jueves, 30 de diciembre de 2021

Un País en Estado de TOC

Voy a volver a leer “1984”, de Orwell, porque el resultado de la elección me ha convencido de que Chile se ha convertido en un país orwelliano: los valores son antivalores, la verdad es mentira, lo que es bueno está mal, vence el peor con el programa peor y la mayoría lo encuentra genial; la justicia comete injusticias, la verdad judicial es mentira, el derecho se ha retorcido hasta distorsionarse por completo y la historia oficial y el profesorado enseñan lo contrario de lo que realmente sucedió. En fin, los totalitarios violentos pasaron a ser "demócratas" y “víctimas”, mientras quienes los vencieron y pacificaron al país hoy son “violadores de DD. HH.” que se secan en la cárcel.

Tan generalizada es la metamorfosis que una columnista de “El Mercurio”, representativa como la que más del establishment (Instituto de Chile, Academia de Ciencias Sociales y ¡Morales!, Academia de la Lengua) admira “a los jóvenes (que) ya no se casan, pasan a vivir juntos como parte natural de una relación”. Y se alegra de la derrota de José Antonio Kast porque, dice, “es un hombre de verdad a la antigua, y la antigua ya no se sostiene”. El “pecado social” de éste es ser casado en únicas nupcias, tener nueve hijos y defender a la familia como núcleo fundamental de la sociedad. Y ha sido derrotado por “el bueno”, un adversario que a los 35 años no se ha casado ni tiene hijos, “un hombre nuevo”, moderno, un mechero contrario a las normas, que pasa bajo los torniquetes y, por tanto, “se sostiene”.

Siendo que un verdadero problema en este país angosto y ajeno es, justamente, que los jóvenes ya no se casen y la falta de matrimonios: hoy día el 75 % nace fuera del mismo y la carencia de padre o madre, y a veces de ambos (destino: Sename), conduce a que no reciban una formación adecuada y terminen en la “primera línea”, atacando a la policía, destruyendo, saqueando, quemando iglesias, descuartizando imágenes de Cristo crucificado, apoyando la revolución marxista y votando por Boric. Pero ¡qué modernos son! ¡Ellos sí que se sostienen!

¡Chile, no te reconozco! ¿También la mayoría está en estado de TOC? Yo creía que el país tenía un contingente mayoritario de gente buena y, por eso, Kast iba a ganar en segunda vuelta. Pero un ofertón de plata, un verdadero cohecho, ha contribuido a que la mayoría elija al cohechador, al candidato peor y con el programa peor. Kast venció sólo entre la gente mayor, “a la antigua”, la que “sabe mejor”, pues ya vivió el gobierno del ídolo de Boric, Salvador Allende, hoy pronto a reeditarse. Y también ganó en las comunas minoritarias donde la gente entiende lo que lee.

Analistas y medios internacionales serios se preguntan cómo ha sido posible que el, alguna vez, mejor país de América Latina, con un progreso, una libertad y una democracia envidiables, elija al peor candidato y con la peor receta, la de Maduro, Castro y Ortega. ¡Cómo podemos estar tan perdidos que afuera sólo nos aplaudan Mazzucato, Stieglitz y Piketty!

Y entre los de menos años la mayoría ya no es siquiera “gente buena”, sino que representa otra cosa. Por eso escribí en twitter: “Dicen que el 68 por ciento de las mujeres jóvenes votaron por Boric por la oposición de Kast al aborto. Lo sentimos, chicas, sigan con los rojos. Nosotros no matamos para conseguir votos”.

No vamos a cambiar, no vamos a ponernos a sacrificar inocentes ni por un millón de votos. Y ojalá Chile vuelva en sí, para mejor, a más tardar en cuatro años más… o antes, a pedido de la mayoría. Ya una vez sucedió.

martes, 28 de diciembre de 2021

De Allende I a Allende II

El resto del mundo no puede entender que Chile, después de haber sido rescatado del desastre de Allende I y llevado por Pinochet y la Junta desde el último lugar al primero en crecimiento de América Latina entre 1973 y 1989 e instituido un modelo que encabezó todos los ránkings del hemisferio hasta 2019, ahora haya elegido a un Allende II, es decir, a Gabriel Boric, como presidente 2022-2026. Pero yo sé por qué sucedió y enumeré sucintamente veinte razones en un blog anterior.

En realidad, es una completa locura, pues los partidarios de una sociedad libre llevábamos al mejor candidato, José Antono Kast, y al mejor modelo, admirado en todo el mundo, en tanto que su rival era el peor candidato imaginable, con acusaciones de acoso y hurto, frecuente evasor del metro (lo que lo enorgullecía), doblemente fracasado en su examen de grado en leyes, que ni siquiera ha formado una familia y sufre un trastorno mental obsesivo-compulsivo. Por añadidura, profesa ideas de extrema izquierda ("a la izquierda del comunismo", como confesó alguna vez) y por tanto adhiere a un sistema fracasado en todo el mundo, que ya nadie elige en ninguna parte y que sólo subsiste en países arruinados, de los cuales la gente huye cuando puede y que se cuentan con los dedos de una mano.

Pero los chilenos votaron por él y lo eligieron por 56 vs. 44 %. Igual porcentaje que en 1988, cuando Pinochet fue derrotado, pero por lo menos los que vinieron después respetaron el modelo, lo que yo siempre he estimado como "el segundo milagro chileno". Bueno, ahora también podría haber un "tercer milagro", pero nadie lo cree. Al contrario, todos --me incluyo-- creen que el modelo será arrasado.

Es cierto que en 2019 hubo una asonada violenta y que, para calmarla, el gobernante débil al cual siempre me opuse se rindió y entregó todo, partiendo por la Constitución que había dado a Chile los mejores años de crecimiento, libertad y democracia. Después de eso, una Convención elegida por el pueblo, con amplia mayoría de extrema izquierda, prepara una nueva Constitución en medio de una completa incertidumbre. Pero en 2021 se produjo una sorpresa electoral: hubo elecciones presidenciales y parlamentarias y en ellas triunfó la derecha, con su candidato presidencial en el primer lugar de la primera vuelta y recuperando fuerzas en el Senado y la Cámara, hoy virtualmente empatados. Pero sólo fue un "canto del cisne", porque en la segunda vuelta triunfó la extrema izquierda, con el partido comunista como fuerza mayoritaria, así que tenemos un Allende II... o algo peor. 

El resto del mundo, al cual Chile le importa muy poco, cuando llega a pensar en nosotros no entiende nada. Y los chilenos con dos dedos de frente tampoco. 

Los de edad suficiente recordamos que Allende I fue despuesto tras mil días de gobierno, a petición de la mayoría de los representantes del pueblo, desesperado ante el caos económico, la escasez y la inminencia de una guerra civil. Los uniformados obedecieron ese llamado de la civilidad y la Junta, con Pinochet a la cabeza, tras 16 años y medio le devolvió un país modelo.

Pero ¡helás! en el "país modelo" los millenials se hicieron mayoría, no entienden nada de nada y lo han vuelto a fojas 1, es decir, han elegido a Allende II, el cual ha rendido homenaje al busto de Allende I en La Moneda y ha repetido sus mismas palabras al hablar a sus partidarios la noche del triunfo electoral. 

Los superricos "lo supieron desde un principio" y ya se han ido a sus residencias en países civilizados sin decirle nada a nadie; los simplemente ricos han comenzado a comprarlas y a llevarse activos para allá; los que algo tienen discurren métodos para evitar que el socialismo del siglo XXI se lo robe, partiendo por sus fondos de jubilación, que van a sufrir evidentemente el primer manotazo. Y los que nada tienen y fueron amplia y públicamente cohechados por Boric, esperan que éste les cumpla con el cohecho, es decir, les reduzca sus horas de trabajo semanal de 45 a 40, les incremente su sueldo mínimo a 500 mil pesos y su jubilación como mínimo a 250 mil. Lo cual, en fin, quebrará a las 800 mil pequeñas y medianas empresas que hay en el país.

De este modo Chile actual, ignorante de su historia, se apresta a repetirla.

sábado, 25 de diciembre de 2021

Un Manifiesto y la Conciencia Nacional

Miguel Krassnoff está preso hace veinte años y sus condenas suman alrededor de un milenio, sin haber cometido delito alguno. Pero la mayoría de los chilenos, que sólo conoce la realidad a través de consignas, ha sido convencida de que él es un verdadero monstruo, asesino y torturador incansable e incesante. ¿Por qué? Porque la propaganda dominante lo dice y reitera así desde hace treinta años y porque hay numerosas sentencias judiciales ajenas a la verdad y contrarias a las leyes que lo han condenado por los más reiterados delitos.  Ésa es la “verdad judicial” imperante en Chile, que en realidad es “mentira judicial”. Un solo juez, que nunca lo interrogó en relación a los numerosos casos por los cuales lo condenó, le ha impuesto el 90 % de su tiempo de presidio. Todas sus solicitudes de libertad condicional han sido rechazadas casi con humor burlesco, pues se descartan fundadas en que él no da señales de arrepentimiento de crímenes que no ha cometido. Y la última ha llevado ese humor negro al extremo, cuando se le ha notificado que puede volver a solicitar la libertad condicional ¡el 26 de enero de 2450!

Miguel Krassnoff hace tiempo ha enviado, tras varios escritos-denuncia anteriores, un extenso “Manifiesto” al Presidente de la República y al Comandante en Jefe del Ejército, ninguno de los cuales siquiera ha acusado recibo. Parece que no vale la pena responderle a un “condenado por unanimidad”. Pero últimamente dos youtubers impresionados, Johannes Kaiser y Pablo Fontirroig, han leído in extenso el Manifiesto en sus respectivos espacios. Hace dos noches estuve desde las 23.30 hasta las 01.30 atento a su lectura por Fontirroig, pese a que tengo el texto en mi computador y ya lo había leído antes, porque el relato expone una sucesión de hechos tan inverosímiles que uno realmente necesita que se los repitan para cerciorarse de cuán bajo ha caído la conciencia moral del país. Se refiere a hechos acontecidos en Chile y de los cuales la posteridad –ya que no la generación actual, que no lee casi nada y, cuando llega a hacerlo, un 80 % de ella no lo entiende-- se va a enterar con pasmo y no va a poder creer lo sucedido durante un cuarto de siglo y bajo las propias narices de una opinión pública dominada por las consignas falsas y la estupidez, si es que no por el alcohol y las drogas.

Hace un cuarto de siglo conversé dos días enteros con Miguel Krassnoff, brigadier del Ejército que se estaba acogiendo a retiro voluntario debido a una persecución judicial que no comprendía, pero de la cual su institución no lo defendía. Dado eso, pidió a Alfonso Márquez de la Plata arreglar una entrevista conmigo. Me refirió su impecable hoja de servicios y me explicó su decisión de acogerse a retiro porque estaba siendo citado en numerosos juicios por muertes de personas del MIR, en los cuales lo inculpaban como autoridad superior (“miembro de la cúpula”) de la extinta DINA, en circunstancias que sólo se había desempeñado en ella como teniente y cumpliendo la función de analista de información entre 1974 y 1976, sin tener mayor autoridad y sin haber nunca detenido a nadie, salvo cuando entregó a una ambulancia a Carmen Castillo, la pareja de Miguel Enríquez, jefe del MIR, herida ella durante el combate en procura de capturar al primero, cuyo escondite descubrió Krassnoff en 1974.

Una historiadora, Gisela Silva Encina, se interesó en su caso hace años y escribió la biografía del perseguido político, “Prisionero por Servir a Chile”. Me correspondió presentar su tercera edición, pues fue un best-seller, en el Club Providencia rodeado de comunistas que lanzaban piedras y destrozaban todos los vidrios del local, bastante resistentes, hay que decirlo. Pudimos abandonar el recinto ya de noche y en buses de carabineros con rejas metálicas, siempre bajo las piedras comunistas. En 1987, bajo la presidencia de Pinochet, se había rendido un homenaje izquierdista a Salvador Allende en el Teatro Cariola, sin incidentes. En 2010, bajo la presidencia de Piñera, no se podía homenajear a Pinochet sin ser víctima de la violencia. ¿Cuándo había más democracia? Es que nadie odia tanto a Krassnoff como el comunismo, que se encargó de ejecutar en Moscú a su padre y a su abuelo, cosacos partidarios de la libertad como él. 

El libro se publicó en Rusia, cuyo gobierno ofreció discretamente a Krassnoff nacionalidad y residencia allá, para ponerlo a salvo de la persecución judicial comunista de acá, pero él declinó, agradeciendo el ofrecimiento. Tras veinte años de prisión injusta parece que se equivocó. 

Oyendo el “Manifiesto” una vez más recordé al personaje de Jean Valjean, el acusado inocente de “Los Miserables” de Víctor Hugo. Antes y después he pensado muchas veces también que si estuviera vivo Emile Zola se habría sentido motivado a publicar otro “Yo Acuso”, como en el caso del capitán Dreyfuss. Pero en la sociedad francesa había una conciencia moral capaz de reaccionar. Acá ella no existe. Acá sólo presiden el debate los insultos y las consignas.

¿Qué se ha hecho la conciencia moral de los chilenos? ¿La tienen? En mis primeras letras aprendí “no es mío ese huerto/ no es mío, lo sé/ pero yo de esa fruta/ quisiera comer/ y si lanzo una piedra/ tendrá que caer”. Se llamaba “La Tentación” y tras leerlo nos enseñaban que si a uno no lo sorprendían tirando la piedra para hacer caer la fruta ajena, tal como sorprendieron a Boric en el supermercado de Punta Arenas o pasando debajo de los torniquetes del Metro, de todas maneras había una “voz de la conciencia” que a uno lo acusaba y condenaba. Ahora en Chile esa voz ya nadie la oye. Se ha perdido la conciencia.

Yo tuve la oportunidad privilegiada de preguntarle al juez Alejandro Solís en 2015, en el programa “El Informante”, conducido por Juan Manuel Astorga, por qué en sus fallos contra Krassnoff él sostenía que éste mantenía presas hasta esa fecha a personas supuestamente “secuestradas”. Y como el brigadier (r) ya llevaba preso catorce años, le pregunté a Solís dónde podía mantenerlas en esa condición en su celda de dos por tres metros durante tanto tiempo. Y entonces éste confesó que eso era una “ficción jurídica”, es decir, de hecho confesó haber cometido y cometer continuadamente una monstruosidad jurídica, pues los jueces tienen la obligación de “probar” y no “fingir” la culpabilidad del acusado, para superar la presunción de inocencia, que es la base del derecho penal en todo el mundo. Si no la superan no pueden condenar.

Fue tan escandalosa y pública la confesión de Solís de que mentía en sus fallos, que el ministro de Defensa de Michelle Bachelet en esa época, José Antonio Gómez, se vio obligado a contratarlo en condiciones muy generosas como “asesor de DD. HH.” en su ministerio, se supone que para hacerle más llevadero su desprestigio.

Cuando he intentado denunciar otra situación como ésta en la Revista del Colegio de Abogados, éste me ha hecho objeto de censura previa, negándose a publicar mi artículo. Entonces lo reproduje en este blog el 27 de marzo de 2015 y acabo de ver que ya ha recibido 2.319 visitas.

A todo esto, el candidato Piñera en 2009 había prometido a los militares (r) preocuparse de que se pusiera pronto término a sus procesos y se les aplicara la prescripción, pero tras ganar la elección para la cual les solicitaba sus votos fue el gobernante que más querellas contra ellos presentó. Piñera, por cierto, no personifica en modo alguno “la conciencia nacional”, porque ha evidenciado carecer de ella y se limita siempre a “hacer lo que le conviene más”. Nadie pudo prever que alguna vez el alcalde de “La Pérgola de las Flores”, que tenía ese lema, iba a existir tan redivivo en La Moneda. La opinión pública, asimismo, sabe –y mira impávida-- que esto de condenar ilícitamente a militares se ha convertido en un gran negocio a expensas del fisco, pues en cada juicio sin pruebas eso no obsta a que se ordene pagar a los querellantes indemnizaciones de decenas o centenares de millones de pesos.

En ese mismo programa televisivo Solís dijo ante las cámaras que Krassnoff había asesinado a la mirista Diana Arón y había salido del lugar del crimen con las manos ensangrentadas, murmurando “era extremista y judía además”. Yo entonces fui a Punta Peuco a consultarle al brigadier (r) sobre esta nueva revelación, en particular porque al consultar Wikipedia había visto que el abogado UDI Gabriel Zaliasnik corroboraba el horrorífico relato de Solís. Entonces el brigadier (r) me aseguró que no sólo no había tenido parte alguna en el combate donde había caído la mirista Arón, sino que en la respectiva fecha estaba fuera del país y así lo había acreditado. Supe que posteriormente hizo una recopilación de documentos probatorios de lo anterior y se los envió al embajador de Israel en Chile, pero éste se los devolvió sin examinarlos ni comentarlos y pidiéndole hostilmente no volver a enviarle nunca nada más. Ahora he vuelto a consultar Wikipedia sobre el caso y he comprobado que, por lo menos, no aparece ahí Zaliasnik corroborando el relato de Solís, que fue basado en dichos de extremistas de izquierda que habían sido informantes de la DINA, como Marcia Merino (“la flaca Alejandra”) y Osvaldo “el Guatón” Romo, quienes al parecer buscaban congraciarse con el juez de izquierda y librarse de la venganza del terrorismo. De todas maneras, entre los mil años impuestos a Krassnoff se encuentra sumada la condena a 15 por la muerte de Diana Arón ocurrida mientras él estaba fuera del país.

La conciencia de los chilenos se ha tornado tan laxa que a casi nadie le importa nada de lo anterior ni que exista un conjunto de jueces que miente deliberada y sostenidamente en sus sentencias ni que se condene en virtud de un delito creado después de acaecidos los hechos (“lesa humanidad”, para no tener que seguir mintiendo en las sentencias con lo del “secuestro permanente”), ni que se prive de libertad a un número creciente de militares, marinos, aviadores, carabineros y policías civiles en retiro de avanzada edad y contra todas las leyes y muchas veces contra la verdad de los hechos ya largamente prescritos, amnistiados y muchas veces también juzgados, negándoles todos los derechos carcelarios.

Algo aún peor es que, como los autores materiales de muertes de extremistas en los años 70 han fallecido, ahora los jueces, para poder seguir extrayendo más dinero del fisco, inculpan a personas que en nada participaron y a las cuales saben inocentes. Porque “el negocio es el negocio”. El caso más notorio y casi risible ha sido el procesamiento de quien era fiscal de los consejos de guerra de Calama cuando allá hubo fusilamientos ilegales, Oscar Figueroa. Como los hechores han fallecido, se “inventa” un nuevo “culpable” para poder cobrar las millonarias indemnizaciones, que son el verdadero móvil de todos estos juicios a casi medio siglo de los acontecimientos. Es un gran negociado ilícito, desarrollado a vista y paciencia de todos los chilenos, sin que nadie diga ni haga nada, como también sucede en el caso de los falsos exonerados. Lo único que no se sabe es cómo se reparten las platas.

Por eso cabe preguntarse, ¿tienen conciencia los chilenos? Pienso que, muy en el fondo, deben tenerla, pero priman para dejarla de lado el miedo a los comunistas y las consignas de éstos. La mayoría obedece a ellas y vota como consecuencia de ellas. Esto lo aprendí de joven en la Escuela de Derecho. No en clases, sino en el casino. Un alumno comunista me enseñó a hacer llamadas sin pagar en el teléfono del casino, doblando debidamente un billete de cinco pesos de entonces e introduciéndolo en vez de la moneda en la ranura. “Los yanquis nos están robando, entonces nosotros tenemos que robarles a ellos”, me enseñaba. Toda una lección de moral social, igual que la que da Boric cuando pasa bajo el torniquete del metro. Esa es nuestra moral social actual y la que va a inspirar el “manotazo” del nuevo régimen sobre los bienes y recursos de los particulares, en nombre de las “transformaciones”, previsiblemente similares en sus resultados a las que han convertido a la otrora bella Plaza Baquedano en el peladero actual.

Pero debe existir alguna conciencia moral inmanente, supongo, que más tarde que temprano podrá emerger como fuerza rectora en la comunidad, porque ésta no puede sobrevivir indefinidamente en la inmoralidad que denuncia el Manifiesto del brigadier(r) Krassnoff. En todo caso, seguramente en la historiografía nacional este documento va a figurar como testimonio principal del momento más oscuro de la conciencia moral de la chilenidad, como lo es el actual.

viernes, 24 de diciembre de 2021

La Mentira de Boric

Chile acaba de elegir al peor entre los dos candidatos, quien a la vez sustenta la peor doctrina de gobierno contemporánea, el socialismo marxista. 

La sabiduría humana enseña que los pecados se pagan en la otra vida, pero las tonterías en ésta. Chile ha perpetrado, por amplia mayoría, una gran tontería en esa elección y lo va a pagar. Lo va a pasar muy mal. Y como un anticipo de los tiempos que vienen, quien obtuvo esa amplia mayoría partió mintiendo.

Tras entrevistarse con la ex ayudista del MIR, ex conviviente del vocero del FPMR, ex ministra y expresidenta Michelle Bachelet, Boric afirmó públicamente que el padre de ella  había "sido asesinado por la dictadura". Eso es mentira.

El general Bachelet falleció a raíz de un partido de básquetbol, deporte contraindicado para su dolencia cardíaca. Estaba preso en la cárcel de Santiago por su responsabilidad en procesos legalmente tramitados ante un Consejo de Guerra de la FACH e inculpado de haber conspirado para tomar el control de instalaciones de esa rama, dando de baja a quienes se les opusieran.

El ex senador socialista Eric Schnake compartía celda con Bachelet y presenció su fallecimiento. Se refirió a eso en la revista "Qué Pasa" de 26.11.06: "Yo estaba con él cuando murió. Estábamos jugando un partido de básquetbol... y se sintió un poquito mal. Paramos el partido y Bachelet cayó al suelo". Antes de que pudiera ser llevado a una clínica falleció de un infarto.

En el increíble Chile de facto de cuarenta años después y bajo la actual dictadura judicial roja, el ministro sumariante Mario Carroza sustanció un proceso tan inverosímil como otros que ha llevado adelante, en particular el del caso "quemadores-quemados", y determinó que el general Bachelet había sido asesinado por otro oficial de la FACH, hoy fallecido, que nada tuvo que ver con su muerte. 

"Méritos" extraordinarios como ése condujeron a que Carroza fuera propuesto por el inefable Sebastián Piñera para ministro de la Corte Suprema y contara después con el beneplácito senatorial suficiente para ser designado ministro del más alto tribunal.

La mentira de Boric viene siendo un anticipo, si es que no un pistoletazo de partida, de los peores mil días que el país habrá soportado después de los que culminaron el 11 de septiembre de 1973.

jueves, 23 de diciembre de 2021

Veinte Razones de la Caída de Chile

1) La prensa en manos de la izquierda.
2) La educación en manos de la izquierda.
3) La justicia en manos de la izquierda.
4) Rendición de Patricio Aylwin.
5) Rendición de Sebastián Piñera.
6) Rendición de Juan Emilio Cheyre.
7) Dirigentes políticos entreguistas.
8) Dirigentes gremiales entreguistas.
9) Armas comunistas guardadas "por si las moscas".
10) "Primera línea" que vandaliza, saquea e incendia.
11) Carabineros dados de baja o presos por enfrentarla.
12) Demonización de Pinochet por haber derrotado a la guerrilla.
13) Mala memoria general que impide refutar mentiras.
14) Consignas comunistas falsas repetidas hasta el cansancio.
15) Miedo a lo que a uno le pueda decir la izquierda.
16) Entreguismo de la prensa mundial a la versión de la izquierda.
17) El miedo a ser funado.
18) El miedo a defenderse y que a uno lo metan preso como a Cobin (dos años ya).
19) Demasiada gente joven que no vivió la UP.
20) Derecha repetidora de mentiras de la izquierda.

lunes, 20 de diciembre de 2021

¡Felices Mil Días!

"Ha triunfado ampliamente el peor candidato que yo recuerde, con el peor programa y presidido por una ideología fracasada en todo el mundo. Sabemos el desenlace y dentro de mil días una gran mayoría va a clamar por un cambio, tal como en 1973". Escribí eso en twitter anoche porque corresponde a lo sucedido y pienso sucederá. Por lo demás, es evidente para quien tenga dos dedos de frente.  

Bastaba saber el nombre de la coalición triunfante para anticipar el desastre que se pondrá en marcha: "Apruebo Dignidad". "Apruebo" alcanzó el 78 % de los sufragios, mucho más que Boric, e implica el disparate insigne de cambiar la Constitución que le dio a Chile la mejor democracia (¿alguien podría siquiera dudar de que hoy imperan la más amplia libertad y el más irrestricto pluralismo?) y la mayor prosperidad que jamás tuvo, para reemplazarlas por otra, a ser redactada por un conjunto no-democrático (pues no pocos de sus miembros no habrían sido electos en una democracia verdadera de "una persona, un voto") y todo ello nacido de un plebiscito impuesto por la fuerza, la cual según el Código Civil vigente es un vicio del consentimiento. Como resultado, de hecho, "Apruebo" es hoy una "bolsa de gatos" (el nombre se lo puso un izquierdista, el expresidente uruguayo José Mujica). De ella va a brotar un engendro que, cuando se conozca, no se va a poder creer.

Y "Dignidad", nombre de un actual peladero, un descampado, "un mustio collado", como diría el poeta, en que las hordas de Boric transformaron la, tal vez, más hermosa plaza de Santiago, originariamente conocida como Plaza Italia. Allí se ubicaban la estatua de un héroe, el general Manuel Baquedano, hoy exiliado por la horda, y la tumba del Soldado Desconocido, caído en los campos de batalla del norte, recién rescatado a tiempo antes de ser profanado.  

"Apruebo" = Disparate. "Dignidad" = Devastación. ¿Cómo se consigue que una mayoría vote por eso? Lavándole el cerebro y recurriendo al más antiguo móvil que atrae a hombres y mujeres por igual e inspira a la profesión más antigua del mundo: al afán de lucro. Trabajar menos y ganar más: 40 horas semanales en lugar de 45 por 500 mil pesos en lugar de $374 mil. Y, encima, promesa de recibir gratis numerosos "derechos sociales" costosos, como salud, educación, jubilación, cargos en directorios de empresas ajenas y muchos más que al "pueblo" se le puedan ir ocurriendo en el camino y que, probablemente se va a ir "tomando" como en 1970-73, que fue cuando aprendimos a hacerlo. Nada nuevo.

Ésa es la buena noticia. La mala es que nada de eso funciona. ¿Quiere saber por qué? Lea los libros de un joven chileno, Axel Kaiser, empezando por "La Fatal Ignorancia" y terminando con "El Economista Callejero", hoy best-seller. "Its all there" ("todo está ahí"), como me dijo una vez Margaret Thatcher refiriéndose a Hayek.

Y habrá algo que nunca más se va a poder decir: el nombre de quién llevó a Chile desde el último lugar del crecimiento al primero de América Latina, le dio la Constitución democrática, derrotó a la subversión respetando los DD.HH. (bajo su gobierno el presidente de la Cruz Roja mundial podía visitar a cualquier preso sin autorización oficial). Este innombrable perdió en 1988, igual que ayer, 56-44% un plebiscito sobre su reelección y entregó el poder, sentando un precedente mundial de democracia y crecimiento ("Thayer y Reagan vinieron después", escribió Niall Ferguson). 

¡Felices mil días!

viernes, 17 de diciembre de 2021

Antesala del Cielo o del Infierno

Si sale Kast será del cielo. Si sale Boric, del infierno, "Apruebo"= bolsa de gatos. "Dignidad"= peladero. El cielo, Kast, durará sólo cuatro años y al cabo de los mismos "aquí estaremos otra vez". El infierno, "mil días", máximo, hasta que se acabe la plata y llamen a otros Merino y Pinochet, si los hubiere. La Constitución de ambos era mucho más sabia, como en todo, con mandatos de ocho años. Pero sin reelección. Habría sido mejor con. Así y todo, es preferible jugarse la vida cada ocho en vez de cada cuatro años. Así somos. "Este podría ser un gran país, si no fuera por los chilenos", dicen. Pero hay desde tipos de primera, como Pinochet o Kast, que nos salvan, a otros como Allende o Piñera, que nos hunden. Y hoy tenemos a punto de llegar a La Moneda a uno peor, Boric, malo de la cabeza pero elocuente; tramposo e impredecible, porque hasta podría volverse honrado... en un intervalo lúcido. Un siquiatra escribió al diario extrañándose de que no pudiera ser piloto, pero sí mandar el país, con el trastorno que tiene.

Pero a los izquierdistas no les importa, con tal de que no gane un derechista. Típico de la izquierda: "el odio es más fuerte". Y vamos gastando "la plata de los demás". Vino recién a darnos conferencias el socialdemócrata sueco Goran Peersson, en cuyo país hay una entrada gratis al metro para quienes hayan olvidado la plata y nadie la usa, porque son civilizados. Pero, como es de izquierda, apoya a Boric, que ha sido fotografiado en todas las poses eludiendo el pago del metro, así es que en Estocolmo se colaría a diario por la pasada gratis. Los suecos, que allá lo tendrían preso, quieren que nos gobierne. Es que tienen una cosa contra nosotros. Por eso apoyaron a la UP y allá todavía hay un ghetto chileno de izquierda, con refugiados UP. Y cuando el FPMR asesinaba gente a discreción acá, en los 80, el primer ministro Olof Palme contribuía a una colecta pública para ayudar al FPMR en su tarea asesina. Por eso yo escribí, cuando a su turno a él lo asesinó un terrorista, "¡Justicia Divina!" y la Comunidad Europea le presentó una protesta a "El Mostrador", que publicaba mis blogs, y dejaron de publicarlos. Claro que Sebastián Piñera le había pedido lo mismo, así es que a lo mejor fue él. No sé a quién atribuir "el mérito".

Es tan increíble nuestra elección de este domingo que, además del siquiatra que dice que a Boric ninguna aerolínea lo podría contratar, Leonardo Farkas "le exige" que se haga un test de pelo, y como Boric ha dicho que no se lo hizo por lo caro, Farkas le pone a disposición un millón de pesos. Hoy mismo. Por supuesto, no se lo va a hacer. ¿En qué país vive Farkas? No en Chile.

Pero Boric ya ha conseguido que lo apoyen personas importantes de la izquierda moderada de Chile y Europa. Llegado el momento, los izquierdistas son todos iguales. A Joseph Stiglitz, el Nobel de economía que, según revela hoy Axel Kaiser, apoyó entusiastamente a Hugo Chávez y a Fidel Castro, ahora nos insta a elegir a Boric, cuando estamos llenos de cubanos y venezolanos que nos cuentan los horrores de sus países.

¿Cuál es la receta de Boric para tener un currículum personal y académico apestoso, representar políticas fracasadas y estar a punto de ganar La Moneda? Una de las más antiguas del mundo, propia de la profesión más antigua del mundo: ofrecer plata. A todos: a los activos, a los jubilados y hasta a las pymes. Pero el principal activista de las Pymes, Juan Pablo Swett, ha sacado las cuentas y dice que una que hoy gana seis millones de pesos al año, con las medidas de Boric de aumentar el sueldo mínimo a 500 mil pesos, la cotización en 8 % y rebajar las horas trabajadas a 40, pasaría a perder $16 millones mensuales y quebraría. Es decir, se quedarían todos sin nada. Como ese país donde Salvador Allende declaraba a "El Mercurio" del 7 de septiembre de 1973: "Sólo queda harina para pocos días más". 

Nota al pie importante: el problema de la UP no fue tanto que aplicara su programa, sino que el de la elegantemente llamada entonces "legalidad sobrepasada": sus partidarios "se tomaban" todo lo que podían. Ahora ya está comenzando a suceder bajo el precursor de la nueva UP, Piñera. Allende no cayó tanto por su programa como por el caos que sembraron sus partidarios, apoderándose de empresas, fundos y viviendas nuevas que sus dueños no podían recuperar porque el gobierno no concedía la fuerza pública para cumplir las sentencias. 

Lo podremos comenzar a vivir desde el lunes. O podemos habernos ido al cielo... por cuatro años. Hasta entonces.

martes, 14 de diciembre de 2021

"París Bien Vale una Misa"

Desde que Enrique IV se convirtió al catolicismo nada más que para ser rey de Francia, diciendo "París bien vale una misa", todos comprendemos lo que deben hacer los políticos para ganar el poder y por eso votaré por José Antonio Kast, pese a haberse éste declarado admirador de Aylwin en el último debate; y comprenderé si Boric aparece en los próximos días yendo a comulgar con corbata y hablando bien de Pinochet. 

Pero frente al artículo de un hijo de Aylwin en "El Mercurio" del domingo, ensalzando comprensiblemente a su padre, sentí la obligación de escribirle al diario el mismo día una carta que no se publicó, seguramente por alguna omisión mía, y por eso la doy a conocer a continuación, en el solo ánimo de dejar establecida la verdad histórica:

Aylwin y la Medida de lo Posible.

Señor Director: En su artículo de ese nombre Miguel Aylwin Oyarzún hace una explicable defensa del actuar de su padre en el gobierno de 1990-94. 

Ese gobierno se propuso la reconciliación entre los chilenos, pero consiguió lo contrario. Sus intenciones eran buenas, como lo anunció Aylwin al asumir en su discurso del  Estadio Nacional, donde dijo buscar "la reconciliación entre civiles y militares", frase que desató una tremenda rechifla en la barra brava comunista presente, ruidosa pero minoritaria. Aylwin tuvo el coraje de repetir la frase y entonces recibió el apoyo mayoritario del resto del público. Pero ahí terminaron sus esfuerzos por la reconciliación "en la medida de lo posible".

Comprendió que si no hacía lo que el comunismo exigía (venganza contra los militares que le impidieron a éste tomar el poder por la fuerza, y dinero, mucho dinero) debería enfrentar un estallido revolucionario rojo de los que históricamente sufrieron todos los gobiernos (el militar enfrentó 17), hasta hoy. 

Y les dio a los comunistas lo que querían: venganza a través de juicios ilegales y espurios contra militares y dinero, mucho dinero (más de diez mil millones de dólares a la fecha y contando, según el actual ministro de Justicia). Éste es un escándalo nacional actual poco comentado en la prensa

Aylwin formó en 1990 una comisión inconstitucional, que dio una versión falsa de la historia, como confesó el principal redactor del Informe Rettig, Gonzalo Vial, quien reconoció que "el trabajo estaba hecho" por el Archivo de la Vicaría de la Solidaridad, cuyo jefe era un alto dirigente comunista y del FPMR, José Manuel Parada. 

Una legión de jueces rojos sigue condenando hasta hoy a militares, contraviniendo las leyes de amnistía, prescripción, cosa juzgada, la verdad de los hechos y principios humanitarios que protegen a ancianos seniles..

Pero en 1973 Aylwin apoyaba a los militares y se negaba a condenarlos "porque están recibiendo el fuego", decía, entre el 11 de septiembre y el 31 de diciembre de 1973, etapa en que se produjo el 60 % de las muertes de todo el período 1973-1990. 

Después traicionó a los militares y hasta negó haber dicho lo que había quedado grabado 20 años antes, cuando reconocía que los militares habían evitado una guerra civil y una dictadura marxista indefinida.

El país tiene, con todo, una deuda con él, porque fue el primero que reconoció validez a la Constitución de 1980 y después siempre negó que fuera necesaria una nueva Carta. Pero Aylwin dejó pendiente una deuda que tiene hoy el país con los militares del 73, porque persiguió a quienes él indujo a tomar el poder y precisamente por haberlo hecho. Y antes indultó a todos los terroristas, incluidos los autores de hechos de sangre.

En la historia algún día va a prevalecer la verdad. En ese sentido quienes votaremos por José Antonio Kast, aun comprendiendo que "París bien vale una misa", esperamos que él tenga un papel que jugar en el restablecimiento de la verdad histórica que Aylwin olvidó y reconozca que, en realidad, el estadista a admirar era otro y no quien él nombró.

domingo, 12 de diciembre de 2021

"Lugares Que No Sean Cárceles"

Un país que cada pocos años está en peligro de recaer en el comunismo es porque tiene un problema mental colectivo serio. Esto lo ha puesto de manifiesto un detalle reciente: todo el mundo ha criticado a José Antonio Kast porque en su anuncio de combate al terrorismo y la subversión que han asolado al país, ha mencionado que decretará un estado de excepción con facultades policiales aumentadas, entre ellas la de "detener personas en lugares que no sean cárceles".

En el foro de Archi el presentador de Teletrece, Ramón Ulloa, le preguntó horrorizado si "eso va a ser igual que con la DINA y la CNI". Hoy, leyendo a la columnista de izquierda Paula Escobar en "La Tercera", veo que también expresa su temor de que se vaya a "detener personas en lugares que no sean cárceles". Pero ya cuando me sonaron todas las alarmas fue cuando mi amiga Lucía Santa Cruz, "que debería saber mejor", entrevistada hoy en "El Mercurio", expresa que votará por José Antonio Kast con reticencia porque éste quiere "detener personas en lugares que no sean cárceles".

En la Constitución de 1925, artículo 17, se confería a Presidente de la República, por la declaración del estadio de sitio, la facultad de arrestar a personas "en lugares que no sean cárceles ni otros que estén destinados a la detención o prisión de reos comunes."

La misma disposición se reprodujo en el artículo 41 de la Constitución de 1980, pues el grueso de su texto tenía semejanzas con la de 1925 y el de ésta con la de 1833.

Lo que sucede en las emergencias subversivas y los conatos revolucionarios, como los que el comunismo ha protagonizado en Chile periódicamente, es que obligan a medidas extraordinarias para arrestar a los sediciosos armados y materialmente es y era muy difícil, por su número, conducirlos a las cárceles comunes. De modo que todos los gobiernos los mantenían presos hasta el término del respectivo conflicto y del estado de excepción, en "lugares que no fueran cárceles". 

Cuando la emergencia cesaba y se normalizaba el país, los todavía presos eran trasladados a cárceles comunes. Esto fue habitual en todos los gobiernos. Sólo bajo el régimen militar Chile, después de 1973, se normalizó por un período prolongado, y aun así con interregnos de estados de excepción que fueron necesarios, dado el grado del ataque terrorista y subversivo, apoyado desde el exterior, en los años 80. Esta última fue la más masiva, mejor pertrechada y más extensa intentona armada subversiva que haya soportado país alguno de este hemisferio, no obstante lo cual el gobierno constitucional de Pinochet la venció y a su término entregó a la civilidad una nación pacífica y sin conflicto ni siquiera en la Araucanía, que por lo demás votaba mayoritariamente por él.

Si triunfa José Antonio Kast será porque una mayoría confía en que éste, a diferencia de su antecesor, restablecerá el orden público usando de las prerrogativas de un estado de excepción que lo autorice a "detener personas en lugares que no sean cárceles", como lo hicieron siempre los gobiernos democráticos para defenderse de las sucesivas y periódicas intentonas comunistas de tomarse el poder por las armas.

¡Un mínimo conocimiento de la ley y de la historia, por favor, antes de condenar la única candidatura que puede impedir la repetición de los mil días de la UP o algo peor!

viernes, 10 de diciembre de 2021

Miedo

Me acaba de llegar la invitación a un seminario del banco BICE, de la familia Matte, sobre la segunda vuelta presidencial. Lo dictarán el ex ministro de Michelle Bachelet, Rodrigo Valdés y el académico y periodista Max Colodro. El primero socialista y el segundo excomunista. Ambos indudablemente de izquierda y "votantes naturales" de Boric, aunque no sé si irán a votar por él. "Por miedo". Porque tienen miedo, naturalmente, como personas con sentido común que saben que a Boric, un completo incapaz, pero con "habilidades blandas", los comunistas lo tienen tomado de donde ustedes saben y lo van a tener cercado y a ellos no les va a "venir con cosas". O sea, Valdés y Colodro le tienen miedo a un gobierno de Boric por el mismo motivo que los de Kast le tenemos miedo a un gobierno de Boric.

¿Por qué la familia Matte no puede tener dos comentaristas partidarios de Kast, su candidato, y ni siquiera "uno y uno"? Por miedo. Esa familia ya fue condenada, sin tener culpa, por "coludirse". Si usted les pregunta a los chilenos, el 90 por ciento le dirá que los empresarios como los Matte cometieron un crimen atroz, "coludirse". Todo eso es falso, pero como el 90 % de los chilenos no piensa ni tampoco sabe, sino que repite consignas, en el país reinan las falsedades, como la de que los productores de pollos, las farmacias y los Matte se coludieron malignamente para ganar más.

No es cierto. Lo único que hicieron fue ser civilizados y no imbéciles. Pero en Chile si usted no es imbécil lo funan y condenan. En efecto, hay amplia libertad para producir pollos, fundar farmacias y producir papel tissue o no tissue, y de hecho hay bastantes productores de este último. Un productor menor que los Matte se acercó a ellos y les dijo que si no se ponían de acuerdo con él en mantener precios, lo quebraban. A los Matte les daba lo mismo, económicamente, que el otro quebrara o no, pero son caballeros y accedieron a lo que les pedía. Los productores de pollos también son caballeros y aunque Vial ganaría más si Ariztía hubiera quebrado, en lugar de bajar precios y hundirlo, hasta lo ayudó y le prestó plata. Y se entendieron con los Covarrubias, que también producían pollos y todos han sobrevivido bien. Pero un organismo imbécil y un tribunal imbécil los condenaron a "clases de ética". Pues cualquier chileno puede criar pollos o importar pollos o hacer lo que le ocurra, porque son mercados "desafiables" y abiertos. Así es la sociedad libre. Nunca en Chile habíamos tenido una sociedad más libre y democrática que la de hoy, y por eso los comunistas la quieren cambiar.

Aclaro, ahora mismo esa sociedad es menos democrática por culpa de la izquierda, porque ya no rige lo de "una persona, un voto". No. Las mujeres de izquierda impusieron la "paridad". Aunque no tengan votos, hay que elegir mujeres en igual número. Los de origen indígena de izquierda lograron que salgan elegidos aunque no les alcancen los votos. Los de origen británico no, por supuesto, porque parece que no hay de izquierda. Los incumbentes tampoco pueden ser elegidos aunque tengan los votos. Todo antidemocrático. Ha dejado de regir "una persona, un voto". Hay menos democracia. Pero los comunistas apoyan estos privilegios de las mujeres y los indígenas y como les tenemos miedo a los comunistas, a las mujeres y a los indígenas, por lo tanto no importa que la democracia se vaya al cuerno, porque nadie dirá nada. Al contrario, si usted hace un chiste sobre lo absurdo de todo eso puede ser declarado enemigo público número uno. Pregúntele a Johannes Kaiser.

Tenemos miedo así es que ¡viva el miedo! Pero en la soledad de la urna nadie nos puede ver así es que los Matte, que sólo convidan a un socialista y un excomunista a su seminario, votarán todos por Kast. Y a lo mejor Rodrigo Valdés y Max Colodro también, porque son izquierdistas, pero no imbéciles.

lunes, 6 de diciembre de 2021

Los Desfallecimientos de la Élite

Chile hoy es una democracia donde la libertad está tan garantizada y se ejerce a tal extremo que una mayoría está a punto de cometer un atentado, tal vez final y definitivo, contra la libertad y la democracia, al dejar el gobierno en manos del comunismo. Pues dejémoslo en claro: si gana Boric este país será comunista, no sólo de facto, como casi lo es hoy, sino también de iure. Boric no es González Videla.

La economista Cecilia Cifuentes dio una campanada de alarma semanas atrás cuando desmenuzó una encuesta y se encontró con que los jóvenes de clase alta (ABC1) votaban mayoritariamente por Boric. Es decir, la juventud del sector que mejor ha aprovechado la libertad y la garantía a la propiedad para llevar al país a la cabeza del continente, vota por destruir ambos pivotes del progreso.

¿Qué te pasa, Chile? Recuérdese un solo episodio: hace meses los "niñitos bien" del colegio Verbo Divino hicieron su propio "estallido social", vandalizando el establecimiento y su entorno. La sociedad discretamente cubrió el episodio con un manto de olvido y después "nadie dijo nada, nadie dijo nada", pero el caso lo dijo todo. Quedó como un destello de imbecilidad juvenil sin mayor importancia. "Es que se fumaron unos porros demás y ya está, vamos a otra cosa", dijo todo el mundo. Pero había más que eso.

Después sucedió algo inesperado sólo para los que no saben historia de Chile: el 21 de noviembre la derecha ganó la elección presidencial y parlamentaria: José Antonio Kast encabezó la primera vuelta y la derecha recuperó bancas en el Senado y la Cámara, habiendo sido minoría en ambos. En el primero hay empate y la segunda está en duda de quién prevalece. Los que sabemos historia de Chile esperábamos esto, porque después de cada estallido revolucionario comunista siempre ha sucedido lo mismo: Arturo Alessandri fue elegido tras la República Socialista de 1932, Carlos Ibáñez lo fue tras el estallido comunista de 1949, Jorge Alessandri tras el de 1957 y el mayor de todos los retornos de la derecha al poder, con Augusto Pinochet en 1973, tuvo lugar tras el, a su turno, mayor estallido comunista registrado en el país, que fue derrotado mediando el amplio respaldo de una mayoría democrática incontrastable (81 a 47 en la Cámara.)

Hoy estamos próximos a una segunda vuelta cuyo resultado es incierto. El sábado la encuesta Black & White, publicada en "El Mercurio", reveló cosas inesperadas: (1) En el resultado global hay "empate técnico", pues gana Boric por 51 a 49 por ciento, pero la diferencia está dentro del error muestral; (2) No hay un "candidato de los ricos" y otro "de los pobres", pues Boric y Kast empatan justamente en los dos segmentos extremos, el de los ricos (ABC1) y el de los más pobres (DE) Es decir, tanto la élite como el pueblo están paritariamente divididos. (3) ¿Cómo puede estar dividida la primera, si es el sector mejor educado e informado y el que mejor sabe que Boric es el candidato de los comunistas y que cuando éstos "agarran el poder no lo sueltan más", según refiere Eduardo Frei que le advirtió un estadista europeo en 1973 (citado en su carta a Mariano Rumor)? (4) Es que sucede que entre las mujeres y entre los menores de 34 años gana Boric por 53 a 47 por ciento y 63 a 37 por ciento, respectivamente. 

¡Las mujeres! que fueron las primeras en alzarse contra el marxismo en 1971 ("Marcha de las Cacerolas Vacías"), que le dieron una mayoría que no le alcanzó a Alessandri en 1970 y otra que sí le alcanzó en 1958. Bueno, ahora se inclinan mayoritariamente por el candidato de los comunistas. (5) Y en el caso de los votantes jóvenes, incluidos los de la élite, la diferencia a favor de Boric es peor aún. 

La poderosa falange de columnistas de izquierda de "El Mercurio" (Carlos Peña, Cristián Warnken, Agustín Squella, José Joaquín Brünner, Sergio Muñoz Romero, José Rodríguez Elizondo) expresa franco temor. El último declara que "la democracia está en la cornisa". Por supuesto, lo está. Ellos ya han visto cómo ha sido pisoteada la democracia en la Convención, cuya existencia el pueblo, con el aplauso de todos ellos y el apoyo mayoritario del "gobierno de centroderecha" y hasta del presidente de los industriales, aprobó por 78 versus 22 por ciento hace sólo poco más de un año. Aquella falange de columnistas parece a punto de pedir a sus lectores que voten por Kast, pero simplemente no puede hacerlo, así es que se limita a describir la tragedia que puede sobrevenir.

Los países que olvidan su historia (o cuyas élites dejan en manos de los comunistas la tarea de escribirla, como acá) están condenados a repetirla. Consecuencia: estamos a punto de recaer en "los mil días"... o en algo más prolongado.


sábado, 4 de diciembre de 2021

La Mujer Nos Abandona

Hoy sábado 4 de diciembre "El Mercurio" trae una noticia aciaga: según la encuesta Black & White que dicho diario publica, Gabriel Boric ganaría la Presidencia por 51 vs. 49 por ciento de José Antonio Kast. Entre los votantes varones vence este último por 51 vs. 49 por ciento, pero las mujeres votan 53 vs. 47 por ciento a favor de Boric y así dan vuelta el resultado.

En 1958 ellas ya habían impedido una vez que Chile cayera en el comunismo, votando en favor de Jorge Alessandri, que gracias a las mujeres derrotó a Salvador Allende, vencedor entre los hombres. Ahora los papeles se han invertido. Por años he gastado ríos de tinta destacando su madurez política por sobre la del hombre.

Si bien en 1970 ella no bastó para impedir el triunfo marxista, en 1971 fue la que se atrevió a salir a las calles con sus cacerolas vacías, enfrentando a las hordas miristas que les lanzaban papas con gillettes. Después estuvieron a la cabeza de la mayoría democrática que exigió el término del régimen marxista. Un recientemente fallecido amigo mío solía halagarme diciendo: "De la UP nos salvaron las mujeres, los camioneros y Pérez de Arce". Yo siempre le sugería no olvidar a los militares, como casi todos lo hacen hasta hoy.

¿Qué sentimos ahora que las mujeres nos abandonan frente al renovado peligro del triunfo del comunismo? Un amigo a quien su señora lo había dejado se lamentaba: "Lo que más me duele es que se haya ido con un tipo tanto peor que yo". Eso también sentimos ahora: postergan a un demócrata de lujo, que ha formado un hogar ejemplar y defiende ideas constructivas, por preferir a un solterón extremista, malo de la cabeza, que elude el pago del metro y ni siquiera ha sido capaz de recibirse de abogado. Entonces a la ofensa se añade el escarnio.

Prefiero quedarme con la imagen femenina de los acordes de esa canción favorita de "La Tabernera del Puerto": "Si esa mujer es buena.../ porque la vi reír/ porque la vi llorar/ porque la vi rezar"...


viernes, 3 de diciembre de 2021

Irreductibles Reducidos

Jaime Guzmán decía: "Nos odian porque nos saben irreductibles". Los comunistas en efecto lo odiaban y por eso lo mataron. Su principal asesino vive libre, acogido en París. Lo fue a visitar Gabriel Boric, uno de cuyos mayores "méritos políticos" anteriores había sido fotografiarse con una camiseta estampada de Guzmán baleado en la cabeza. Aspira a ser Presidente y algunas encuestas lo favorecen. ¡Qué mal está Chile!

Johannes Kaiser creó un programa en YouTube e invitó a Gonzalo Rojas y a mí a participar. Se llamaba precisamente "Los Irreductibles" y en él nos dábamos un festín hebdomadario hablando contra los rojos, los kerenskys y el piñerismo entreguista. Pero el lunes último, cuando me presenté a la cita habitual, Johannes no mandó el link y el programa no se transmitió. Lástima. Parece que los comunistas tuvieron éxito en "asesinar su personalidad", acusándolo de contrario al voto femenino y de defender a los violadores. La prensa dice que ha perjudicado la campaña de Kast. Pero la verdad es que es partidario del sufragio femenino y del castigo a los violadores, pero tiene humor y bromeó hace años acerca de las votantes alemanas que apoyaron la inmigración de sujetos que después las violaban y acerca de Las Tesis que acusaban a los machos violadores.

Adolfo Paúl ha recordado que ya en el derecho romano el animus iocandi o espíritu humorístico o de broma desvirtuaba el animus injuriandi. Johannes suele emplear sarcasmos y hacer chistes, dos de los cuales los censores rojos descubrieron, uno de ¡hace cinco años! cuando comentó que sería bueno revisar el derecho a voto de las que lamentaban la alta tasa de violaciones cometidas por los inmigrantes a quienes ellas mismas habían favorecido y otro de hace dos años, cuando "las Tesis" acusaban en la calle a pecho descubierto a los "machos violadores", y él comentó que algunas eran tan poco agraciadas que los hechores merecerían ser condecorados.  

Ha sido crucificado por eso y es un mártir del humor. No está contra el voto femenino ni el castigo a los violadores, pero en Chile las mentiras comunistas, no sé por qué, las cree la mayoría. Tanto que los rojos han escrito la historia reciente (véase cualquier texto escolar) y, como "el que controla el pasado controla el presente y el que controla el presente controla el futuro" (Orwell), se aprestan a asumir la presidencia de la república con su candidato Boric.. 

Chilezuela está ad portas y hasta los irreductibles hemos sido reducidos.