los juicios de DD. HH. Las demás tres categorías son el narcotráfico, el robo de madera y el de cables de cobre.

En lo concreto los supremos les están ordenando a sus subordinados de San Miguel cometer el delito del art. 223 del Código Penal, que pena con inhabilitaciones y presidio o reclusión de 61 días a 5 años a los jueces "cuando a sabiendas fallaren contra ley expresa y vigente en causa criminal o civil". 

Todos los demás fallos de DD. HH. de los últimos quince años han sido dictados contra leyes expresas y vigentes de amnistía, prescripción y, a veces, cosa juzgada. Así lo ha recordado un abogado de DD. HH. en medio de su desesperación por el de San Miguel, que le pondría término a su pingûe negocio si sentara jurisprudencia. Entretanto hay 328 presos políticos militares, sin contar los que han fallecido en prisión, esposados  a sus camas hospitalarios o suicidados.

En rigor, la dictadura judicial es sólo un síntoma más. Chile es hoy un país fallido. El 70 por ciento de la población afirma que vamos por muy mal camino y el 69 por ciento vive con miedo. Ambos top-ones mundiales.

El resto de la sociedad "mira para otro lado"- Y ¿por qué el abogado de DD. HH. dice que que "se ha roto una tradición de 15 años"? Porque antes la segunda sala respetaba las leyes vigentes. Editorialmente El Mercurio aplaudía "la preservación de la legalidad" al aplicarse una prescripción (véase fallo y editorial citados en mi libro "Miserias Morales de la Chilenidad Actual", página 121). 

Lo actual es escandaloso. Es una "banalización del mal". Es lo que ha llevado al general desánimo interno y a la revista The Economist a degradar a Chile de "democracia plena" a "democracia defectuosa"


miércoles, 12 de junio de 2024

Boric Engaña a Scholz

En mal momento pasó Boric por Alemania, porque el socialdemócrata Scholz lo recibió todavía groggy tras la paliza que le propinó la derecha en las elecciones del parlamento europeo.

A la vez ambos aparecieron ayer juntos suscribiendo un disparatado artículo en El Mercurio, culpando al CO2 del cambio climático, lo cual está científicamente comprobado que es falso. Pero por ese error ambos gobernantes han perjudicado a sus respectivos gobernados porque, siguiendo la errónea tesis, han encarecido las cuentas de luz de sus respectivos países.

Llamé a Douglas Pollock para que mandara a El Mercurio un artículo rectificatorio, pero estaba tomando un avión a Europa, donde asistirá a una conferencia en la cual, justamente, se ratificarán las pruebas de que el CO2 no ha hecho subir la temperatura de la Tierra, de que las fuentes eólicas y los paneles solares generan energía más cara que la basada en el carbón y, además, necesitan plantas de respaldo alimentadas por combustibles fósiles y generadoras de CO2. Por eso Alemania y Chile pierden competitividad.

Los chilenos hemos hecho el ridículo cerrando plantas a carbón y Pollock ha demostrado que, mientras lo hacíamos, China e India construyeron plantas a carbón por 90 veces las cerradas por Chile. Porque no creen que el CO2 influya en el cambio climático, no sacrifican su competitividad ni su crecimiento ni hacen el menor caso del Acuerdo de París para reducir el CO2. 

Seguramente eso incide en nuestro acero más caro que el chino y en el riesgo de tener que cerrar Huachipato o subsidiarlo. Por supuesto, chinos e indios tienen energía barata y nosotros una de las tres más caras del mundo.

También Boric buscó en Alemania mejorar su alicaída popularidad diciendo mentiras, en coro con Scholz, contra el gobierno militar cuyo legado nos dio los "mejores 30 años de la historia de Chile".

Una, que Alemania iba a ayudar en el "plan de búsqueda" de miles de "detenidos-desaparecidos" en dictadura. ¡Cuidado, Scholz, eso es una estafa! Pues durante el gobierno militar fueron denunciados 651 casos de personas desaparecidas tras su detención. Todos los demás los han inventado después de 1990 y nunca nadie los mencionó cuando Pinochet era presidente. Y el paradero de todos los respectivos restos está precisado.

Le debemos a una autora francesa, Suzanne Labin, haber probado ante el mundo que los casos eran sólo 651 (pág. 243 de su libro "Chili: Le Crime de Résister"). Y después de 1990 fue precisado el paradero de todos ellos: muchos habían abandonado el país, eran simples viajeros, según registro de las autoridades; otros ni siquiera figuran como personas existentes en el Registro Civil; otros más fueron reconocidos como muertos en combate o perseguidos por los servicios de inteligencia y sus restos lanzados al mar; otros fueron vistos vivos después por personas naturales que hicieron declaración jurada ante notario; y el mayor número yacía después de muertos en una decena de patios del Cementerio General y en los depósitos del Servicio Médico Legal. 

Y, por supuesto, el más famoso de todos, que dio título a la película del marxista griego Costa Gavras, Missing (Desaparecido), cuyos restos fueron encontrados, entregados a diplomáticos norteamericanos y enterrados en EE. UU.

¡Cuidado. Scholz, te van a sacar plata mediante engaño estilo "Fundaciones"! Y por casos "creados" después de 1990.

El otro engaño (o ignorancia) de Boric derivó de pedir público perdón por los supuestos "miles de exiliados del gobierno militar". No hubo tales. Hubo unas pocas expulsiones aisladas en 17 años, que se cuentan con los dedos de las manos. Lo que hizo ese régimen fue dar pasaportes a personas requeridas por la justicia por actividades delictivas, muchas de las cuales se asilaron en embajadas. Pero no eran ni fueron "exiliados", sino simplemente prófugos que pedían y obtenían, con apoyo externo, autorización para viajar a otros países.  Por ejemplo, El Mercurio del 12 de abril de 1978 informaba: "Otras 109 personas condenadas en el marco de la Ley de Seguridad Interior recibieron autorización para salir del país".

El teatral pedido de perdón de Boric es otro testimonio de ignorancia (o mala fe) suyo. Mala para la imagen de Alemania su complicidad en ello.


lunes, 10 de junio de 2024

¿Por Qué la Derecha?

Los triunfos que la derecha, es decir, el ideario de la libertad con orden, ha obtenido en la elección del parlamento europeo son notables. Tanto que en la que fuera Alemania Comunista ha pasado a ser el mayor partido Alternativa para Alemania, el de más a la derecha. Es notable que sean precisamente los alemanes que vivieron el comunismo en carne propia desde 1945 hasta 1989, los más derechistas de todos. Porque si bien en el resto de Alemania Alternativa también creció, no lo hizo al grado de convertirse en la colectividad mayor de todas.

En Chile se está gestando un fenómeno parecido, aunque la situación acá no es como en Europa, sino casi por completo incivilizada: vivimos en un estado de anomia, que significa "ausencia de ley" y cercano al caos. Acá un turbazo de varios sujetos entra a tu casa y te lleva todo. O una encerrona te saca de tu auto y si los carabineros llegan a pillar a los delincuentes, los jueces los dejan libres por ser menores o porque se trata sólo de receptación. Gente decente encerrada y maleantes libres no es en Chile una caricatura.

La mayoría está espantada y sólo espera poder pronunciarse pronto en las urnas, desengañada de quienes llegaron al poder en 2022 ejerciendo la violencia y aprovechando que las élites estaban obnubiladas y sin liderazgo real, pues el presidente que había contemporizaba con los facciosos. Se creó por la izquierda un clima de opinión inverosímil, tanto que, cuando se inició la arremetida delictual, varias voces pedían público perdón a los vándalos que saqueaban e incendiaban, como si los hubieran empobrecido. En esos días fui expulsado de Canal 13 por defender la acción policial con que Pinochet liquidaba en un día cada conato revolucionario (le habían hecho 17 entre 1983 y 1987). Por suerte dos plebiscitos permitieron a la mayoría honesta hacer volver en sí al país y defender los cánones sobre orden público que nos rigen pero no se aplican. 

En el cambio de opinión mundial que se está registrando ha tenido un papel principal el surgimiento de la figura de Javier Milei, hoy luchando por reconstruir su patria "desde las cenizas", tal como la Junta Militar lo debió hacer con Chile hace ya medio siglo. El discurso de libertad y orden de Milei ha dado la vuelta al mundo de una manera sin precedentes. La sola entrevista con el periodista independiente norteamericano Tucker Carlsson registró una audiencia del cinco por ciento de la población mundial, más de 400 millones de personas.

En nuestro medio hemos carecido de una personalidad política tan definida como Milei, pero es interesante apreciar un pronunciado giro a la derecha en las encuestas, en particular en la realizada recién por Imaginacción, cuyo socio principal es un expolítico de izquierda (MAPU, luego socialista), Enrique Correa, reconocido lobbysta de la plaza. 

Su encuesta anticipa que en las próximas elecciones de octubre la oposición, principalmente de derecha, derrotará al régimen por 56 a 44%. El ciclo de despedida de Boric a través de las urnas, así iniciado, culminará en diciembre del próximo año.

Temo que sin una mano enérgica y las mismas ideas de derecha de Milei, iguales a las de Pinochet y la Junta, que hicieron posible el milagro chileno mundialmente reconocido, no vamos a poder superar el estado de anomia en que nos ha sumido otra vez el marxismo, con el cual, increíblemente, hemos vuelto a tropezar.

viernes, 7 de junio de 2024

Soluciones de Derecha

Si hubiera habido un Presidente de derecha, la cuenta pública habría sido completamente distinta. En primer lugar, habría hecho ver que Chile sufre de un mal grave: tiene un Estado hipertrofiado, es decir, demasiado grande y caro para lo que el país puede soportar. ¿Por qué? Porque ha sido gobernado por regímenes de izquierda durante 34 años. Pues también, para efectos prácticos, los gobiernos de Sebastián Piñera fueron de izquierda. Apenas asumido el primero, su Ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, se vanagloriaba de que habían triunfado en la elección presidencial porque habían abrazado "las banderas de la izquierda", que son las peores, pero muy populares entre los chilenos.

Piñera fue un contemporizador irredento con la izquierda. Y ahora se aprestaba a reunirse con Boric y preparar su tercera presidencia. En el fondo de su corazón amaba al socialismo y sostenía que debía haber un Estado "fuerte, que norme, regule, controle y fiscalice". Siempre  empleaba tres adjetivos, preferiblemente sinónimos, pero le gustaba tanto el Estado que en su caso empleaba cuatro.

Entonces, si por primera vez después de Pinochet hubiera habido hoy otro Presidente de derecha, las soluciones a los cuatro problemas fundamentales actuales (seguridad pública, pensiones, salud y educación) habrían sido las diametralmente opuestas a las socialistas de Boric y la cuenta pública habría prometido: 

(1) Severa persecución judicial contra delincuentes y terroristas, especialmente los de la primera línea de la insurrección del 18-O. Hoy la justicia "al estilo Chong" persigue más a los carabineros y Boric indulta y pensiona a delincuentes y terroristas. Chile es el "paraíso de los malhechores" y hasta los exporta. Somos el país con más miedo en el mundo por segundo año consecutivo en el índice británico Ipsos. Ahora el 69 % de los chilenos tiene miedo. El año pasado era sólo el 63 % y también éramos los que teníamos más miedo.

(2) Como las remuneraciones pagadas por el Estado burocrático son 50 % más altas que las de mercado (La Tercera, 20.11.21, no desmentido hasta hoy), para mejorar las pensiones se aplicaría un impuesto de 10% a la renta de los funcionarios públicos sobrepagados, lo que permitiría una pensión mínima para todos los jubilados de $400 mil mensuales, según calculó la economista Bettina Horst en El Mercurio hace un par de años. Claro que yo defiendo su idea con mucho más entusiasmo que ella, supongo que contenida por razones políticas, pero eso no les quita fuerza. Boric promete apenas $250 mil pesos de pensión mínima y recargarnos con más impuestos a todos para financiarla. 

(3) Salud: según ha demostrado reiteradamente el experto Rafael Caviedes Dupra en cartas a El Mercurio, lo que gasta Fonasa por afiliado permitiría a todos éstos tener planes en Isapres, que dan mejor calidad de servicio y no tienen listas de espera. Es decir, "Isapres para todos", lo que implicaría un salto adelante en la calidad de la atención de salud en Chile.

(4) Educación: El Ministerio de Educación es un monstruo burocrático ineficiente y, con lo que cuesta, que se ha multiplicado por diez en términos reales en 34 años de "gobiernos de los peores" (que son los políticos y sus partidos, según todas las encuestas), se podría dar un voucher o documento de pago de enseñanza a cada alumno de familia pobre para matricularse en los mejores colegios pagados a su elección, los que comenzarían a ampliarse y multiplicarse. Y como la educación particular pagada es la mejor, según todos los indicadores, la enseñanza en Chile con "todos teniendo patines" daría un salto adelante espectacular. ¡Seríamos un país de "gente bien educada"! Hoy inimaginable.

Imposible no citar el artículo de Rolf Lûders del 01.11.19 en La Tercera, donde probó que si el "gasto social" del gobierno fuera a los dos deciles más pobres, no habría pobres en Chile. Cada familia tendría $ 2 millones y medio al mes. Hoy la burocracia dorada de izquierda se queda con esa plata.

Eso es cuanto la derecha puede ofrecer. Esa sería la cuenta anual de un nuevo Presidente de derecha a secas y no-contemporizador, como Johannes Kaiser, por ejemplo, que es mi candidato. 

Quedo a la espera del voto de los chilenos para hacerlo realidad.

domingo, 2 de junio de 2024

Boric 007: Licencia Para Matar

Los socialismos reales, como el que está en el poder en Chile, buscan solucionar problemas matando gente. El Libro Negro del Comunismo, obra de varios intelectuales franceses, documentó que hasta la época en que se publicó (años 90) los socialismos reales habían matado 100 millones de personas. Javier Milei suele repetir que han sido 150 millones y sospecho que la diferencia se debe a que contabiliza las hambrunas provocadas por las colectivizaciones de tierras en Rusia, China y otras naciones,  gobernadas por el comunismo.

Matar gente como solución está en su ADN y por eso en su cuenta pública Gabriel Boric anunció que va a patrocinar el aborto libre mediante una ley. Matando el cigoto, embrión o feto es la manera en que muchas mujeres solucionan sus embarazos no deseados. Es decir, matando a otra persona, como lo es desde la concepción, aunque, por mandato de la naturaleza, esté dentro del cuerpo de una mujer. 

Andrea Bocelli, que nos visitara hace poco, reveló que antes de nacer él le recomendaron a su madre que abortara, pero ella se negó y lo tuvo. Y nació ciego, pero ha sido muy exitoso y aparentemente feliz, para bien de la Humanidad. 

En estos días hay una defensa humanitaria internacional de una joven presa política cubana a la cual el régimen comunista quiere obligarla a abortar en la cárcel, a lo cual ella se niega. El movimiento solidario a su favor ha logrado que no la sigan presionando para que mate a su criatura.

Boric, que está "a la izquierda del comunismo", según propia confesión, necesita, para legalizar la muerte de quien está por nacer --se lo informo desde ya, porque parece no estar enterado, como es habitual en él-- una reforma constitucional. Pues nuestra Carta, que es civilizada y ha sido dos veces ratificada por el pueblo en estos dos últimos años, "protege la vida del que está por nacer". 

También propone, anunció ayer, consagrar la eutanasia, es decir, la muerte de las personas mayores que la soliciten. Quiere legitimar lo que, en el lenguaje común, se llama "suicidio asistido" y que constituye el delito penado en el art. 393 de nuestro Código Penal. Es decir, busca despenalizar esa forma de homicidio a petición de los interesados que sufren enfermedades dolorosas. 

Esto no lo entiendo bien, porque él ha citado, en su cuenta pública, el caso de una persona que sufre grandes dolores y pide que alguien les ponga término quitándole la vida, en circunstancias de que todo el mundo sabe (y yo mismo lo he sabido desde niño por experiencia familiar) que cuando los sufrimientos son muy grandes los médicos prescriben morfina, a sabiendas de que ésta los alivia, pero acorta la vida del paciente.   

Yo desconfío profundamente de estas "autorizaciones para matar" conferidas por ley. Si la gente está viviendo más, reconózcanlo en la legislación y aumenten la edad de jubilación para que las personas se autosustenten más años, pero no confieran a terceros autorización para acortarles la vida para deshacerse de ellos, que es lo que en el fondo busca el proyecto. 

"Es que", dicen, "aumentar la edad de jubilación es impopular". Típico de la izquierda y la centroderecha entreguista. En lo único que piensan es en la próxima elección. La mayoría parlamentaria no debe hacerse cómplice de matar sólo porque esté en el ADN de los socialistas. 

Y lo está tanto que en Chile acordaron, en todos sus consejos partidarios desde 1965 en adelante, que la vía armada era la que debían adoptar para suprimir la "democracia burguesa", durante la cual perdían las elecciones. Y lo acordaban por unanimidad, aunque para el exterior se proclamaran "demócratas", como le gustaba a Salvador Allende, mientras entregaba armas a los grupos militarizados de la UP, con las cuales se proponían matar a los que se les opusieran, por supuesto. Los comunistas eran menos letrados y mataban directamente, como al senador Jaime Guzmán, a los escoltas de Pinochet y a tantos más. Pero como son maestros en dar vuelta las cosas, después posaron de víctimas, como si no hubieran sido ellos los agresores.

Aprovecho de rendir homenaje a Heriberto Novoa, carabinero asesinado por la izquierda mientras resguardaba la Llama de la Libertad, en 1980. Por supuesto Aylwin en 1990 suprimió la Llama e indultó a los asesinos, no sin antes pedirles perdón con lágrimas en los ojos.

Supongo que ni la centroderecha entreguista y ni siquiera los DC y exDC, Amarillos y Demócratas actuales, le van a entregar los votos a Boric para que exista aún mayor licencia para matar de la que ya hay y que tiene aterrorizado al país, comenzando por la ministra del Interior.  


jueves, 30 de mayo de 2024

Muertos de Miedo

La ministra Tohá dijo que "le daba miedo" decretar el traslado de la estatua del general Baquedano a la Plaza Italia, a su plinto (palabra que aprendimos gracias a la asonada marxista). Añadió que tampoco le agradaba la idea de reponer el monumento, porque, obviamente, ella fue parte de la revolución que lo vandalizó y obligó a sacarlo de ahí, cosa que todo el mundo no revolucionario, muerto de miedo ante la destrucción, los incendios y los saqueos de la "primera línea", también toleró. 

Pues opino que por lo menos el Ejército habría debido llevar a efecto, al día siguiente del primer atentado a Baquedano, un desfile público de desagravio, con marcha de tropas y banda de músicos. Y, además, habría debido instalar una guardia armada permanente en torno al monumento.

Pero su comandante en jefe en 2020 era Ricardo Martínez, que abjuraba de la gesta militar libertadora, tanto que publicó un libro calumnioso contra su propia institución, acusándola de disponer en 1973 de la comitiva de Arellano para cometer crímenes y culpar a los regimientos locales. Este blog fue el único medio que desvirtuó la publicación, pero debo reconocer que el actual comandante en jefe, Javier Iturriaga. por lo menos ordenó bajar de la página web del Ejército el deleznable libelo.

No obstante, éste recibió un vergonzoso respaldo del rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, injuriador habitual del Gobierno Militar, quien facilitó el Aula Magna de la UC para presentar el canallesco panfleto. Ello me dio ocasión para escribir un blog titulado "La Universidad Católica Miente", recordatorio del letrero "Chileno: El Mercurio Miente", que colgaron en la UC, en 1967, los extremistas que se habían tomado esa casa de estudios, en venganza porque el diario decía que eran títeres del comunismo. Pero el dúo Martínez-Sánchez no contaba con que el más valiente de los militares retirados, comandante Jaime Manuel Ojeda Torrent, hoy preso político prófugo de la injusticia, subiera al estrado del Aula Magna, calificara a Martínez de traidor y explicara por qué su padre había sido cesado en el Ejército.

Si la ministra tiene miedo, hoy los que no amparamos delincuentes ni terroristas estamos muertos de miedo, porque los maleantes se han enseñoreado del país y han recibido masivos refuerzos desde el extranjero, mientras la justicia deja libres a los malhechores y los fiscales acosan y acusan a los carabineros, y en particular a la carabinera para la cual un fiscal pide 25 años de presidio por haber permitido que se obligara a un grupo subversivo detenido a cantar la Canción Nacional, lo que puede haber constituido un suplicio para quienes los oían, pero no para ellos.

Todo conduce a que los delincuentes son cada vez más violentos y numerosos y ya las turbas hasta entran a saco a las casas particulares. Mientras, los fiscales persiguen carabineros y los jefes de éstos los dan de baja, en lugar de defenderlos. 

El Mercurio del martes, pág. A4, informa pero destaca poco que la encuestadora inglesa Ipsos de nuevo nos sitúa como el país con más miedo del mundo. Ya lo había comprobado la misma firma el año pasado. Ahora estamos peor.

Mientras no haya un cambio de régimen, de éste a otro no nacido de la violencia, el delito ni la subversión, esto no va a cambiar.

lunes, 27 de mayo de 2024

Chile es Travesti

Es risible el debate suscitado porque José Antonio Kast dijera en España que Gabriel Boric es un travesti político, en circunstancias en que ostensiblemente lo es. Y no sólo eso: todos sus críticos y partidarios lo son o lo han sido. Por eso han surgido los recuerdos de cuando Michelle Bachelet acusaba a la derecha de travestismo. Por supuesto, hay muchos casos más.

En estos días El Mercurio publicó, en su sección "Hace 30 Años", la aceleración de las privatizaciones y las concesiones de obras públicas bajo el gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, olvidando que la Concertación gobernante había sido la más crítica de las privatizaciones de Pinochet y de que además hubiera dictado el primer decreto de concesiones. 

A la larga todos los ciudadanos se han travestido una y otra vez. Los videos de la Quinta Vergara poniéndose entera de pie para ovacionar unánimemente en 1974 al Presidente de la Junta, Augusto Pinochet y su señora Lucía Hiriart, pueden verse en paralelo con otros recientes, que dan cuenta de que en dicha Quinta, hoy travestida, no se puede siquiera mencionar al mismo estadista. Y la Cámara acordó por 60 a 52 que no fue presidente ni estadista.

Otros videos delatan el travestismo de Patricio Aylwin: en 1973 aseveraba aseveraba que la Unidad Popular conducía a Chile a una tiranía comunista y que no se debía criticar a los militares por combatirla, mientras en otro de 1990 negaba haber sostenido eso, que lo había inventado "el Libro Blanco ese" que publicó la Junta. Y ya travestido por completo, sentó en 1991 a los militares en el banquillo de los acusados por la Comisión Rettig, por haber acudido al llamado de Aylwin a impedir la tiranía comunista.

La "marcha más grande de la historia de Chile", en apoyo a la asonada del 18 de octubre de 2019, liderada entre otros por Gabriel Boric ¿cómo se concilia con el hecho de que éste hoy casi no pueda presentarse en público sin recibir una sonora rechifla de la gente? Es que "la gente" se ha travestido. De celebrar al "perro mata pacos" a llorar colectivamente a los mártires de Carabineros caídos a manos de los amos de dicho "perro".

El hoy denominado "travestismo" es la versión sofisticada del hábito chileno de "darse vuelta la chaqueta". Este nació de la conducta de militares de casaca azul con forro blanco, que defendían al gobierno de Balmaceda en la Revolución de 1891, para ir a entregarse, sin que se les disparara, a las filas de los soldados de casacas blancas del ejército revolucionario, en las batallas de Con Con y Placilla.

La "renovación socialista" de los '80 no fue sino un acto masivo de travestismo político-económico de quienes llamaban, en todos sus congresos de los '70, a derrocar por las armas a la "democracia burguesa". En la "centroderecha" (en sí lo de "centro" fue un travestismo), las supresiones de los sendos reconocimientos al legado del régimen militar en las Declaraciones de Principios originarias de RN y la UDI en los '90 ¿no fueron sino dos catarsis colectivas de travestismo?.

Y el propio José Antonio Kast protagonizó el mayor travestismo de 2023, cuando llevó a su partido Republicano, convertido por tres y medio millones de ciudadanos en el más grande de Chile por oponerse a una nueva Constitución, el 7 de mayo de ese año, y lo travistió para apoyar precisamente una nueva Constitución, junto a Boric y Piñera, en su "Acuerdo por Chile". 

Claro, el pueblo elector, menos travestista que los políticos, los derrotó a los tres el 17 de diciembre. Y así estamos hoy, cuando hay un solo candidato, Johannes Kaiser, que no se ha travestido... hasta ahora, y por lo tanto, votaré por él.  

sábado, 25 de mayo de 2024

Gloria y Victoria

Antes de que se vaya el "mes de las glorias navales" hay que dejar constancia también de las victorias. Y de la impronta que legó a Chile el 21 de mayo. Ayer vi de nuevo el video del exoficial de marina argentino en que refería por qué su armada, encabezada por el portaaviones 25 de Mayo, el 23 de diciembre de 1978 dio media vuelta en el canal Beagle, cesó su rumbo de invasión a Chile y puso proa al norte, en retirada, con su séquito de cruceros y fragatas, desistiendo de su intento. Desde ese momento se supo que no habría guerra, como informó "La Segunda", diario que yo dirigía, esa misma tarde, gracias a un llamado desde el Ministerio de Defensa, recibido por mí.

Eso se lo debimos a la impronta de gloria y heroísmo que legó Prat: vencer o morir. Porque los buques argentinos se encontraron con 27 botes de goma, tripulados por marinos chilenos suicidas, que portaban, cada uno, un torpedo con 700 kgs. de dinamita, capaz de hundir un buque argentino. Eso lo relató el exmarino argentino.  Por eso no hubo invasión ni guerra. Lo debimos a la impronta heroica establecida por Prat.

Pero, además de la gloria, el combate naval de Iquique nos legó una victoria, insuficientemente recordada. Pues ha habido una relativamente escasa mención de la faz exitosa del combate, que lo constituyó en un triunfo naval chileno. No ha sido suficiente lo que se ha destacado a Carlos Condell, comandante de la goleta de madera Covadonga y su tremenda victoria. Porque su combate desigual contra la fragata blindada peruana, la Independencia, dotada de espolón, como el Huáscar, tuvo como resultado ese día una pérdida mucho mayor para el Perú que para Chile. Perdimos la Esmeralda, pero el Perú perdió un buque de mucho mayor categoría y potencia naval, tan importante como el mismo Huáscar. Ambos eran los únicos blindados de la flota peruana. Y el Huáscar fue capturado poco después.

En definitiva se registró ese día 21 de mayo, entonces, un gran triunfo chileno, atribuible al comandante de la Covadonga, Carlos Condell, a su pericia náutica y la de su tripulación. Y por eso en el balance final el combate constituyó un éxito para Chile, una victoria naval. Porque infligió al enemigo un daño mucho mayor que el recibido por la parte chilena, constituido por el hundimiento de una nave de madera al borde del desuso, como la Esmeralda, apodada entonces "la Mancarrona" por su lento andar y cuyas calderas reventaron durante el combate de Iquique.

Con sus habilidades marineras Condell había conducido a la Independencia a encallar y quedar a la merced del fuego de la Covadonga, sin poder responderlo. Tanto que arrió su bandera y se rindió. Su tripulación fue salvada después por el Huáscar, que acudió a recogerla. Entretanto, el indefenso transporte chileno Lamar logró huir hacia el sur y quedó indemne, lo mismo que la Covadonga, que hizo lo propio..

En cada 21 de mayo cobra mayor relieve, merecidamente, el glorioso heroísmo de Prat. Pero fue Condell el que le brindó el triunfo a Chile y eso hay que destacarlo también y no olvidarlo.. 

Gloria y victoria. Prat y Condell, compañeros de curso. Fue lo que brindaron ambos sucesivamente a su patria y a la posteridad.

lunes, 20 de mayo de 2024

El Legado de Prat

Arturo Prat grabó una impronta en el carácter chileno, a la cual mucho le debemos. Creo que no sabemos bien cuánto. 

Apenas llegó al resto del país la noticia del combate naval de Iquique y de la inmolación del héroe, se llenaron los cuarteles de voluntarios dispuestos a morir por la patria. Prat esa mañana había advertido a sus hombres: "el combate es desigual... pero nunca se ha arriado nuestra bandera ante el enemigo, y no será ésta la ocasión de hacerlo". 

La noción del heroísmo ya estaba en el carácter chileno, desde que una de las estrofas no cantadas habitualmente del himno nacional advertía: "Si pretende el cañón extranjero / Nuestros pueblos osado invadir / Desnudemos al punto el acero / Y sepamos vencer o morir." "Vencer o morir". Lo tenemos en la estirpe. Según otra estrofa: "Con su sangre el altivo araucano/ Nos legó por herencia el valor/ Y no tiemble la espada en la mano/ Defendiendo de Chile el honor."

"Vencer o morir" se convirtió en nuestra "arma secreta". Hace probablemente cuarenta años un alto oficial de la Armada, estando en el molo de abrigo del puerto, tras haber almorzado en uno de los buques, me reveló que teníamos un "arma secreta" y me ofreció mostrármela. Lleno de curiosidad, lo acompañé hasta el final del molo, donde me mostró las naves acoderadas, diciéndome: "Ahí está". Bajo cada puente de mando, en grandes letras doradas, sobre un lustroso fondo de madera barnizada, se podía leer: "Vencer o morir".

El sábado 23 de diciembre de 1978 una junta militar argentina había resuelto invadir Chile, aprovechando una superioridad militar, naval y aérea, y apropiarse de nuestras islas australes. En la mañana su portaaviones "25 de mayo" se internó por el Beagle seguido de cruceros, acorazados y destructores para desembarcar en nuestras islas Picton, Nueva y Lennox. Repentinamente el portaaviones se vio rodeado de 27 botes de goma con marinos chilenos suicidas, portando cada uno un gran torpedo. El portaaviones lo pensó mejor y resolvió virar en "u", poniendo proa al norte, lo mismo que su séquito.

Yo era director de "La Segunda" y ese día me llamó un marino y me informó de todo a mediodía, cuando el vespertino estaba a punto de imprimirse. No iba a haber guerra. Titulé con eso y "La Segunda" dio un golpe noticioso mundial. Ese ejemplar del 23 de diciembre de 1978 y su titular son históricos.

Quedan hoy unos pocos chilenos capaces de asumir el legado de Prat. Leo en la página 183 del libro de uno de ellos, el carabinero Claudio Crespo --best-seller ya por seis semanas-- lo que, escribe, vio en el espejo tras ducharse, el 18 de noviembre de 2019, después de un mes de enfrentar en desventaja numérica a los maleantes del "estallido", mercenarios drogados y ebrios: "En lo primero que me fijé fue en mis ostentosas ojeras. Estaba pálido como papel, había bajado unos 20 kilos desde el 18 de octubre, lo que causó cambios drásticos en mi rostro. Tenía más canas y un poco más de arrugas en la piel. Me veía más viejo. Estaba flaco, mi ropa me quedaba grande, parecía un enfermo. En mi cuerpo tenía varias heridas y dolencias, muchos moretones y algunas articulaciones con molestias, como mi rodilla y mi mano derecha."   

Su institución lo dio de baja y el Estado está procurando condenarlo a doce años de presidio. 

Pero si alguien ha asumido el legado de Prat hoy, seguro que es carabinero.