martes, 4 de septiembre de 2012

UN TRIUNFO DE LA CONCERTACIÓN

La Concertación siempre tuvo en su programa la idea de subir los impuestos. La Alianza no, pero ahora el gobierno de la Alianza (que en realidad no es de la Alianza, sino el gobierno de, por y para Sebastián Piñera) ha subido otra vez los impuestos.

La Concertación llegó al gobierno en 1990 aumentando el tributo a las empresas, de 10 a 15%. El alza iba a ser transitoria, dijo Aylwin, pero no lo fue. Luego lo subieron a 17%. Al final, cuando la Alianza creyó haber llegado al gobierno, según el brazo derecho del nuevo Presidente, Rodrigo Hinzpeter, lo hizo gracias a que el candidato había resuelto “abrazar las banderas de la Concertación”.

Como una de éstas es la de siempre, en toda circunstancia y con cualquier pretexto subir impuestos, en 2010 el nuevo gobierno los alzó a 18,5%, por un año, y después a 20%, por otro año. Iba a ser un alza transitoria, para volver al 17% al final, dijo el Presidente, para paliar los efectos del terremoto. Pero no fue verdad ni tampoco explicó cómo los particulares, que sufrieron el grueso de los efectos del terremoto, podían paliarlos si además de financiar su propia reconstrucción, debían dar fondos para la del ente más rico de todos, el Estado, dueño de 17 mil propiedades pero no dispuesto a desprenderse de ni una sola cuando tiene emergencias (ni tampoco cuando no las tiene).

Como no era verdad que el Presidente había consagrado un alza transitoria, cuando ella debía bajar a 18,5%, mandó otro proyecto para subirla para siempre a 20%. ¿Quién lo pedía? “La calle”, grupos de gente que vociferaba, destruía y amenazaba, exigiendo que subieran los impuestos. Porque ni esta alza ni la anterior estaban en el programa de gobierno. La gente que formaba los “grupos Tantauco”, nombre del fundo del dueño del cuento (lo que ya dice mucho acerca de a quién pertenece este gobierno), tenía la convicción de que un peso en manos de los particulares contribuye más al crecimiento del país y, por tanto, al empleo y enriquecimiento de todo chileno, que un peso en manos del Estado.

Por supuesto, todos los empresarios decían (y dicen, pero ahora en voz baja) lo mismo, que por lo demás es una gran verdad. Pero hoy día cruzan los dedos detrás de la espalda y dicen que el 20% está bien. Son los empresarios que tenemos, siempre dejando que les corten la mano para salvar el brazo.

Bueno, ahora se ha cumplido otra vez el mayor anhelo del Presidente Piñera, que es hablar por cadena nacional de radio y televisión a los chilenos y decirles lo felices que van a ser gracias a él y a que ahora ha conseguido sacarles a los particulares otros mil millones de dólares al año, o algo así, para que los use el Estado en crear nuevas oficinas, subsecretarías, superintendencias y ministerios. La educación, entonces, va a mejorar, asegura.

Es decir, la receta de la Concertación, pese a lo cual ésta no está feliz, porque quiere ser ella la que suba impuestos. Y ahora se apresta, en su próximo y eventual gobierno, a subirlos más. Por supuesto, habría preferido mil veces no tener que subirlos a más de 20%, porque gente como Andrés Velasco dice, dentro de ella, que eso no es bueno para el crecimiento ni el empleo. Pero Sebastián Piñera les ha subido la vara.

Cuando el impuesto a las empresas era 10% se invertía tanto que crecíamos a dos dígitos algunos años; cuando subió al 15% crecimos menos; y luego cuando subió al 17%, todavía menos. Ahora el 20% llegó para quedarse y nadie habla del 7% anual de crecimiento de la “década de oro”.

¿Y la educación? No va a mejorar, porque sólo lo hará de verdad cuando haya en ella más libertad y competencia y más particulares puedan invertir y trabajar enseñando; y cuando el dinero que hoy dilapida el monstruo estatal vaya a manos de familias con libertad para elegir colegios pagados, pues éstos son los mejores hoy, cuando sólo una minoría puede mandar sus hijos a ellos.

Y, en fin, el gobierno ha añadido otro pergamino a la voluminosa carpeta de antecedentes que justifican seguirlo llamando “V Gobierno de la Concertación”.

14 comentarios:

  1. Don Hermógenes. Es cierto todo lo que dice de los impuestos. Y la clave está en esto que usted escribió: “Por supuesto, habría preferido mil veces no tener que subirlos a más de 20%, porque gente como Andrés Velasco dice, dentro de ella (la Concertación), que eso no es bueno para el crecimiento ni el empleo. Pero Sebastián Piñera les ha subido la vara”.

    En esta cita del blog de hoy, se resumen los últimos 22 años de lo que se definió durante el gobierno de Aylwin como “la democracia de los acuerdos”, y “la economía de la solidaridad”. ¿Se acuerdan de esas frases?. Esto significó, una Concertación de izquierda que tenía que gobernar con ideas de derecha para mantenerse en el poder y obtener los votos con los que no contaba; y ahora una Alianza de derecha (se supone), que tiene que gobernar con ideas de izquierda para mantenerse en el poder, y contar con los votos que no dispone. ¿Se dan cuenta que significa esto?: La idea de Jaime Guzmán funcionó; el sistema binominal fue un éxito; la constitución de 1980 (la que firmó el presidente Pinochet, no la que se adjudicó Ricardo Lagos), cumplió su propósito. ¿Por cuánto tiempo mas?. No lo sabemos. Con lo único que no contaban Guzmán y Pinochet, era con que la derecha gobernara con un presidente DC y ministros “arrepentidos”, y que la esperada “moderación” se transformara en izquierdización. Con otro candidato, el sistema hubiese funcionado a la perfección.

    Solo una corrección don Hermógenes, Rodrigo Hinzpeter no es el brazo derecho del presidente, es su brazo izquierdo. Piñera no aceptaría tener nada derecho en palacio, lo podría afectar en las encuestas. O un zurdo, o un manco. Un “derecho” por ningún motivo.

    Todo esto, confirma la tesis que mantengo desde hace dos años. Es mejor un gobierno de la Concertación que necesariamente tenga que “derechizarse” para gobernar, a un gobierno de la Alianza, que necesariamente tenga que izquierdizarse para mantenerse en el poder al que tanto les costó acceder, y por el que han sido capaces de las acciones mas ruines para no perderlo.

    Otro tema: Este fin de semana me “entretuve” recolectando datos, con el fin de desmentir al gobierno en su obsesión por adjudicarse los méritos del aumento del crecimiento económico, la disminución del desempleo, y el aumento de la inversión extranjera. Los invito a leer este trabajo en mi blog. El del día lunes (primera parte), y el del martes (segunda parte).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Máximo, por favor puedes poner el "link" para leer tu blog, gracias. Saludos.

      Eliminar
    2. Máximo: Muy documentados y racionales ambos comentarios de su blog, pero no concuerdo con su conclusión, que supone a gobernntes y políticos como también muy calculadores y raciones. No, ellos se mueven según el grito de la calle y las encuestas.
      Traté de comentar sus artículos en el "blog de Máximo", pero me exigían allí una prueba para demostrar que no soy un robot, y no pude pasarla. ¿Cómo podemos comentar su blog los robots como yo? Saludos.

      Eliminar
    3. Don Hermógenes: Para opinar el el blog de Máximo hay que tener mucha paciencia. Casi nunca se puede al primer intento, es el único blog en que las letras aparecen tan pegadas que se confunden, hay que seguir insistiendo hasta que aparecen algo claras. Yo he tenido que intentar hasta 7 veces.
      Máximo, creo que algún zurdo de blogger te está boicoteando.

      Eliminar
    4. Cristóbal. Solo tienes que hacer “click” en mi nombre, y llegas al blog. En todo caso, esta es la dirección: http://blog-de-maximo.blogspot.com/

      Don Hermógenes. En realidad, digo que los políticos tienen dos caminos a seguir, bajar el gasto (y tener a la gallada en la calle incendiando), o subir los impuestos y endeudarse (para tener a la gallada en sus casas). Claro, tienen razón usted, la primera no la tomarán, y el camino será el mismo de siempre, aquí y en todos lados, es cosa de ver como está Europa, donde el ajuste no lo están haciendo los políticos, sino que los acreedores. Pero también digo que el gobierno está subiendo los impuestos para prepararse antes que ese día llegue, es decir, yo también pienso que las encuestas y la calle terminarán decidiendo.
      En cuanto a las letras ilegibles, eso ya me lo han dicho varios comentaristas de mi blog. Yo no entiendo nada de computación, y no se si ese asuntito se podrá anular para entrar directo a los comentarios. Si algún amigo de este blog o del mío sabe como hacerlo, le agradeceré me explique, y lo corrijo. En todo caso, todos los blogs tienen esa dificultad, a veces en el suyo he tenido que intentar 2 o 3 veces para comentar.
      Será bienvenido en mi blog a comentar cuando usted quiera, cuando Blogger se lo permita, o cuando alguien me diga que hago para eliminar o corregir las letras “anti robot”.

      Hunter. Jaja. No me extrañaría. Con lo “cariñoso” que soy con ellos, no separaría nada menos.

      Eliminar
    5. Gracias Máximo, ahí los leí y comenté. Sigue así con tu blog. Saludos.

      Eliminar
  2. Estimados amigos

    Vayanse acostumbrando que Piñera es lo mas cercano a su ideologia que jamas llegaran a ver.

    Si esperan otro gobierno como el del sanguinario y corrupto primate que ustedes tanto idolatran, les doy por firmado que nunca jamás llegará.

    Afectuosos saludos

    ResponderEliminar
  3. Tu firma vale tan poco como tus palabras.

    ResponderEliminar
  4. De pronto casi salto de la silla al ver las canas que le habían salido a la atractiva Diana Bolocco.

    No, eran las del presidente. Aunque sin necesitarlo, puesto que sabía qué y cómo iba éste a hablar, me hice el ánimo de amargarme el resto de la noche y de oír su discurso.

    Tal como señala don HPdA, esta alza fue producto de la pusilanimidad del gobernante ante las primeras bravatas de los comunistas en la calle.

    -Aquí está. Dejaré los impuestos transitorios en permanentes. Esta es la salida y la solución a todo. Me la están dando pelada y todos me comprenderán: la derecha incluidos los empresarios y la izquierda. Mato cinco pájaros de un tiro: devuelvo la paz en las calles, aumento el gasto en educación que es lo que piden, dejo contenta-señor-contenta a esa gran clase media tirándole unas migajas, me gano a la concertación y subo en las encuestas –debe haberse dicho el presidente en su meditada movida de ajedrez.

    La cara de satisfacción y de logro en su discurso lo revela. Sólo le faltó añadir: “con serena firmeza y viril energía”, como le encantaba decir en sus eternos discursos a aquel que cuelga en la oficina de su desaparecido ministro brazo derecho (*).

    Este hombre de Harvard que dice saber de economía y que más parece que fue a EEUU a idear negocios, llegada la hora de aplicar los conocimientos hace todo lo contrario a lo que la teoría y la práctica (demostrada empíricamente en Chile y otros lados que nos han imitado, Inglaterra incluida) enseñan, olvidando hasta el básico concepto de la teoría de oferta y demanda.

    Hernán Büchi, saliendo de un seminario de la Sofofa hace algunos años y luego de que el gobierno de la concertación de turno hubiera subido los impuestos, dijo a los periodistas: “es la artimaña legal que tienen los gobiernos socialistas para robarle plata a la gente”.

    No fue parte del discurso del presidente lo que, probablemente en algunas variables y con certeza en otras, se viene en el corto y mediano plazo, como consecuencia de su populismo socialista: disminución del empleo, desvalorización de los ahorros previsionales (menor valor bursátil de las acciones), disminución de la inversión interna y externa, fuga de capitales, quiebras, consecuentemente el aumento de la pobreza y la bola de nieve que estos efectos siempre conllevan partiendo con más movilizaciones sociales, más violentas y que piden más impuestos.

    Entramos, pues, de lleno en el círculo vicioso que Büchi tan bien explica. En la espiral que conduce a un centro de miseria, violencia e ingobernabilidad. Chile está desde hoy coqueteando con lo que los astrónomos llaman hoyo negro. Las medidas hoy aprobadas son un envión en esa dirección.

    Como consuelo, me quedo con la parte pastoral del presidente. Cual sacerdote al final de una misa, se despide emocionadamente (sin lágrimas, pues él no llora) con un “Dios los bendiga a todos”.

    Profeta también, pues claro está que nos va a hacer falta la bendición de Dios, de la Virgen y de todos los santos desde ayer, hoy y, más que nunca, en adelante.

    Ya que no existe chileno alguno que hoy pueda ayudar a Chile, al menos no en lo que algunos aún llaman Estado de Derecho.

    (*): Me refiero a un retrato, no a aquel desde luego. Sería como mucho.

    ResponderEliminar
  5. La platita para afuera, a crear empleos en otra parte, menos en Chile

    ResponderEliminar
  6. Don Hermógenes

    Usted dice
    "¿Y la educación? No va a mejorar, porque sólo lo hará de verdad cuando haya en ella más libertad y competencia.."

    Estoy de acuerdo con usted con respecto a que la educación no mejorará con esta reforma tributaria; sin embargo, mejorar la educación no pasa sólo por más libertad y competencia.

    Para que exista una mejora sustantiva de la formación de los escolares chilenos el MINEDUC debe cambiar su paradigma, entre otras cosas, con relación a los planes y programas estandarizados, aceptando que hay escolares vulnerables, con cultura de origen elemental,que deben ser formados de manera "especial", con el propósito de reducir su vulnerabilidad social y permitir que alcancen un nivel básico de productividad que haga posible que puedan sostener una vida personal de mejor calidad que la que tuvieron por origen familiar.

    Por otra parte, existen otros escolares con un capital cultural más complejo, que tienen mejores condiciones iniciales para lograr resultados de aprendizaje de nivel intelectual y valórico que posibilite su progreso hacia estudios superiores que requieren de esa formación.

    Reconocer explícitamente esta diferencia es vital para trabajar en la solución de los diferenciales formativos de los escolares chilenos.

    Ese cambio de paradigma del MINEDUC significa, también, que, dado que las cohortes de ingreso a las carreras de pedagogía básica y parvularia, especialmente, no saben leer ni escribir cuando ingresan a la educación terciaria, tampoco cuando egresan de ella, según demuestran los resultados de la prueba INICIA, los planes y programas que presentan las instituciones formadoras de profesores básicos y parvularios, deben ser modificados de manera absoluta, cuestión que debe aceptar el MINEDUC, ya que que, diciéndolo brevemente, los analfabetos funcionales que han matriculado esas instituciones no pueden aprender a enseñar lo que no saben, situación que los funcionarios de ese ministerio no son capaces de reconocer porque viven una parálisis paradigmática permanente, lo que los hace mantener la presión sobre las instituciones formadoras con relación a la formación inicial de los futuros titulados de pedagogía básica y media.

    Por esas y otras causas es muy difícil que, como usted señala "cuando el dinero.. vaya a manos de familias con libertad para elegir colegios pagados, pues éstos son los mejores hoy, cuando sólo una minoría puede mandar sus hijos a ellos." la opción de elegir colegio sea la solución para el profundo problema de calidad que enfrenta la educación escolar y superior de nuestro país.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gestión Educativa: Yo pienso que los cambios de paradigma que usted recomienda se logran cuando hay libertad de enseñar y libertad para conformar programas. Lamentablemente eso lo impide el Ministerio de Educación. Saludos.

      Eliminar
  7. Pero cuando en Chile los impuestos transitorios han tenido esa condición, siempre han pasado a ser definitivos. Chile es el único país del mundo en que transitorio es sinónimo de permanente.
    Por otra parte, como es mi bolsillo el que lo nota, tengo claro que cada alza de impuestos los empresarios, de una u otra forma lo trasladan a costos y no terminan pagándolo ellos, sino que todos nosotros, incluyendo los que gritan en las calles por más impuestos para mejorar la educación.
    Por lo demás, la educación no se va a mejorar con más impuestos ni con que los cien mil o mas que egresan cada año pueda ir a la universidad. Eso no ocurre en ningún país del mundo, es populismo puro e imposible.
    La educación va a mejorar cuando los estudiantes se deidquen a estudiar y los profesores a enseñar, que sean éstos calificados anualmente y no haciendo tesis cada 4 años que todos compran y preparando una clase que es anunciada con antelación.
    Mejorará cuando los profesores, como antes, tengan la facultad de calificar a los alumnos de acuerdo a lo que aprendieron y no como hoy, que por el sistema de subvenciones, están obligados a aprobar a todos, aúnque no sepan ni leer.

    ResponderEliminar