viernes, 30 de diciembre de 2022

Casi 8 Millones de Víctimas de un Delito

Fui a votar el 4 de septiembre último y marqué la opción "Rechazo", tras leer en el art. 142 de la Constitución lo que ello significaba, es decir, que se ponía término al único proceso constituyente contemplado en su texto, se rechazaba su propuesta de nueva Constitución y la actual seguía vigente. El "Rechazo" venció con casi 8 millones de votos, representativos del 61,8 % del electorado. 

Con enorme sorpresa leí el editorial de El Mercurio en días siguientes convocaba a "completar" un imaginario proceso constituyente. Pues ya no existía ninguno. Todavía mayor ha sido la  sorpresa posterior cuando, en virtud de un denominado "Acuerdo por Chile", una mayoría parlamentaria propone, en publicitadas sesiones, cambiar el texto del art. 142 ya ratificado por nuestro voto el 4 de septiembre. 

Pues tal cambio es una intervención constitutiva del delito de falsedad previsto y sancionado en el Párrafo 4, "De la falsificación de documentos públicos o auténticos", art. 193 N° 3, del Código Penal, que sanciona a quienes "cometieren falsedad: ... 3° Atribuyendo a los que han intervenido en  (un acto) declaraciones o manifestaciones diferentes de las que hubieren hecho". La pena va de presidio menor en su grado medio a presidio mayor en su grado mínimo, es decir, de 3 años y un día a 10 años. 

La Constitución es un documento público y los parlamentarios son funcionarios públicos. Los casi ocho millones de electores que votamos por que siguiera vigente dicha Constitución estamos siendo públicamente víctimas del delito de falsedad, mediante el cual se nos atribuyen, en un nuevo artículo 142, declaraciones o manifestaciones diferentes de las que hemos formulado al aprobar su texto actual.

Supongo que un fiscal del Ministerio Público se está movilizando para investigar y perseguir este delito ante el respectivo juez en lo criminal, promoviendo desde ya las iniciativas de desafuero pertinentes. 

Obviamente, escribo lo anterior suponiendo que en el país impera un estado de derecho.

miércoles, 28 de diciembre de 2022

Adiós a las Urnas

El año pasado yo repetía que un año después, o sea ahora, nadie se iba a acordar de la Convención Constituyente. Pero los diarios le dedicaban ríos de tinta y los panelistas de televisión horas de sesudos análisis de medianoche. Y la revista Time decía que Elisa Loncon era una de las mujeres líderes mundiales y la llevaba en portada. Hoy nadie se acuerda de ella ni de Bassa, Stingo o Atria. Son apenas "recuerdos del pasado". 

En un año más tampoco nadie se va a acordar del "Acuerdo por Chile", que es un autogolpe de estado  respaldado por los comunistas, Boric, El Mercurio, La Tercera, Chile Vamos y el empresariado. Porque no tiene pies ni cabeza y ni siquiera es un proceso democrático: omite un plebiscito de entrada y deja fuera de la posibilidad de elegir y opinar a todo el sector que apoya la Constitución vigente. Y, además, tal Acuerdo, según su texto, implica cometer el delito tipificado en el artículo 193 N° 3 del Código Penal, al atribuir a los autores del art. 142 de la Constitución "declaraciones o manifestaciones diferentes" de las que hicieron, lo cual está penado con hasta diez años de presidio.

Predigo que en 2024 nadie se va a acordar siquiera del "Acuerdo por Chile" de 2022. Por supuesto, tampoco nadie va a hacer efectiva la responsabilidad de sus protagonistas por el delito del art. 193. Y pronostico que todo va a terminar igual que el disparate del "Acuerdo por la Paz y una Nueva Constitución".

Por mi parte, entonces, digo "adiós a las urnas" por un año. No participaré en nada de lo que acuerde el Acuerdo. Si voy a ir obligado a votar, lo haré sólo para evitar la multa y escribiré "Pinochet" en la cédula. En la única elección ajustada a la carta vigente que contempla 2024, la municipal, votaré por algún candidato pinochetista y no arrepentido, tanto para alcalde como para concejal.

En cuanto al Chile que se hunde, sálvese quien pueda y como pueda. Será lo que yo procuraré hacer "en la medida de lo posible", para citar a uno de sus enterradores. Bien puede que un 62% de nuevo coincida conmigo al final, en el plebiscito de salida, cuando de nuevo sabremos quién tenía la razón.

domingo, 25 de diciembre de 2022

Coup d'État

Los partidarios de la Constitución actual, que es la única vigente, hemos sido cancelados y suprimidos. No tenemos dónde opinar ni sufragar. El establishment chileno ha creado, al margen de la Constitución, un "proceso constituyente" no contemplado en ésta y nacido del wishful thinking del diario El Mercurio, que el 5 de septiembre, al día siguiente de que en el plebiscito ratificatorio el 62% se hubiera pronunciado en favor de mantener la Constitución, editorializó diciendo lo contrario: que el "proceso constituyente" para reemplazarla continuaba. 

Esto lo recogió el presidente de la República, quien, puesto a elegir entre obedecer a la Constitución o a El Mercurio, optó por este último. Es decir, hubo de hecho un autogolpe de estado. Y se plegaron al mismo los partidos de centroderecha, constitutivos del piñerismo y también, obviamente, los de izquierda. Y, sorprendentemente, las élites empresariales y el resto de la prensa. Sólo se mantuvo al margen del autogolpe el Partido Republicano, que permaneció dentro de la institucionalidad, pero no sin trastornos intestinos derivados de las vacilaciones de su único senador, Rojo Edwards, que hasta llegó a participar en reuniones en La Moneda, en aparente aquiescencia con los conjurados. Ese conflicto se mantiene.

Los protagonistas del golpe-transformado-en-autogolpe actuaron rápidamente y propusieron un itinerario que no incluyó un plebiscito de entrada, como en el anterior proceso concluido el 4 de septiembre. "No podemos exponer al presidente Boric a una nueva derrota electoral", dijo el diputado RN Diego Schalper, confesando una curiosa complicidad. Y la condición minoritaria del golpe. Ello significó dejar fuera de toda participación política al único sector respetuoso de la Constitución, es decir, a los que defendemos el imperio de sus disposiciones. Sin plebiscito de entrada no tenemos dónde ni cuándo votar, pues el siguiente llamado a hacerlo, formulado por los conjurados, será con ocasión de elegir miembros de un Consejo Constitucional propuesto por ellos, con el cual no queremos tener nada que ver los no-golpistas, es decir, los respetuosos de la Constitución. 

La omisión del plebiscito de entrada debería normalmente haber hecho estallar las redes sociales, pero en el hecho los twits reiterados que he publicado al efecto han suscitado sólo unos pocos centenares de likes. Asimismo, mis reiterados blogs sobre el tema tampoco han despertado mayor interés. 

Dicen que en Chile hay democracia, pero los que defendemos la Constitución no tenemos dónde votar para defender su vigencia. Yo pensaba que un destacado columnista de derecha de El Mercurio de fin de semana, Gerardo Varela, rompería lanzas por nuestra causa, pero ayer reapareció plegándose al autogolpe y felicitando a los dirigentes empresariales que lo han apoyado. 

No obstante lo anterior, se publica que The Economist mantiene a Chile entre los países democráticos, pero acá se ha derogado la Constitución de facto y sin siquiera permitir que votemos los partidarios de mantenerla. Serán "cosas de la vida", como me dijo un director de la BBC de Londres cuando le reclamé por suprimir mi intervención en un programa suyo sobre el gobierno militar.

En resumen, ha tenido lugar un golpe de estado exitoso, transformado en autogolpe al incorporarse Boric a él. La mayoría se ha plegado al mismo y los de la minoría no tenemos derecho a sufragar ni opinar ni nadie siquiera nos menciona. Hemos sido cancelados. No existimos. Como diría el poeta, "tras la última paletada, nadie dijo nada, nadie dijo nada".

jueves, 22 de diciembre de 2022

"Efecto Centroderecha"

El "efecto centroderecha" consiste en que ese sector, de repente y cada cierto tiempo, se pasa al adversario. Por eso yo insisto en decir que soy de derecha a secas, para distinguirme de los que "se dan vuelta la chaqueta". Aprendí muy joven, en 1958, de un senador conservador, que se llamaba Juan Antonio Coloma, y de otro liberal, Raúl Marín Balmaceda, a no pasarme al enemigo. Los partidos de ambos querían apoyar a Eduardo Frei, DC, pero ellos querían adherir a Jorge Alessandri, que era de derecha de verdad. Para evitar el éxodo de sus conservadores Coloma, proclamó su propia candidatura presidencial y eso retuvo a los entreguistas. Por su parte, Raúl Marín Balmaceda hizo algo todavía más efectivo: se murió durante un discurso en que enfrentaba a la mayoría entreguista del consejo liberal, que quería fugarse hacia Frei. Gracias a todo eso, al final ambos partidos llevaron como candidato a Jorge Alessandri, que ganó la elección presidencial de 1958. Segundo Allende y tercero Frei.

Después, en 1985, surgió un acuerdo que suscribió gente de centroderecha en alianza con los DC y algunos socialistas para demandar que se fueran Pinochet y la Junta Militar. Los entreguistas querían que abdicara un gobierno de sus propias ideas para que gobernara otro con ideas ajenas. Siempre recuerdo a una buena periodista de derecha, Carmen Gardeweg, diciéndome, terminante: "Supongo que estás con el Acuerdo". Yo no lo estaba, por supuesto, pero además entonces había un Presidente de la República con personalidad: cuando el cardenal Fresno (hábilmente utilizado) le llevó el texto del Acuerdo, no sólo no se lo recibió, sino que se lo volvió a introducir donde aquel lo llevaba (la bocamanga de su sotana cardenalicia). Y por eso en 1990 Pinochet pudo devolver a los civiles un Chile a la cabeza del hemisferio, pacificado, sin terrorismo ni conflicto en la Araucanía.

Ahora la misma centroderecha ha vuelto a desfallecer, encabezada por la prensa y los canales de tv del sector, los empresarios, el piñerismo y sus partidos. Se han pasado al enemigo y han llegado con éste a un llamado "Acuerdo por Chile", que debería mejor llamarse "Acuerdo Para Entregarnos a la Izquierda", dirigido a derogar la Constitución de 1980. Sostienen la tesis de que hay un proceso constituyente en marcha después del terminante plebiscito del 4 de septiembre, lo cual no es verdad. Pero han procedido como si lo fuera. Y, a diferencia del único proceso constituyente anterior, que terminó derrotado por 62 vs. 38 % en las urnas, ¡ahora ni siquiera contempla un plebiscito de entrada! Un diputado entreguista de RN dice que ¡Boric no puede arriesgarse a otra derrota! ¿No decían que todos los chilenos quieren otra Constitución? No era verdad, naturalmente. Se han saltado el plebiscito de entrada y ya tienen contemplada la fecha del 7 de febrero próximo para inscribir candidaturas a uno de los órganos constituyentes que contempla el Acuerdo.

Es decir, el entreguismo de la centroderecha se ha agravado. Ya no halla cómo favorecer al adversario. Está en marcha de nuevo e inatajable el "efecto centroderecha", que siempre ha tenido las más deletéreas consecuencias para él. Ni "el sector" ni los demás chilenos me están haciendo el menor caso, una vez más, y sin siquiera dar una buena explicación. ¡Estará de Dios!

domingo, 18 de diciembre de 2022

¿Por Qué No Hay Plebiscito de Entrada?

Porque saben que lo pierden. Por eso a los partidarios de seguir con la actual Constitución nos han "cancelado", como dicen ahora. La izquierda y los entreguistas de centroderecha nos han hecho desaparecer de los medios a quienes somos partidarios de la Constitución (y de reformarla para remediar errores introducidos por modificaciones inadecuadas, como la que permite 21 partidos en el actual Congreso). 

Pero no quieren hacer plebiscito de entrada, como en el primer y único proceso constituyente autorizado, porque ahora la mayoría votaría Rechazo. Léase el artículo de Eduardo Engel en El Mercurio de hoy, donde está el estudio sobre el nuevo votante, que en número de 4,5 millones debió salir a sufragar a raíz de establecerse el voto obligatorio. Engel dice que la izquierda y la derecha creían que esos nuevos sufragantes favorecían a la primera, y ambas se equivocaron: los votantes obligados terminaron apoyando al Rechazo y lo volverían a hacer, probablemente, en un plebiscito de entrada. 

Pero al omitirlo hacen desaparecer esa opción de la papeleta de votación y del debate. ¿Dónde aparece la opinión de los partidarios de seguir con la actual Constitución? En ninguna parte. Eso no es democrático.

Hoy domingo yo esperaba la columna de Gerardo Varela, el único columnista de derecha a secas y no entreguista de los domingos. ¡Y su columna no apareció! ¿No quiso escribir, por prudencia, para no contradecir la línea editorial? ¿No lo publicaron, por apoyar la Constitución actual? No se sabe. El hecho es que no apareció.

Los entreguistas ya nos pidieron a los de derecha y del Sí a Pinochet que nos ocultáramos para no perjudicar el triunfo del Rechazo el 4 de septiembre, pero eso no puede significar que desaparezcamos para siempre. Los desafío a que hagan un plebiscito de entrada. Podría ahorrarle mucho al país saber desde ya que una mayoría quiere seguir con la Constitución vigente y punto. Y que si hay algún Acuerdo, sea para solucionar los verdaderos problemas del país y los creados por reformas anteriores.

sábado, 17 de diciembre de 2022

Cosas de la Vida

En enero se cumplirán 50 años desde que apareció mi libro "Comentarios Escogidos", prologado por Gonzalo Vial Correa diciendo: "Hermógenes Pérez de Arce es un convencido de que el único progreso humano es el de la libertad personal". En ese tiempo compartían esa postura conmigo El Mercurio, del cual era redactor; toda la derecha política, representada por el Partido Nacional, del cual pocos meses después sería diputado en el Parlamento; y todos los dirigentes empresariales: de la agricultura (en cuya radio hacía mis "Comentarios"), la minería, la industria, el comercio y el ente que cobijaba a las anteriores, la Confederación de la Producción y del Comercio, presidida por Ernesto Ayala.

Todos los anteriores juntos, en cohesionado frente, votamos Sí en el plebiscito de 1980, que aprobó la Constitución; lo mismo en 1989, en el plebiscito acordado de izquierda a derecha por la naciente Concertación y el presidente Pinochet, convocado para ratificar con un 91,25 % de los votos las reformas y la Constitución en su legitimidad democrática.

Por esas "cosas de la vida", si bien hoy me encuentro en la misma posición, defendiendo la libertad, como hace medio siglo, en los demás se ha producido una increíble mutación: El Mercurio y los nuevos dirigentes de la agricultura, la minería y la industria (el recién elegido por el comercio no se ha pronunciado), y el de la propia Confederación de la Producción y del Comercio, ahora hacen causa común con la izquierda, incluido el Partido Comunista, para derogar la Constitución y consagrar otra. Lo único seguro del contenido de ésta será que privará de parte de su libertad a los chilenos, pues ésa ha sido la meta de siempre del comunismo. Como alguna vez expresó un afín a ese partido, el expresidente Ricardo Lagos, en su libro más leído, "La Concentración del Poder Económico",  "todos los medios de producción deben pasar a manos del Estado". A medida que el Estado crece, la libertad disminuye (Ronald Reagan).

Cuando tienes una sola línea te pasan cosas como quedarte solo o ser "cancelado". 

Facts of life, "cosas de la vida", me dijo en 1983 un director de la BBC, cuando le reclamé, tras haber ellos grabado con tremenda parafernalia mi defensa del régimen de Pinochet, sin que nada de la misma apareciera en su programa.  

viernes, 16 de diciembre de 2022

El Suicidio Asistido de Chile

El manotazo estatal a las AFP y los fondos previsionales, la reforma tributaria confiscatoria, la nueva Constitución impulsada por el comunismo, la prensa y los empresarios (¡todos de acuerdo!) y la quiebra de las isapres, provocada por la misma justicia roja que encubre usurpaciones de tierras y prevarica para apresar exmilitares, son causas del suicidio asistido de Chile. Lo peor: es asistido por casi todos. El Chile anterior a todo eso morirá. ¿Te vas a quedar a verlo fallecer?

Anoche oí una conferencia en Concepción de Tomás Mosciatti, sobre lo mismo. Lo llama "anomia", palabra de doble significado: no llamar a las cosas por su nombre y no respetar ninguna norma. Dice que el "acuerdo constituyente" es "una mascarada". Otro periodista muy oído, Fernando Villegas, coincide conmigo en que el único propósito de dicho acuerdo es borrar el nombre de Pinochet (ver mi blog de anteayer).

Ya nos pasó Panamá en América Latina y ocupó el primer lugar. Muy luego nos aventajará Uruguay. En 2023 seremos el país que más decrecerá en el hemisferio, como en 1973. Pero entonces quedaba una "reserva moral" que hoy no se ve por ninguna parte. Yo vendería todo y me iría a Uruguay, donde los impuestos son más bajos y le permiten a uno tener inversiones en paraísos fiscales. Allá no hay encerronas, saqueos, portonazos, incendios, guerrilla de la CAM ni reinado de los narcos. Y son mejores para el fútbol. Pero no soy yo solo. Tengo cónyuge,  cuatro hijos, 16 nietos, muchas casadas, 18 bisnietos. Estoy resignado a compartir con ellos el triste destino de chileno de hoy.

La justicia acá no existe, no es tal, es parte del problema. Todo lo que se refiere a fallos sobre el pasado es falso. Ver mi blog de ayer sobre el actor, exsubversivo, al cual le han regalado $120 millones del erario. Todo mentira lo de sus "torturas" y "exilio". Al erario le están robando dinero como nunca antes se había visto y con impunidad. Nadie defiende al Estado. Al contrario, se le esquilma con aplauso general. 

Y los cerebros de todos han sido tan lavados que el otro día un hijo mío me dijo: "Yo creo que Pinochet ordenó las muertes de la comitiva de Arellano". Precisamente lo contrario de lo que pruebo en mi libro más vendido, "La Verdad del Juicio a Pinochet". Íbamos en auto y le advertí que me iba a lanzar al camino, cosa que por supuesto no iba a hacer. Pero eso me lo dijo todo.

El próximo año y con plata nuestra se va a desarrollar la más gigantesca campaña de mentiras sobre los 50 años del golpe y de nuevo vamos a ver al comunismo, los empresarios, los diarios y la TV repitiendo falsedades igual que hoy lo hacen para forzar la mascarada constituyente.

Si puedes irte, hazlo. Así no tendrás que compartir el suicidio asistido de Chile.

jueves, 15 de diciembre de 2022

Un País y Dos Historias

Hoy en El Mercurio, p. C12, se informa que el actor Hugo Medina recibirá $120 millones de indemnización en un juicio por haber sido "detenido y torturado por agentes del Estado entre 1973 y 1975, tras el cual sufrió exilio a Londres, prohibiéndosele su ingreso al país por más de 10 años".

Pero no fue "exiliado", sino que se le conmutó una condena a 10 años de presidio, por "extrañamiento" al exterior de igual plazo. La condena derivaba de conductas subversivas. Si hubiera sido torturado, habría podido querellarse, pero no lo hizo. Durante el gobierno militar hubo querellas por torturas que se tradujeron en presidio para los autores (casos de detectives "Vengadores de Mártires" y del oficial Carlos Herrera Jiménez, hoy preso en Punta Peuco.)

Seguramente Medina ya tiene pensión vitalicia de la Comisión Valech, que dio tal beneficio a 28 mil personas interrogadas por sus vínculos con el terrorismo durante el gobierno militar. Éste combatió delincuencia y subversión con eficacia y por eso se podía salir a las calles con tranquilidad. Finalmente devolvió a la civilidad un país pacificado. Si no, tal vez habría debido dejar el poder mucho antes, como lo proponían el general Leigh en 1977 y el cardenal Fresno en el Acuerdo Nacional de 1985.

De modo que la versión real hoy debería ser que el actor condenado a diez años recibió conmutación de esa pena por extrañamiento, no exilio, en Londres. El país ha sido generoso y los jueces olvidadizos de la prescripción para premiar la actividad armada subversiva. De haber prosperado ésta, habría convertido a Chile en satélite soviético hasta la caída del Muro de Berlín o aún después, como en el caso de Cuba.

Un país, dos historias. Una, generadora de millonarios premios de cargo fiscal. La otra, olvidada.

miércoles, 14 de diciembre de 2022

El Problema es Pinochet

No necesitamos otra Constitución. Los políticos, reunidos para redactarla (pero incapaces de hacerlo), lo reconocen tácitamente, al precisar "12 Bases Constitucionales" del proyecto que les redactará su "medio pollo", el Consejo Constitucional, al cual a su vez le hará el trabajo un "cuarto de pollo", el grupo de 24 "expertos". De la plata no se preocupen¨: la pone Moya (el contribuyente). Aquí se trata de que "otro haga la pega", pues el Congreso es como Boric, no trabaja. Es "poder constituyente". Los políticos hacen ya suficiente esfuerzo yendo a cobrar la dieta + e$tipendio$.

Por mi parte, yo cumplo con mi pega (gratis): probar que las "bases" acordadas para la nueva Constitución están todas en la actual e indico dónde. 1ª Base: "Chile es una República democrática", etc.: está en el art. 4 de la actual Constitución. 2ª Base: "El Estado de Chile es unitario, etc.", está en el art. 3º de la actual. 3ª Base: "La soberanía tiene como límite, etc.": Está en los arts. 5 y 6 de la actual. 4ª Base: "La Constitución reconoce a los pueblos indígenas, etc." Está en el art. 1º de la actual. 5ª Base: "Chile es un Estado social y democrático, etc.": Está todo en el art. 19 de la actual. 6ª Base: "Los emblemas nacionales": están en el art. 2º de la actual. 7ª Base: "Chile tiene tres poderes separados, etc." Están en los capítulos IV, V y VI de la actual. 8ª Base: "Órganos autónomos". Están los mismos en sendos capítulos VII, VIII, IX, X y XIII de la actual. 9ª Base: "Garantías, derechos y libertades". Están todos en el art. 19 de la actual. 10ª Base: "Fuerzas Armadas, de Orden y de Seguridad". Están todas en el capítulo XI de la actual. 11ª Base: "Estados de Excepción". Están en los arts. 39 a 45 de la actual. 12ª Base: "Conservación de la naturaleza". Está en el art. 19 Nº 8 de la actual.

¿Por qué un país necesita otra Constitución si ya tiene una con las mismas bases? Porque no soporta que la haya hecho Pinochet. Ése es todo el problema.

El comunismo se concentró, desde el mismo 11 de septiembre de 1973, a través del KGB soviético, al "character assassination" de Pinochet. Y eso sigue. El comunismo es maestro en destruir personalidades, como Gabriel González Videla y Eudocio Ravines, por poner dos ejemplos históricos. Como consecuencia, Chile, cuya élite compra todos los bulos comunistas, no soporta reconocer que se le debe mucho. Ya hay más de un "ministerio de la verdad" y de una "policía del pensamiento", pagados por usted, por supuesto, sistemáticamente dedicados a borrarlo de la memoria chilena. Es como en el país  de "1984", donde el trabajo se detenía periódicamente para vituperar al "enemigo del pueblo", Emmanuel Goldstein. Chile no puede soportar que vivamos bajo la Constitución de Pinochet. ¿Qué hacer? Otra casi igual, pero de otro, aunque sea Boric. No importa el ridículo ni derrochar recursos. Todo está permitido, salvo hacer trabajar a los políticos. Por eso han discurrido un Consejo de 50 (igual que el Senado) que, como éste, haga como que trabaja. Y 24 "expertos" que sí serán los únicos que trabajen. 

¡Adiós Pinochet! Y punto, como dice Lagos.  


martes, 13 de diciembre de 2022

"La Constitución Que Vosotros Matásteis..."

Okey, el "vientre blando" (centroderecha) acaba de perpetrar otra traición al legado de Pinochet. ¿Novedad? Ninguna. ¡Ya lo ha hecho tantas veces! Tres eligiendo a Piñera, una como senador y dos como presidente. Después respaldando la rendición de Piñera ante la violencia. Y ahora da los votos para intentar de nuevo derogar la Constitución. Y se forma un frente insólito, desde la Confederación Nacional de la Producción y del Comercio y la Sofofa, pasando por El Mercurio, La Tercera, el Canal 13 del (posiblemente) "hombre más rico de Chile", Andrónico Luksic, y llegando hasta el Partido Comunista. Este "Acuerdo por Chile" debió llamarse, en rigor de verdad, "Acuerdo contra Chile", pues recuérdese que el anterior, también ampliamente "celebrado", alcanzado por Piñera (con beneplácito de todos los anteriores) con el marxismo ya nos pondrá en el último lugar de América Latina este otro año, tal como estábamos en 1973. Ya, lo lograron otra vez. Está bien. Juan Sutil dice hoy en el diario (nunca termina de sorprenderme) que el acuerdo ha sido muy tranquilizador.

Pero ¡atención! Firmado y todo este "Acuerdo por Chile", la Constitución de 1980 sigue vigente y, teóricamente (sólo teóricamente, es verdad) debe ser respetada. En el hecho la violan casi todos y casi todos los días. Pero algunos "garantes" podrían despertar de su siesta y hacerla respetar. ¿Alguien ha pensado en eso? ¡Cuidado!

Segundo llamado de atención: ¿qué pasó con el anterior "Acuerdo", también muy celebrado por el "vientre blando"? Que terminó en un Rechazo del 62 % a su fruto, el engendro de Constitución patrocinado por Boric y sus seguidores. Nadie lo habría esperado. La encuesta más seria (CEP, 2022) anunciaba que el Rechazo podía ganar 27% a 25%. ¿Qué pasó? Que el voto obligatorio atrajo a las urnas a 4 millones 200 mil personas antes abstencionistas, que resultaron más leales que el "vientre blando" al legado de Pinochet y ratificaron la Constitución de 1980 por 62% vs. 38%. Sorpresa mundial.

Tercer llamado de atención: el Partido Republicano y el Partido de la Gente no forman parte del "Acuerdo por Chile" y respaldan la actual Constitución. Y ambos crecen día a día en militantes, mientras RN y UDI son los que mas caen (Servel).

Cuarto llamado de atención: la encuesta Cadem del domingo último revela que quienes suscitan el mayor rechazo ciudadano son los líderes comunistas y los "entreguistas" Chahuán y Macaya, del "vientre blando". Y por primera vez José Antonio Kast, ajeno al "Acuerdo" y partidario de mantener la Constitución, entra al exiguo grupo de políticos con mayor evaluación positiva que negativa. Y encabeza las encuestas presidenciales.

El 26 de noviembre de 2023, en el siguiente  plebiscito ratificatorio, los 4 millones 200 mil nuevos votantes obligados podrían volverles a decir a los señores del "vientre blando" entreguista, kerenskys, amarillos, socialistas, comunistas y demás, que "la Constitución de 1980, que vosotros tantas veces matásteis, goza de buena salud."  

domingo, 11 de diciembre de 2022

Nos Creen Imbéciles

Y tienen razón: elegimos a Boric. Peor: tropezamos con la misma piedra, porque hace 50 años elegimos a Allende, que dejó al país último en América, decreciendo más de 6 %, con escasez, la inflación más alta del mundo y al borde de la guerra civil. Suficientes credenciales.

En El Mercurio de ayer sábado 10.12 la ministra de Justicia y DD. HH., Marcela Ríos, confirma que los marxistas nos creen imbéciles: llama a celebrar "El Día Mundial de los DD. HH." Afirma que el gobierno militar los violó y en cambio ellos, comunistas y socialistas, los respetan. Falso: "El Libro Negro del Comunismo" documentó que mataron a más de cien millones. Y el gobierno militar fue llamado por los civiles porque, entre otras razones, Allende violaba los DD. HH. Sus torturas salían en El Mercurio. Ni siquiera las desmentía. Y el libro de Cristián Jara Taito (Instituto de Ciencias Políticas de la U.de Chile) documentó cómo el socialismo, desde 1965 adelante, acordó por unanimidad, en sus consejos generales, la toma del poder por las armas. 

Y durante el gobierno militar hubo dos movimientos terroristas principales, el MIR y el FPMR, este último con 4.500 hombres en armas (Baradit dixit). Tenían por objeto matar chilenos. ¿Por qué, entonces, fueron "violaciones de DD. HH." dar muerte a sus miembros? De hecho, terroristas mataron al teniente Carevic, al mayor Roger Vergara, al intendente Carol Urzúa, al teniente Zegers Ried, al carabinero de la Llama de la Libertad, Hilario Novoa; a los escoltas del general Sinclair, a los del presidente Pinochet, a carabineros de un bus policial, a pasajeros del metro, de la locomoción, del tren en Queronque y un largo etcétera. E internaron armas.

La "defensa de los DD. HH", la ideó el marxismo para anular a la fuerza pública. Y la han anulado. Hoy ya ha habido siete muertos. Han inhibido a gobernantes imbéciles. Otros, como Augusto Pinochet, Gabriel González Videla e incluso Eduardo Frei, con su ministro Pérez Zujovc, tuvieron pantalones y mantuvieron el orden. El que falta hoy.

No siempre fuimos imbéciles. Tuvimos un intervalo especialmente lúcido, 1973-1990. Ojalá no el último. 

viernes, 9 de diciembre de 2022

Élite de Ida y Excomunismo de Vuelta

Cuando Javiera Parada era comunista, bajo el primer gobierno de Bachelet, era casi la única que promovía una nueva Constitución. La Carta restringe al Estado y, naturalmente, los comunistas querían y quieren casi todo para el Estado, porque lo manejan ellos. Pero Javiera es habilosa y con el tiempo aprendió. Hoy viene de vuelta y está en Evópoli, es decir, un lugar en el centro (entender un poco). Lo notable es que su tránsito político es el inverso al de las élites supuestamente de derecha, que se han volcado en apoyo al jurídicamente inexistente "proceso constituyente", dirigido a cumplir la máxima aspiración comunista de derogar el Estado subsidiario.

Hace más de una década Javiera promovía la idea de escribir "AC" ("Asamblea Constituyente") en los votos, pues casi nadie --comenzando por la mayoría popular, lo que se extiende hasta hoy-- tenía interés en una nueva Constitución (ver encuesta CEP de 2022, en que ese tema no está ni siquiera entre los 18 de las preocupaciones mencionadas por la gente.) 

Un misterio que no espero ver aclarado en vida es por qué nuestra élite, es decir, el conjunto de la Confederación de la Producción y del Comercio, la Sociedad de Fomento Fabril, El Mercurio, La Tercera, el Canal 13 (cuyo dueño es, probablemente, el hombre más rico de Chile, Andrónico Luksic Craig); RN y la UDI apoyan el mayor anhelo comunista. Mientras Javiera viene de vuelta la élite en masa va de ida. Y no sólo Javiera viene de vuelta: el más lúcido detractor del (jurídicamente inexistente) "proceso constituyente" es un excomunista, el escritor e intelectual Sergio Muñoz Riveros. Él ya ha completado el trayecto, todavía no íntegramente recorrido, de Javiera Parada hacia la lucidez de la que inexplicablemente huyen las élites. "Júpiter ciega a quienes quiere perder". 

miércoles, 7 de diciembre de 2022

Desconcierto

He tratado de explicarme por qué personas e instituciones de centroderecha --v. gr. RN, UDI, El Mercurio, La Tercera, Canal 13-- pueden estar en la postura de que se necesita una nueva Constitución. No he encontrado la razón. Recuerdo a Juan Carlos Jobet, un tipo aparentemente serio, ministro de Energía de Piñera, diciendo que votaba por una nueva Constitución debido a la "falta de legitimidad" de la actual. ¿Puede alguien serio tener tal grado de desinformación en un tema cívico fundamental? Puede haber distintas opiniones, pero no distintos datos. "Dato mata relato". Pero en Chile, parece, "relato (consigna) mata dato". Hoy he visto a María José Hoffmann, diputada UDI, otra persona seria, decir algo parecido a Jobet: "tenemos una buena Constitución, pero carece de legitimidad". Compró una consigna.

He escrito varias veces en este blog que la Constitución más apoyada, ratificada popularmente y legitimada de la historia de Chile es la actual. Fue aprobada por el 67 % de los votos en el plebiscito de 1980, donde hubo una concurrencia del 56 % de la población a votar. De esos sufragantes el 67 % votó Sí a la Constitución. El historiador Gonzalo Vial, adverso a Pinochet en general (si bien en sus últimos años recapacitó) escribió sobre ese plebiscito en "Pinochet la Biografía", tomo II, p. 423: "...la holgada y libre victoria del Sí, como verdad general, sólo podía negarse por obcecación".

Después la misma Constitución fue reformada tras un acuerdo cívico-militar o gobierno-Concertación en 1989 y ratificada por un plebiscito donde votó el 85 % de los inscritos, de los cuales el 91,25 % dijo "Sí". Finalmente fue reformada en 2005 tras acuerdo Concertación - Alianza, el cual esa vez hizo innecesario un plebiscito. Resultó tan respaldada que el presidente de la República promotor de las reformas, Ricardo Lagos, decidió sustituir con la suya la firma de Pinochet en el texto (y la firmaron también todos sus ministros). ¡Todos querían ser coautores!

De ahí que nunca haya habido en Chile una Constitución más popularmente legitimada, ratificada y consagrada. ¿Cómo pueden decir Jobet, Hoffmann, RN, UDI, El Mercurio, La Tercera, Canal 13 y un largo etcétera de personas e instituciones que carece de legitimidad?

Si ésa es la base principal para intentar otro "proceso constituyente", resulta claro que el mismo no se justifica. Por eso quienes procuramos abordar el debate con razones y sin consignas estamos desconcertados. Yo pienso que esos 4 millones 200 mil electores, previamente abstencionistas, que acudieron a votar bajo la amenaza de una alta multa el 4 de septiembre, "dando vuelta" el plebiscito de entrada y configurando un 62 % que dio prueba de sentido común, probablemente van a volver a rechazar si se les convoca otra vez. Sobre todo si se hace con el argumento de una inexistente "ilegitimidad" del texto actual.

sábado, 3 de diciembre de 2022

Los Ocho Aylwines

"El Mercurio" comete hoy ocho errores en su editorial titulado "Patricio Aylwin y la Transición". Si lo sometiera a "El Polígrafo", no pasaría. Primer error: decir "la Transición" en el título, pues Aylwin gobernó después de la transición, que terminó el 11 de marzo de 1990 cuando dejaron de regir los artículos transitorios de la Constitución y rigieron los permanentes, hasta hoy. Luego repitió el error en el texto, cuando dice: "encabezó la transición democrática" que no existió. Y erró al decir que "su misión de unir al país la cumplió ampliamente", pues no unió sino dividió, al sentar a los militares en el banquillo de los acusados, pidiendo perdón a comunistas y socialistas a quienes aquéllos impidieron tomar el poder por la armas. Y Aylwin hasta lloró de pena por los guerrilleros UP, siendo que Frei declaró a ésta, la UP, como "la única culpable de todo" (carta a Mariano Rumor). 

Luego el editorial de nuevo erró al decir que Aylwin "encabezó la reconciliación", cuando lo que hizo fue desatar el odio contra los salvadores de Chile, mediante la ilícita Comisión Rettig. Y también al añadir que "no hubo sector que se marginara de restituir la vida democrática", cuando el terrorismo de izquierda se excluyó y siguió impertérrito, desde luego asesinando en 1991 al senador Jaime Guzmán. Después el artículo repite el error de resaltar la reconciliación inexistente y añade otro, al atribuirle a Aylwin un "desarrollo inédito", cuando no era inédito, pues Pinochet le había entregado el país creciendo al 10 % anual, tras años en que lo inédito había sido equilibrar el presupuesto junto con bajar los impuestos. Un séptimo error es interpretar la frase aylwiniana "en la medida de lo posible", cuando lo que él había hecho había sido contravenir la ley en una medida jurídicamente vedada e imposible, oficiando a la Corte Suprema para que no aplicara la amnistía, una ley vigente y que reconocía como vigente, a militares en los términos en que procedía aplicarla. Finalmente un octavo error es afirmar que "su monumento constituye una manifestación del consenso generalizado respecto del valor de su obra", pues no hubo ni hay tal consenso. No concurren a él ni los comunistas malagradecidos, que no asistieron a la ceremonia, ni los militares perseguidos ni la derecha leal a éstos.

Luis Felipe Moncada se pregunta acertadamente en whatsapp a cuál de los siete Aylwines se le levantó el monumento. La respuesta es que, en realidad, fue a ocho: (1) Al que gatilló el golpe al avisar, a través del hijo DC veinteañero del general Arellano, a éste, cabeza del grupo de "los quince" que preparaban el golpe, que no habría más diálogo con Allende; (2) Al que en los 90 pidió perdón a la guerrilla, con lágrimas en los ojos, por habérsele impedido tomar el poder por las armas; (3) Al que en octubre de 1973, cuando se producía el 57 % de todas las muertes de 1973-1990, se negó a condenar a los militares; (4) Al que 20 años después los sentó en el banquillo de los acusados por derrotar a la guerrilla; (5) Al que dijo que los militares habían salvado a Chile "de la guerra civil y de una tiranía comunista"; (6) Al que 20 años después negó haberlo dicho, atribuyéndolo al "Libro Blanco ése";  (7) Al que prometió en 1989 no indultar a los autores de hechos de sangre; (8) Al que poco después los indultó.

¡Un monumento a don Patricio y a todos los que fueron y son como él! ¡Ustedes fueron y son tan chilenos!

jueves, 1 de diciembre de 2022

Injusticias de la Vida

A fines de 1956 Patricio Aylwin me tomaba examen de Derecho Administrativo y yo contestaba lo que me soplaba un buen alumno desde la primera fila. Aprobé con tres blancas. Después le tocó a éste y Aylwin "lo estrujó", sin que yo pudiera devolverle la mano por no saber, y "lo rajó" con dos negras. Injusticias de la vida.

Ayer le levantaron una estatua a Aylwin y se recordó su condena a los militares, porque formó en 1990 una comisión para acusarlos por "violaciones a los DD. HH.", en circunstancias que en 1973, cuando tuvo lugar el 57 % de todas las muertes de 1973 a 1990, se negaba a condenarlos --decía-- "desde detrás de un escritorio... porque están recibiendo el fuego... y han derrotado a milicias armadas muy fuertemente equipadas y que constituían un verdadero ejército paralelo, para dar un golpe y asumir por la violencia la totalidad del poder. En esas circunstancias pensamos que la acción de las FF. AA. simplemente se anticipó a ese riesgo para salvar al país de caer en una guerra civil o en una tiranía comunista". Veinte años después negaba haberlo dicho, afirmando que lo había "inventado el Libro Blanco ese... del gobierno militar". Y llenó de plata a la guerrilla comunista. Lo malo fue que había quedado en video. Por eso ningún comunista asistió a lo de la estatua. Pero si Allende tiene una, habiendo arruinado y relegado al país al último lugar de América Latina, bien Aylwin, que sólo "se dio vuelta la chaqueta",  puede tener otra. Lo malo es que Pinochet, que nos salvó del comunismo y nos dejó a la cabeza de América Latina, no tiene ninguna. Injusticias de la vida.

Y estaba ahí Lagos, proclamado como "gran repúblico", pero que también prometió "completar el legado de Allende" y apoya ahora "la Constitución de Boric". Éste va a "cumplir" el legado: el próximo año Chile volverá a quedar donde lo dejó Allende, en el último lugar del hemisferio y decreciendo. Para colmo, Boric expresó que su grupo (Jackson, Vallejo, Cariola y dejando implícito que también él) alguna vez tendrán estatuas. Por destruir otra vez el país. Ya todo puede suceder. Injusticias de la vida. Así somos. Qué le vamos a hacer.   

lunes, 28 de noviembre de 2022

Un Gritito de Horror

Casi me parecía en algún momento ser hoy el único partidario de mantener la Constitución, pues hasta Sergio Muñoz Riveros, que había opinado eso, en su último aporte a El Mercurio pareció ceder terreno y apoyar el "proceso constituyente", es decir, "la última locura de Mel Brooks" abrazada por el tout-monde. Pero ayer Axel Kaiser en Las Últimas Noticias rescató también el sentido común y opinó que es preferible mantener la Carta actual.

Recordé otra época en que también me sentí igual de solo, hace 18 años, cuando el CJE general Juan Emilio Cheyre hizo su famosa declaración culpando al Ejército "de todos los hechos punibles y moralmente reprochables del pasado". Yo solía escribir la Semana Política y allí acusé a Cheyre de "tibieza" en la defensa de sus camaradas y sobre todo de los "caídos tras las líneas enemigas" ("mis camaradas y las víctimas", decía él). A raíz de eso el general mandó una severa réplica al diario preguntándole si promovía un golpe militar o algo así. El diario, contra mi opinión, no quiso duplicarle y absorbió el castigo. Entonces Cheyre seguramente pensó que no debía dejar las cosas ahí y convidó a la plana periodística mayor a un almuerzo para sanar heridas, en el Club Militar de Lo Curro, donde expuso largamente. Su autosatisfacción ya no le cabía en el asiento y, paseándose por la sala, describía las ventajas de este "nuevo Ejército" que había confesado todos sus pecados y ahora podía ir al centro de uniforme sin que los comunistas lo insultaran. La periodista Paula Escobar le lanzaba un elogioso maní tras otro y él a su turno contestaba complacido tras devolverle a su vez un dulce diciendo "¡qué buena pregunta!"

Entonces yo aproveché un breve silencio para intervenir: "General, quiero agradecer al Ejército a través de su persona por haber salvado a Chile de convertirse en un satélite soviético en 1973." Se produjo un pesado silencio de espanto y estupefacción, sólo interrumpido por un grito de horror de Blanca Arthur, periodista de nuestro lado pero no por eso menos espantada. Sin embargo Cheyre sonrió, dijo "sí, sí, sí" y "salió jugando" muy canchero y añadiendo cosas intrascendentes, para finalmente tirar la pelota al córner. 

Juan Pablo Illanes, de derecha sólida también y entonces director responsable del diario, cuando nos paramos de la mesa me dijo, sonriéndose: "Muy bueno tu agradecimiento al Ejército, Hermógenes".

He recordado todo eso hoy, cuando estoy también aparentemente aislado y, sin embargo, con el apoyo de 4 millones 200 mil sujetos que salieron de la nada el 4 de septiembre para resolver, junto a otros 3 millones 600 mil que ya había antes, imponer el art. 142 de la Carta, que dice: "Continuará vigente la actual Constitución". 

Lo cual es bastante claro y, gozando de un 62 % de apoyo mayoritario, no deja de ser, creo yo.

viernes, 25 de noviembre de 2022

No Traicionen a los Camioneros

Han traicionado a la verdad, a Pinochet, a la historia, a los militares(r), a la Constitución, a los de una sola línea, a los agricultores y habitantes del sur, a los contribuyentes y ahora ¿van a traicionar también a los camioneros?

Éstos piden sólo algo a lo cual todos los chilenos tenemos derecho: trabajar sin ser agredidos o muertos por delincuentes y terroristas. Si un gobernante no es capaz de garantizarlo, quiere decir que carece de un atributo básico, la capacidad de mantener el orden público. Debe irse o ser destituido..

En 1972 los camioneros fueron los primeros que se levantaron contra el anterior régimen marxista. El dictador Allende los persiguió en todas las formas imaginables. Los 40 mil de entonces estaban, al igual que los de hoy, desesperados. "Requisaremos los camiones. El camión que sea requisado no será devuelto", amenazó Allende, que pretendía crear una gran empresa estatal. (Nicolás Márquez, "La dictadura comunista de Salvador Allende", p.119). Los socialistas decían: "No se le puede pedir diálogo al enemigo. Se lo enfrenta y se le derrota. Se trata del preludio a una serie de enfrentamientos de clase, cada uno más fuerte que el anterior y que culminará en la batalla por el poder total". Bueno, al final la perdieron. Pues el pueblo les pidió a sus representantes en la Cámara conminar a los militares a que echaran a los marxistas del poder, por 81 votos contra 47. Menos de un mes después, los uniformados obedecieron. Casi 17 años después devolvieron el mejor país de América Latina.

Los camioneros de hoy piden orden público y menos impuestos. En ambas cosas tienen razón. Los gobernantes han multiplicado por siete el gasto estatal y se pagan a sí mismos y su burocracia un 52 % más que en el sector privado (La Tercera 20.11.21). Que se bajen sus sueldos millonarios, disminuyan el número de apitutados, sean revisados los 700 programas burocráticos y bajen los impuestos a los combustibles. Así también disminuirá la desigualdad, porque acá la provoca el Estado (Ignacio Briones, La Tercera 05.11.22).

Aunque les cueste, por una vez no traicionen, no se den vuelta la chaqueta ni le hagan el juego al comunismo. Ustedes saben a quiénes me refiero. Basta mirar sus chaquetas viradas para identificarlos.

martes, 22 de noviembre de 2022

"Mazzucato" Marcel + Justicia Roja

Nunca pensé tener que presenciar la metódica destrucción del mejor país de América Latina, el que nos legara Pinochet: 1) "Mazzucato" Marcel dispara dos torpedos bajo la línea de flotación de la economía libre: (a) la reforma previsional, que jibariza el mercado de capitales privado, pasando al Estado (donde se amamanta el Red Set) la que fuera "inyección a la vena" del crecimiento 1985-2010, los fondos previsionales; y (b) la reforma tributaria, que establece la disminución anual de los patrimonios más cuantiosos, lo cual es lo mismo que decir "su exilio a países que buscan atraerlos". ¡Adiós a los ricos! Lo malo es que ellos hacían el 80 % de la inversión. ¡Aseguremos así el último lugar de América Latina en 2023! ¡Ya antes lo logramos en 1973!

El otro disparo mortal al modelo es político y no culpa de Marcel, sino de la alianza del Partido Comunista con Chile-Vamos-Entregándonos y la mayor parte de la élite (La Tercera, El Mercurio, canales, radios, empresarios de la CNPC y la SFF, para tener ¡otra Constitución!) No la de la "democracia protegida", cuyos arts. 19 Nª15 y 60 permiten poner fuera de la ley a los que practican la violencia y establece la inhabilitación de todos sus parlamentarios. Hay que derogar eso, pues si alguien promoviera su aplicación sería la debacle de Gabriel y la izquierda violenta que nos gobierna. (Recuerden contarles a sus hijos que vieron a la élite empujando hombro-con-hombro junto al PC).

Pero siempre "todo puede ser peor" (Ley de Murphy): la dictadura judicial roja, esencial para mantener el poder, sigue operando a full. Hoy Chile Informa, diario digital básico para una opinión informada (sale ahí lo que otros silencian) revela que los carabineros Juan Muñoz Orellana y Nelson Pérez Cabezas, hoy de avanzada edad, entrarán a cumplir diez años de presidio por haber protegido a la sociedad y disparado en 1983 contra un auto robado, que cargaba ametralladoras, granadas y bombas, tripulado por agentes del FPMR comunista, matando a uno, Pedro González González.

Se completa la ecuación del título: "Mazzucato" Marcel + Justicia Roja = Chile recae en el marxismo. Íd. a 1973. 

sábado, 19 de noviembre de 2022

Escribo la Mitad

Compruebo que este blog se lee la mitad que antes. Bueno, entonces escribiré la mitad. Creo que se debe a que digo la verdad. Una vez a Séneca le sugirieron decir la verdad a Roma y contestó: "Bueno, pero a condición de que me traigan un caballo". "¿Para qué?". "Para arrancar a perderme".

El presidente más ignorante de nuestra historia, Boric (los demás, y en particular Allende, podían estar igual de equivocados, pero no eran tan ignorantes) ha dicho que va a buscar a los detenidos-desaparecidos. Eso revela lo perdido que anda. Ya no hay nadie de los supuestos DD cuyo paradero se ignore. Eso lo puedo probar fácilmente, pero el blog ya no sería de la mitad.

También leí que Chahuán explica lo inexplicable, su apoyo al máximo anhelo comunista (otra Constitución) diciendo que es porque él "tiene calle" y palpó el malestar. Totalmente equivocado, porque el malestar lo provocaron políticas socialistas e Ignacio Briones probó que la desigualdad la generó el Estado y no el modelo.

Entonces, si Chahuán entendiera algo, defendería la Constitución y predicaría más sociedad libre y no menos. No está solo en el error, por supuesto: La Tercera, El Mercurio, el Canal 13 y Chile-Vamos-Entregándonos lo acompañan.

Resumí todo esto en un tuit y tuve menos likes que nunca. Es lo que decía Séneca. Y punto, como sentencia ese sempiterno equivocado, Ricardo Lagos, a quien tanto admira (tal vez por eso) la derecha piñerista y entregada.

martes, 15 de noviembre de 2022

Tres Disparos al Corazón

Técnicamente el modelo neoliberal ya tiene año de defunción: el próximo. Una curiosa alianza del comunismo gobernante con el piñerismo entreguista procura dispararle el último de los tres impactos al corazón que lo van a matar: la reforma previsional, la tributaria y la nueva Constitución.

El envío al Congreso del proyecto de reforma previsional ha hecho subir a Boric ocho puntos en las encuestas (última Cadem, de 25 a 33%). La iniciativa vuelve a poner, como antes de 1980, los fondos previsionales bajo control estatal. Termina con las AFP, que fueron una "inyección a la vena" del mercado de capitales y pusieron a Chile, que en 1973 era el último de América Latina, en el primer lugar donde lo dejó Pinochet en 1989. Lamentablemente, en 2021 elegimos de nuevo, como en 1970, al comunismo y éste, entonces, hará lo único que sabe: nos devolverá en 2023 al último lugar. 

Por supuesto, la derecha tiene una reforma previsional mejor que la oficial y que haría subir la pensión mínima a $400 mil en lugar de $250 mil, pero fortaleciendo el modelo. Se financiaría con un impuesto de 10 % sobre los sueldos del Red Set estatal, que son 52% mayores que los privados (La Tercera, Pulso, 20.11.21). Eso salvaría a las AFP y nos reinstalaría a la cabeza de América Latina. Pero tiene un perfume insoportable al régimen de Pinochet. Autora de la idea, Bettina Horst, de Libertad y Desarrollo.

Como de lo que se trata es de matar al modelo, la dupla Boric-Marcel le ha disparado un segundo tiro al corazón: la reforma tributaria. Ya está en el Congreso. Economistas de prestigio internacional, como Klaus Schmidt-Hebbel y José Luis Daza han opinado que esa reforma basta para devolver al país al retroceso del cual lo estaba sacando el modelo de Pinochet y la Junta y sólo cuya pintura rayó el socialismo durante 30 años, sin suprimirlo. Como escribió en La Tercera del 16.10.22 Francisco Pérez Mackenna, gerente del holding de Andrónico Luksic: la reforma tributaria "lleva a que la mejor decisión sea reducir el stock de capital, expatriándolo y retirando utilidades retenidas". Es lo que van a hacer los sabedores de las ventajas que les ofrecen domicilios tributarios más benignos que Chile, como Delaware, Panamá, Islas Vírgenes, Islas Cayman, Portugal, Uruguay, Paraguay, Irlanda, Jersey, Guernsey, Luxemburgo, Corea del Sur e Indonesia.

Es que Boric odia la riqueza de los demás. Desde su primer día de mandato ofreció redistribuirla. La de su propia familia le disgusta menos y por eso llevó a la activista comunista Doris González, que venía de abrazarse con Maduro, a Magallanes a agitar a los "sin casa" para obligar al Minvu a comprar en más de mil millones un terreno de Boric papá y de un ex alcalde, que estaba tasado en sólo cinco millones. "Yo no lo habría hecho", confesó después, atrincado por Tomás Mosciatti. Pero ayudó al papá a hacerlo.

El tercer tiro al corazón del modelo es una nueva Constitución que asegure a los comunistas algo que siempre han anhelado: suprimir los límites de la actual al crecimiento del Estado. En éste las pegas son 52 % más generosas que en el sector privado. Incluso con esta Constitución, el socialismo ha aumentado el número de pegas estatales en 51 % en los últimos ocho años, llegando a 450 mil (Larraín y Weber, El Mercurio, 26.10.22). Ahora, con el concurso del piñerismo entreguista UDI-RN-Evópoli, se redactará la nueva Constitución pro-Estado para que el Red Set pueda controlar, en lo posible, todo.

Es evidente que el modelo neoliberal morirá con estos tres impactos. Sólo un milagro puede salvarlo. En mi blog del 7 de noviembre di las razones paranormales, en las cuales creo y por las cuales Chile se puede salvar. Pero la mayoría no cree lo mismo y está feliz de matar al modelo. Por eso sube Boric en las encuestas. 

Entonces sólo nos queda seguir el consejo de los árabes y sentarnos a la puerta de nuestra tienda a esperar ver cuál cadáver es el que va a pasar. 

sábado, 12 de noviembre de 2022

La Desigualdad se Debe al Gasto Estatal

El grueso de la gente todavía no lo asimila bien, pero la verdad revelada por el exministro Ignacio Briones en La Tercera del sábado 5 de noviembre es devastadora para el slogan fundamental del gobierno. La gente votó por Boric porque prometió terminar con la desigualdad, supuestamente generada por el "modelo neoliberal". Dijo que Chile sería "la tumba del neoliberalismo". La supuesta desigualdad fue la razón central de su votación. Y el pecado más imperdonable del modelo. Hasta hubo empresarios(as) que pidieron perdón por eso. En su discurso inaugural en la Plaza de la Constitución, la mayor ovación la consiguió cuando dijo que iba a redistribuir los ingresos de los chilenos más igualitariamente. 

Pues bien, las cifras de la OECD, en que se basa Briones, revelan que, entre catorce países, el "modelo neoliberal" sitúa a Chile como el quinto con mayor igualdad de ingresos antes de impuestos, de acuerdo al índice Gini, superando en igualdad a otros como Finlandia, Francia, España y los EE. UU. En cambio, después de impuestos, cae al 14o. lugar como el de mayor desigualdad, es decir, queda como el de Gini más alto (este índice disminuye cuando hay más igualdad).

¡Entonces es la manera en que se emplea el gasto estatal lo que genera desigualdad! La plata que el fisco recauda a título de "gasto social"  no va como transferencia a los más pobres, sino a pagar funcionarios comparativamente más ricos. Por eso, tras considerar el gasto estatal, Chile termina como el más desigual. 

Eso coincide con la conclusión de Rolf Lüders en su muy citado artículo del 01.11.19, donde sostenía que si el gasto social del Estado le llegara al 20 % más pobre, cada familia tendría un ingreso de $2.500.000 mensuales y no sería pobre. Con sólo transferencias o vouchers se reducirían la pobreza y la desigualdad.

¿Dónde se queda enredado entonces el grueso de la plata del gasto social? En una burocracia sobrepagada. Lo cual resulta confirmado por el estudio de La Tercera del 20.11.21, donde se concluye que el sueldo promedio del sector público ($964.453) es 52 % mayor que en el privado ($635.164). 

El Red Set se queda con "la parte del león". Es el beneficiario de la mayor desigualdad generada por el gasto estatal. Pero la izquierda culpa de ella al mercado y al "modelo neoliberal". Peor todavía, como remedio de ese inexistente mal, el gobierno quiere subir más los impuestos y así beneficiar adicionalmente a la burocracia. Pero, a mayor gasto público en Chile, mayor es la desigualdad. En los famosos "30 años" de gobiernos de centroizquierda (incluidos los de Piñera, que también fueron de políticas de centroizquierda) la burocracia aumentó entre seis y doce veces, dependiendo del estudio que se consulte. Y quieren una nueva Constitución porque la actual pone límites a la expansión estatal, pese a que ésta acentúa la desigualdad.

jueves, 10 de noviembre de 2022

"¡Houston, Tenemos Dos Problemas!"

--¡Houston, aquí la centroderecha piñerista, El Mercurio, La Tercera, Canal 13, CNN, RN, UDI, Evópoli, von Apen y Sutil, todos como tabla entregados al proceso constituyente de Boric y todo lo demás. Ya tenemos a Cumsille renunciado a Conapyme, nunca más se le faltará el respeto a Boric. El Mercurio dijo que lo de Cumsille había sido "repudiable" y Bernardo Larraín, un originario del Apruebo, en Tolerancia Cero dijo que había sido una falta de respeto al presidente. Nos estamos pasando al bando de Boric en masa, pensando en Piñera III y por ahora en el proceso constituyente para una "nueva y buena Constitución". Todos decimos siempre "la dictadura", andamos sin corbata, en fin, totalmente entregados. Hasta ahí todo bien, Houston, pero ¡tenemos dos problemas!

--Aquí, Houston, también todos estamos sin corbata. Diga el primer problema, repito, diga el primero, cambio.

--Roger, roger: nuestro columnista, Sergio Muñoz Riveros, cumple todos los requisitos, es ex comunista, del "no" a Pinochet, ex exiliado, dice "dictadura" ¡pero a veces usa corbata y se ha puesto partidario de que siga la Constitución del '80! Lo ha escrito varias veces.

--Aquí Houston, sí es grave, grave. Repito, grave. Hay que intentar rescatarlo. Mándele a Guillermo Ramírez y Diego Schalper, que apenas se acabe de abrazar con Teillier apañen y traigan de vuelta al entreguismo a Muñoz Riveros. ¡Mala noticia! ¿Y la otra, es mejor?

--No, Houston, ésa era la buena. La otra es peor: Ignacio Briones, exministro de Piñera, del "no" a Pinochet, que siempre dice "dictadura", en fin, Evópoli sin corbata y entreguista en toda la línea, ahora ha salido con un "domingo 7" en La Tercera del sábado 5 y por suerte no ha salido en ningún otro medio. Lo peor es que ha argumentado con números.

--Roger, roger, recibido... ¿y qué ha dicho?

--Que el modelo neoliberal de la Constitución del 80, antes de impuestos, es ¡más igualitario! que el de Dinamarca, Finlandia, Irlanda y Francia; que es casi igual de igualitario que el de Alemania y, lo peor de todo, que lo que ha hecho desigual a Chile ha sido ¡el Estado! Lo prueba con datos de la OECD: los impuestos y el socialismo han provocado toda la desigualdad. Porque los compañeros se han quedado con la plata que era para los pobres. ¡Implica que el mercado es más igualitario que el Estado! ¡Atroz!

--Roger, roger... atroz, atroz. Es la misma tesis del artículo de Rolf Lüders en La Tercera del 01.11.19, en pleno estallido, cuando ¡probó que si el gasto social hubiera ido directo a los pobres no habría habido pobres ni se justificaría un estallido ni nada! ¡Desastroso!

--Exacto, exacto. Tremendo. ¡Mire que probar que el malestar fue culpa del socialismo! ¡Houston, consiga que ni El Mercurio ni LUN ni La Segunda vayan a publicar semejante artículo! ¡Se nos viene abajo el proceso constituyente! Peor que la caída del Muro. Que rodeen a Briones, que no vaya a la TV y, si va, que lo echen igual que a usted sabe quién y Andrónico de nuevo pida perdón a la audiencia. 

--¡Aquí Houston! Comprendido. Primera medida, rescatar a Muñoz Riveros. Segunda, silenciar a Briones. Denlo por hecho. ¡Cambio, cambio, cambio y fuera!

lunes, 7 de noviembre de 2022

¡Es la Vacuna!

Como no estoy vacunado, soy de un grupo de riesgo y temo a las encerronas, no salgo a casi ninguna parte y mis contactos son sólo telemáticos, No he podido juntarme con mis amigos más politizados para que me expliquen por qué El Mercurio, La Tercera, la UDI y los grandes empresarios de la plaza están por el disparate máximo, es decir, por "una buena y nueva Constitución", cuando ya la tenemos. Mis contactos telemáticos no me sirven, porque están de acuerdo conmigo, por unanimidad, en que es una gran tontería y tampoco la entienden. 

Antes, cuando yo estaba en El Mercurio y había diferencias entre los redactores, nos íbamos al Carrousel y las zanjábamos. Pero ya no se puede, no sólo debido al peligro de contagio, sino porque me fui de El Mercurio y ni siquiera existe el Carrousel, una de las pérdidas más sentidas e irreparables de mi círculo dentro de la sociedad.

Conversando con mi mujer, que es categórica, ella sostiene que lo que les pasa es efecto de la vacuna. Está segura de que, sin ésta, hoy se habría reeditado el sólido frente que impidió la otra vez, en 1973, que el comunismo se impusiera en Chile. No sólo El Mercurio, La Tercera, el Canal 13, los grandes, medianos y pequeños empresarios, el Partido Nacional, sino los colegios profesionales, en particular los de abogados y médicos y la Corte Suprema por unanimidad, estaban contra el comunismo. Ahora no, la justicia antigua y nueva están en manos de los rojos, eso es evidente; los diarios "le avivan la cueca" al "proceso constituyente" que jurídicamente se terminó y ya no existe, por supuesto, aunque El Mercurio y el rector Peña, todos con la quinta dosis, supongo, aseguran que sí. 

Todo esto me debería llevar al más hondo pesimismo y a la certeza de que Chile, ahora sí, cayó y va a seguir bajo el comunismo, pues los comunistas quieren otra Constitución por una razón clarísima: que la actual le veda al Estado --es decir, a ellos-- apoderarse de todo y tener nuevas empresas con enormes pérdidas, como en 1973, que es precisamente lo que ellos buscan, Pues es bien sabido que los comunistas no producen nada útil para la gente, que es lo que se transa en el mercado, y necesitan del Estado para ganar grandes sueldos y por eso requieren de otra Constitución que les dé suficientes cargos públicos para todos ellos.

Cuando leí en el primer editorial de El Mercurio del 5 de septiembre el titular que llamaba a "Completar el Proceso Constituyente", justamente al día siguiente de haberse completado éste, no lo podía creer. El 62 % de los votantes lo había dictaminado y el diario donde escribí más de cuarenta años y donde mi bisabuelo de mi mismo nombre también desenvainaba la espada para "defender que el pasto es verde", como decía Chesterton, en el siglo antepasado, ahora salía con ese dislate.

Bueno, tranquilos, esto va a pasar. ¿Por qué lo digo? Sólo por una razón: porque una adivina muy prestigiada y muy señora, que vivía en un departamento de la calle Elisa Cole de la "zona cero", me lo predijo a cambio de un billete colorado de cien pesos, a mediados de 1953 y con estas palabras, que yo anoté: "cuando usted ya sea muy mayor habrá un gran trastorno". "¿Voy a quebrar?" le pregunté yo, que tengo un antepasado que quebró estruendosamente alrededor de 1820 en Truro. "No", me replicó, "a usted nunca le va a faltar la plata, pero va a haber un gran trastorno general, después del cual usted va a ser muy feliz el resto de su vida."

Ella me había dicho antes que me veía, a la edad de cincuenta años, corriendo por las calles, lo que me hizo pensar en 1953 que, a los cincuenta, yo iba a estar loco. Pero en la práctica sucedió como ella dijo: corrí por las calles de Santiago, Nueva York, Londres y París en las respectivas maratones, en los 90, estando relativamente cuerdo.

Bueno, como decía un colega de pluma mío hace más de 500 años, "All's Well That Ends Well", "Todo Está Bien Si Termina Bien". En eso confío y no me altero cuando veo a Macaya, Chahuán, Schalper, Ramírez, El Mercurio, La Tercera, la CMPC y la SFF haciendo lo que quieren los comunistas y adhiriendo al soberano disparate de la "buena y nueva Constitución". Sé que se les va a pasar. La elegante señora de la calle Elisa Cole me lo aseguró en 1953. Y como todo lo demás que me predijo se cumplió, estoy seguro de que el desastre actual en definitiva también terminará bien y "los comunistas no pasarán"

jueves, 3 de noviembre de 2022

"Chile, Paraíso de los Pobres"

El egipcio Karin Abdel Motaal, PHD en Economía de Harvard, maneja un fondo de inversión de US$ 5 mil millones, del cual entre US$200 y US$250 millones están invertidos en Chile. Asistió a la conferencia de Mario Marcel en Nueva York. Dijo a Pulso de La Tercera del 02.11.22 verdades que casi nadie ha dicho. La sustancia:

1) "Chile no era un paraíso para los inversionistas, era el mayor paraíso para las personas pobres... quiero que vuelva a ser la estrella de América Latina y del mundo... el Chile de hoy es muy preocupante..."

2) De la conferencia de Marcel "no salí con una respuesta o explicación satisfactoria y no me fui sintiéndome seguro o cómodo para invertir en Chile".

3) "El Chile que conocimos, con el que crecimos y en el cual invertimos durante los últimos 25 años no necesitaba ninguna reforma... Era lo que Turquía, Brasil y la India necesitaban hacer".

4) "Están sucediendo muchas cosas locas en el gobierno". 

5) Sobre la prometida reforma laboral: "Un pequeño grupo de trabajadores puede tomarse a una empresa como rehén, sin que las administración pueda despedirlos o sancionarlos de ninguna manera". 

6) "En lugar de Chile, voy a invertir en Corea del Sur o Malasia".

7) "La reforma de pensiones también es catastrófica. Chile tenía lo que se conoce como un sistema de pensiones totalmente financiado".

8) Sector minero: "Chile solía estar entre los cinco o diez principales países. Hoy ha bajado en relación a ellos. Y esto se debe a que el gobierno está enviando todas las señales de que si uno va a invertir en el sector minero, quiere quitarte las ganancias, quiere dificultarte la contratación y el despido de trabajadores, quiere competir contigo, haciendo que las empresas del sector público ingresen a la industria".

9) "El Estado emprendedor es una estupidez total. Funciona muy, muy mal".

10) TPP11: "Es como firmar el tratado con una mano y luego desfirmarlo con la otra".

11) "Leí en los periódicos de Chile comentarios como 'Chile espera integrarse con países de la región como Bolivia y Argentina'. De nuevo, para mí es impactante ("shocking"). Quiero decir, Chile era Corea del Sur, Hong Kong, Singapur. Y Bolivia y Argentina son los peores socios de integración o ejemplos posibles para el país. Chile podría enseñar una lección a estos países, pero ahora parece que quiere aprender de ellos todas las cosas malas".

12) "Lo que se ha presentado al público sobre el sistema de pensiones, durante los últimos dos o tres años, es una tergiversación del sistema de pensiones".

13) "Durante toda mi vida adulta Chile fue la excepción en América Latina, el país donde la pobreza cayó, el país donde impera la ley, el país donde se hacen valer los derechos de propiedad".

14) "Lo único positivo que se puede decir es la combinación del fracaso constitucional con la presencia de Mario Marcel en el ministerio de Hacienda, en lugar de algún loco. Esto es positivo. Pero positivo en el sentido de limitar la negatividad. No quita la amplia negatividad".

15) "Nos asusta la velocidad. Chile tardó 40 0 50 años en construir las instituciones que lo convirtieron en una excepción en América Latina y sólo le tomó un par de años volver a ser como Argentina. Es aterrador ... El gran tema es la velocidad en el desmantelamiento de las instituciones que son tan preciosas y valiosas y que se construyeron durante 40 años".

16) "Chile es como el mejor estudiante de la clase, te guste o lo odies. Todos lo siguen pese a estar celosos. No niego que estén ahí esas desigualdades sociales. Sin embargo, Chile no era sólo un paraíso para los inversionistas, Chile era el mayor paraíso para las personas pobres. Mira sus indicadores de pobreza entre 1985 y 2015 y compáralos con los de Argentina, Brasil, Colombia, Perú, Venezuela, Rusia, Turquía e India. El Banco Mundial dice que en ese período Chile fue el número uno del mundo en reducción de la pobreza entre 150 países. Chile es una superestrella para las personas pobres, no sólo para los inversionistas.

17) "Como casi todos los inversionistas, extranjeros y chilenos, en este momento todos estamos observando y sin hacer nada."

18) "Que se consagren en la propia Constitución las malas políticas, eso nos preocuparía y tenemos que estar atentos. Si las cosas siguen así, nos desprenderemos de Chile. Ahora mismo, todavía tenemos esperanza."

martes, 1 de noviembre de 2022

Lo Que Nadie Vio Venir

Los países no mueren, pero sí se van al diablo. Algunos, los menos avisados, son capaces de irse dos veces en 50 años, como Chile. Si las mayorías hacen las mismas cosas, obtienen los mismos resultados. Un ejemplo: un ciudadano me cuenta que un "primera-línea-cabeza-rapada" lo increpó en el supermercado porque no se apuraba en sacar la mercadería después de pagar. Luego lo siguió al estacionamiento y le fotografió el auto. Él entonces fotografió el del tipo. Así están las cosas. Yo le recordé que antes los supermercados dejaban que niños pobres llenaran los carros de los clientes a cambio de una propina y todos felices: las familias de los niños eran menos pobres, eso las hacía menos desiguales y les permitía tener una vida mejor. Pero funcionarios socialistas dijeron que los supermercados debían hacerles contrato a los niños, con imposiciones, vacaciones y garantías laborales. Los supermercados replicaron que su responsabilidad terminaba cuando el cliente recibía sus cosas después de pagar y no se extendía al acuerdo entre niños y clientes. Pero los funcionarios les exigieron prohibir a los niños echar los paquetes a los carros. Y así se cumplió la aspiración marxista de dejar a todos peor, el win-win estilo Jackson. Los clientes ahora sacan sus cosas y se ahorran las propinas. Los ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres. Todos vuelven a ser más desiguales. Pero los marxistas, los verdaderos culpables, culpan al modelo neoliberal y hacen una revolución. 

Es lo que ha sucedido en Chile, primero de a poco y después de sopetón, y que ha llevado a que desde 2013 haya disminuido el PIB por persona de US$ 15.743 a US$ 15.603 en 2017 y hoy estemos en caída libre. El intervencionismo. Que además creó en la Araucanía un problema que no existía. Más Estado, más impuestos, mayor burocracia y restricciones laborales disminuyeron el crecimiento de 6,32 % entre 1985-91 a 2,7% entre 2012-2017 ("Economía y Sociedad" 15.03.19). Y a 2 % este año y -1 % o peor en 2023. Lo vemos venir.

La inmigración desenfrenada de Bachelet II disminuyó más los salarios de los pobres y empeoró la educación y la salud estatales por recargo de los establecimientos. La reforma tributaria de Bachelet II empeoró la situación fiscal y aumentó el endeudamiento público. Retiros inconstitucionales de fondos de las AFP hicieron caer la inversión y los bonos a la población aumentaron el déficit del presupuesto. La deuda chilena perdió grado en agencias internacionales, encareciendo los intereses que debe pagar el país. Acusaciones marxistas de violación de DD. HH. aterrorizaron a Piñera, anularon a la fuerza pública y dieron garantías a los sediciosos. El que no veía venir la insurrección marxista estaba ciego. A raíz de la violencia cerraron miles de negocios y se deterioraron ciudades enteras. Pero las culpas se las echó la izquierda al "modelo neoliberal". ¡La centroderecha y los empresarios las aceptaron! y pidieron perdón.

Los comunistas quieren todo dentro del Estado, porque, obvio, lo manejan ellos. ¿Cuál es su mayor obstáculo? La Constitución y su Estado subsidiario. Necesitan otro proceso constituyente y una nueva en que el Estado (ellos) domine. La izquierda y los kerenskys hicieron causa común. No fue sorpresa. Pero sí lo fue que recibieran el apoyo de UDI, RN y (menos sorpresa) Evópoli. Sí lo fue también y mayúscula cuando los apoyaron los diarios de derecha y ¡los grandes empresarios! Porque los medianos y pequeños tienen las cosas claras y le dijeron en su cara a Boric que prefieren el orden a la nueva Constitución. Y de paso le cantaron "Orden y Patria" en reconocimiento a Carabineros. "Repudiable" dijo un diario ¿opositor?

Lo que nadie vio venir fue el 62 % por mantener la actual Carta. De ese oxígeno sobrevivimos hoy. La mayoría silenciosa que pidió sacar a Allende nos quiere de nuevo salvar hoy de tropezar dos veces con la misma piedra, aunque la "élite habladora" (Paul Johnson) siga comulgando con ruedas de carreta.

sábado, 29 de octubre de 2022

Justicia con Fines de Lucro

Yo iba a escribir un blog lapidario, "Cruces Reiterados de la Línea Roja", y ya tenía un borrador, cuando leí en El Mercurio la condena del ex comandante en jefe Juan Emilio Cheyre y otros en el "Caso Caravana", episodio La Serena, recién dictada por la Corte de Apelaciones de Santiago. Ese fallo es constitutivo de delito y tan ridículo, ilegal y vergonzoso que se justifica postergar mi otro blog. 

La judicatura chilena figura en estadísticas internacionales como la peor del mundo y se lo tiene merecido. Este caso, que conozco bien, explica por qué. Lo traté en mi libro, nunca desmentido y best-seller en su tiempo (2000), "La Verdad del Juicio a Pinochet". Lo de La Serena fue el comienzo de lo peor que le aconteció al gobierno militar y culpa del comandante Sergio Arredondo, hoy fallecido.

El 16 de octubre de 1973, temprano, salió de Santiago la comitiva de Arellano, encargada de acelerar consejos de guerra, porque los regimientos mantenían numerosos presos cuyos familiares los rodeaban y reclamaban a voz en cuello. Al partir a La Serena, por primera vez se incorporó a la comitiva, que venía del sur, donde no había tenido contratiempos, el comandante Arredondo. Llegados a destino, mientras Arellano trabajaba con el comandante del regimiento local, coronel Ariosto Lapostol, el comandante Arredondo sacó a 15 presos de su lugar de detención, acompañado de su amigo, un oficial local recién reincorporado, Tomás Harris. Los llevaron a un galpón, a cuadras de distancia de donde se hallaban Arellano y Lapostol, según me confirmó personalmente el general Cheyre hace unos veinte años, en un almuerzo en el fundo del almirante Poisson.  

Arredondo, por sí y ante sí, hizo fusilar a los 15, participando él directamente. Eso fue sucintamente lo que ocurrió y quedó reiteradamente aclarado en el juicio ante Juan Guzmán y en un "consejo de honor" convocado en el año 2000 por el general (r) Jorge Court, amigo tanto de Lapostol como de Arellano. Ambos estuvieron de acuerdo en que ninguno tuvo nada que ver en las 15 muertes ni las ordenó. Por supuesto, menos tuvieron que ver los ayudantes de ambos, los entonces jóvenes tenientes Juan Emilio Cheyre, de Lapostol, y Viterbo Cheminelli, de Arellano; ni tampoco el piloto del helicóptero, Emilio Robert de la Mahotiére. Pero la Corte ahora condena a 10 años y un día a Cheminelli como coautor, a 5 años y un día al piloto como cómplice y a 3 años y un día a Cheyre como encubridor, amén de imponer 5 años y un día a otros dos jóvenes oficiales locales que tuvieron la mala suerte de estar cerca del galpón. Todo lo cual es disparatado, pero se explica porque el verdadero y único responsable falleció y el propósito del juicio es el lucro: para cobrar es preciso cargar el delito a alguien vivo, por inocente que sea.

Como Cheyre ha prestado invaluables servicios a la izquierda, entre ellos declarar en 2004 que el Ejército reconocía su responsabilidad "en TODOS los hechos punibles y moralmente reprochables del pasado" que eran culpa de la izquierda, la Corte, agradecida, le remitió la pena, es decir, la cumplirá en libertad. Yo he situado a Cheyre, en otro libro mío, "Miserias Morales de la Chilenidad Actual", entre los tres mejores colaboradores del comunismo en su tarea de vengarse de los uniformados. Los otros dos: Patricio Aylwin y Sebastián Piñera.

La Corte de Santiago ha violado en este caso la ley de amnistía, la presunción de inocencia, la prescripción, la cosa juzgada, las leyes reguladoras de la prueba y las que obligan a buscar la verdad de los hechos y a considerar tanto las circunstancias que acreditan culpabilidad como las que eximen de ella, todo con tal de sustraer al fisco centenares de millones de pesos. Su ostensible prevaricación debería algún día llevar a los firmantes del fallo a cumplir una pena privativa de libertad de hasta tres años, de acuerdo con el art. 224 del Código Penal.

Espero me quede suficiente vida para ver que se haga justicia. 

lunes, 24 de octubre de 2022

La Constitución Nos Llama

En lo económico-social ni la Concertación ni Aylwin se perdieron. Por eso respetaron el modelo. Sólo "le rayaron la pintura" subiendo impuestos y deteriorando el mercado laboral. Eso tuvo un costo: mientras el impuesto a las empresas fue 10 % (1985 -1991), el país creció 6,32 % anual; Aylwin lo subió a 15 % (1992-2002) y el país creció menos, 5,6 %; cuando Frei R-T lo subió a 17 % (2003-2011) el país creció todavía menos, 4,7 % anual; Piñera y Bachelet II lo volvieron a aumentar a 27 % (2012-2017) y el crecimiento del PIB bajó a 2,7 % anual. En esos años Donald Trump bajó el mismo impuesto en EE. UU. de 35 % a 21 % y hubo un aumento del crecimiento allá (Camilo Cammas, Economía y Sociedad 13.03.19). El izquierdismo achicó la torta y generó malestar social.

Pero Bachelet II y el comunismo, llegados al gobierno en 2014, necesitaban más "pegas" y propusieron cambiar la Constitución, cosa que no le interesaba a la gente. La izquierda no produce nada útil y, entonces, necesita más puestos en el Estado, para vivir mejor y repartir "pegas". Como la Constitución limita a éste a un papel subsidiario y no le permite crecer, la "izquierda con fines de lucro" necesita derogarla para que haya más Estado y así poder dar más "pitutos" a su clientela. Incluso con la actual Carta, desde 1990 y hasta la fecha se arreglaron para que los burócratas tuvieran sueldos 50 % mayores que en el sector privado ("La Tercera" 20.11.21). Ése es todo el tema. Si no derogan la Constitución no pueden crear más pegas ni ganar más plata a costa de "we the people".

Las políticas de izquierda provocaron malestar social, porque "la torta" --vimos-- creció menos. Además Lagos hizo el plan socialista Transantiago, que aumentó el malestar porque quitó horas de hogar a los trabajadores y ocasionó enormes pérdidas fiscales (700 millones de dólares anuales; mientras el sistema libre de las micros amarillas dejaba ganancias). Más encima, Bachelet II discurrió otro negocio socialista, el de la inmigración descontrolada, que perjudicó a los pobres, porque llegaron haitianos que pagaron caro el pasaje para venir a hacer acá trabajos por menos plata que la que ganaban los chilenos. Menos crecimiento, menos trabajo, menos tiempo en la casa, peor locomoción hicieron que se acumularan las deudas y el malestar popular: El descontento, pues, fue de origen exclusivamente socialista. Y Lagos con su reforma constitucional de 2005 deterioró el sistema electoral y transformó al Congreso en un circo que irritó adicionalmente al ciudadano común. 

Entonces los marxistas, causantes del malestar social, hicieron una maniobra propagandística maestra, la "Gran Willy" o "Gran Cambiaso": desataron las violencia callejera culpando al modelo neoliberal y a la Constitución. La ocasión la dieron las tarifas de la locomoción que tuvieron que subir, en parte por cambiar al Metro su fuente de electricidad a las energías verdes, que son más caras. Piñera se rindió, en lugar de declarar la inconstitucionalidad de los 14 partidos sediciosos, inhabilitar a sus parlamentarios comprometidos con la violencia, de acuerdo a los artículos 19 número 5 y 60 de la Constitución y meter presos a discreción a los violadores de la Ley de Seguridad, la Antiterrorista y el Código Penal. Siempre lo habían hecho así Presidentes con pantalones ante las insurrecciones de 1934, 1949, 1957 y 1964, y Pinochet en los 17 estallidos insurreccionales de los 80. 

Tras la rendición de Piñera era inminente la Tercera República Socialista, después de las de 1932 y 1973, cuando a alguien se le ocurrió hacer obligatorio el voto, para asegurar el triunfo del Apruebo. Y ahí vino la gran sorpresa: ganó la derecha. Kast había sacado 3 millones 649 mil votos en 2021 y el Rechazo sacó 7 millones 882 mil votos el 4 de septiembre de 2022. La Constitución recibió un respaldo adicional de 4 millones 200 mil votos. Boric había sacado 4 millones 620 mil votos y el Apruebo subió apenas a 4 millones 860 mil votos. Conclusión: el que antes no votaba era mayoritariamente ¡de derecha! Una marea silenciosa de 4 millones 200 mil votos no quería otra Constitución y respaldó la actual. Los estudios comprobaron que entre los más pobres el Rechazo ganó 70% vs. 30 %, mientras entre los más ricos ganó sólo 60 % vs. 40 %. También que entre los que tenían sólo enseñanza media el Rechazo ganaba por más que entre los que tenían educación universitaria. Los más pobres son más derechistas, pero no votan si no están obligados y no hablan ni saben de política. Sólo tienen sentido común, el cual, como sabemos, se hace fuego con el socialismo. Y liquidaron a éste el 04.09.22. 

En la comuna más pobre de la RM, La Pintana, ganó el Rechazo; la elegante Ñuñork fue una de las 8 del país donde ganó el Apruebo. ¿Cómo se entiende eso? Mera imbecilidad, dicho "con respeto". Igual que la del niñito bien que destruyó un grifo y era partidario del Apruebo. O que los grandes empresarios apoyando lo mismo que los comunistas. En la Araucanía, donde están radicados la revolución armada comunista y el separatismo, el Rechazo ganó con el 80 % de los votos. En una comuna del norte, ciento por ciento indígena aymara, Colchane, el Rechazo ganó con el 95 % de los votos. Es la más derechista y la que más sufre con el negocio izquierdista de la inmigración ilegal. El sentido común es antisocialista y no está correlacionado con la educación superior ni con la riqueza. 

Restablecida la verdad política por el voto no-voluntario de la gente con sentido común, se confirmó la Constitución de 1980, como lo dice expresamente su artículo 142. Y, por ahora, se salvó Chile del comunismo por segunda vez desde 1973. Entretanto, el principal adalid de la nueva Constitución, Gabriel Boric, obtiene dos tercios de rechazo, 66 % (Cadem).

Pero ¡oh sorpresa! ¡Boric recibe apoyo del "vientre blando" de la centroderecha! A la izquierda le presta ropa el primer editorial de El Mercurio del 05.09.22, según el cual ¡el proceso constituyente sigue! Francisco Chahuán y Javier Macaya, presidentes de RN y UDI, respectivamente, corrieron el 5 a La Moneda a apoyar a Boric y decirle que están con él en su deseo de cambiar la Constitución. Boric mismo repite: "el proceso no ha terminado." Sólo falta que aparezca de nuevo Macaya con la camiseta con Jaime Guzmán baleado y que vaya a reconfortar en París a su asesino Palma Salamanca, al igual que Boric. Los grandes empresarios ¡también quieren darles a los comunistas su nueva Constitución! Por suerte los más chicos, los de Cumsille, son muchos más y anhelan orden público antes que nueva Constitución, entonando el himno de Carabineros.

La derecha ganó con el 62 %, pero su "vientre blando" entreguista no halla cómo arreglarse para perder. Hasta excomunistas, como Sergio Muñoz Riveros o Max Colodro, ya han visto la luz y se preguntan hasta cuándo el piñerismo insistirá en entregarse. Éste responde, como el escorpión picando a la rana, "es que está en mi naturaleza, no sé hacer otra cosa". Pero los votantes obligados de la mayoría silenciosa recitan: "Que no ataje nuestro paso mina, foso ni trinchera/ cuando oigamos que nos gritan la Constitución y la bandera: "¡Hijos míos, defendednos, estamos aquí!".