Del aumento del 6 % de la cotización que contemplaba el proyecto de reforma previsional original del gobierno, y que iba a ir todo a un sistema de reparto en manos del Estado, que era lo que había prometido Boric, el oficialismo ha ido cediendo hasta que ahora 4,5 %, o sea las tres cuartas partes, irá a las AFP, lo que las fortalecerá, en lugar de hacerlas desaparecer o debilitarlas Y eso es bueno.
Pero el proyecto sigue siendo malo, si bien es mejor que el original y no peor, pues: (1) aumenta el tamaño del Estado, (2) no soluciona el principal problema del régimen actual, los 60 años de edad de jubilación para las mujeres y 65 para los hombres, aún más insostenible en circunstancias en que se acaba de anunciar que los chilenos hemos llegado a un promedio de vida de 81,8 años, uno de los más altos del mundo.
(3) El proyecto también es malo porque siembra la semilla del sistema de reparto y deja entrar al Estado, le permite "meter un pie en la puerta" por diferentes vías. Seguirán intentando destruir la previsión privada, aunque les queda poco tiempo.
Por supuesto, había una solución objetivamente mejor para todos, como la que propuso el economista Eric Haindl: jubilar con 40 años de cotizaciones, y punto. No importando la edad. Pero como es la mejor solución, los políticos ni siquiera la van a analizar.
Y (4) el proyecto es también malo porque da un bono extra a las mujeres, que ya son privilegiadas y las más favorecidas por el sistema actual, porque jubilan cinco años antes que los hombres y viven varios años más. En justicia los que deberían ser compensados serían los hombres, que jubilan con más edad y viven menos años.
El proyecto extiende al 90 % de la población la Pensión Garantizada Universal de $250.000 mensuales. Y eso está bien.
Pero Klaus Schmidt-Hebel, en El Mercurio del 21.01.25 calcula que se contratará a 405 nuevos funcionarios a un costo de $30 mil millones anuales. El Estado crecerá todavía más. Nos acercamos a un millón de funcionarios estatales, cifra que estamos alcanzando junto con la del "dólar a luca", ya cumplido, aunque ayer bajó transitoriamente de mil pesos.
¿Por qué la derecha continuadora de Sebastián Piñera apoya el proyecto, si es malo? Porque, primero, ha conseguido algo: el 4,5 % para las isapres y, segundo, no sabe hacer otra cosa. Es por esencia entreguista y contemporizadora con la izquierda. Como le dijo el alacrán que picó a la rana que lo llevaba sobre sí para atravesar la corriente: "es que está en mi naturaleza, no sé hacer otra cosa".
No es "el Chile que queremos". Es "el que tenemos". Y así nos vamos hundiendo y olvidando del que legó Pinochet, quien habría aplicado la solución mejor de Heindl, el Pinochet de "los mejores treinta años: 1985-2015".
Lástima que por ahora todavía no hay otro Pinochet.
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ResponderEliminarHabría que ser un auténtico “soquete” (como diría el bruto de Cenutrio), para no entender que, detalles menos y detalles más, la reforma previsional impulsada por el gobierno es el camino adecuado para resolver el tremendo fracaso que ha significado para la inmensa mayoría el destartalado “Mercedes” del fantoche José Piñera.
EliminarY es que no es necesario reinventar el hilo negro ni el agua tibia para saber que los sistemas mixtos, existentes en prácticamente tode el mundo civilizado, son la mejor y mas equitativa avenida para garantizar la jubilación digna y sobre todo, sostenible.
Y por más que las desoladas viudas y huerfanitos de Pinochet lo nieguen, venga el gobierno que venga…esa es la única salida.
Viene Kaiser.
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ResponderEliminarEstúpido tipo y más todavía pedazo de SOQUETE.
Eliminarm. Arg., Bol., Chile, Par. y Ur. Calcetín corto que cubre el pie hasta el tobillo.
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EliminarY Cenutrio le hace honor a su nombre: es torpe, desmañado, completamente estúpido y lento de entendederas, un lerdo y un zoquete integral…..!Que se “valla” por “sínico”!!!
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ResponderEliminar¡Que traigan a Crispín Muñoz!!!...que la recua de burros pinocheteros presentes me aburren….!Que se “vallan” (como diría el zoquete de Cenutrio)
ResponderEliminarDundo de "Rebuznaros" dando desesperados "Rebuznidos" para mitigar a los "éticamente perfectos" de Democracia Viva. Eso se llama ser cínico.
EliminarEl tema con ser reaccionario es que dejan a sus adversarios llevar la batuta de cada tema, y no me refiero a este, si no que CADA tema contingente (divorcio, legislaciones laborales, los llamados derechos reproductivos y podríamos continuar, cada iniciativa partió en la esquina izquierda).
ResponderEliminarEl problema de quien no parte (sobre todo con problemas reales y sabidos, como las pensiones), es que las ideas no se les creen, y ahora no tienen más que ceder o negociar.
Eso respondiendo a la pregunta "¿Por qué la derecha continuadora de Sebastián Piñera apoya el proyecto, si es malo?".
Saludos.
El proyecto es malo, porque la extrema izquierda inició lo que esperan sea el inicio del fin del sistema actual.
ResponderEliminarHeindl parece no entender el asunto, nuestro problema como país no es hacer cotizar 40 años sin más, porque casi nadie cotizaría, y si deja a la gente sin pensión regresarán los incendios callejeros Es irreal e innecesario.
Solo tendremos pensiones y una solución permanente cuando la autoridad obligue a cotizar a todo el mundo al menos lo suficiente para obtener lo que consideremos como pensión mínima.
¿Cómo?
En realidad es sencillo, quien no cotiza debe ser sometido a una fiscalización dónde deberá justificar como vive sin ingresos, y quien no cotiza pierde todo beneficio social.
Basta con que cada persona tenga su pensión mínima a su costo. De ahí hacia arriba es asunto de cada cual.