Miguel Otero cedió. Se desdijo. Pidió disculpas. Había dicho la verdad y se había convertido en un héroe para mí. Claro, eso es sinónimo de convertirse en un villano para casi todos los demás. Pero hay un distingo qué hacer entre yo y los demás: que yo tengo la razón y puedo probarlo. De hecho, lo he probado en libros que están ahí. He probado que el pueblo apoyó al Gobierno Militar, he probado que el país mejoró bajo ese régimen hasta quedar irreconocible. Y, sobre todo, he probado algo que dijo Miguel Otero y que se me olvidó citar en el blog precedente: que si en el curso de la guerra contra el terrorismo de izquierda hubo atropellos a los derechos de las personas, ellos no fueron institucionalizados, sino obra de quienes actuaron por su cuenta y al margen de las autoridades. Esto último lo he probado publicando los variados documentos de la Junta que ordenaban respetar los derechos de la gente, como consta en mi libro "Terapia para Cerebros Lavados".
Pero Miguel Otero no ha sacado nada con tener toda la razón y haber dicho estrictamente verdades. La jauría se le ha ido encima, confundidos en ella los totalitarios, cuya intentona armada fue derrotada por nuestros uniformados, y la cohorte de "cerebros lavados" que ha ido engrosando sus filas en la medida en que la prédica izquierdista se ha ido imponiendo.
Aterricemos con "datos duros": las sucesivas comisiones sesgadas que formó la Concertación comprobaron que, en todo el Gobierno Militar, hubo 3.197 muertos. De ellos, 2.244 cayeron entre fines de 1973 y todo 1974. A 316 los mató la guerrilla, pero siempre se los cargan a Pinochet. Es decir, después de 1974 el país estuvo completamente pacificado y había muy pocos enfrentamientos. Bueno, en el primer período, en que caía el mayor número de muertos, los señores Eduardo Frei Montalva y Patricio Aylwin DEFENDÍAN A LA JUNTA MILITAR Y EL SEGUNDO LLEGÓ A PEDIRLE QUE NO HICIERA UN GOBIERNO DEMASIADO CORTO. (Hermógenes Pérez de Arce, op. cit.)
Pero en todo este increíble episodio Otero hay una cosa muy grave. En medio de la jauría que se le ha abalanzado, el presidente de la DC, diputado Juan Carlos Latorre, ha dictaminado (lo oí personalmente de sus labios por Radio Agricultura hace unas horas) que sobre el Gobierno Militar hay en Chile UNA SOLA VERSIÓN, que es la opuesta a la que ha dado a conocer el embajador Otero.
¡Una sola versión! ¡No se permite ninguna otra! ¿Cómo se llama eso? "Dictadura", por supuesto. La verdadera dictadura es la que vivimos hoy y es la que se ha consagrado a través del continuado, sistemático e incesante lavado de cerebros de todos los chilenos, que el embajador Otero tuvo el coraje de desafiar, lo cual lo habría transformado en un verdadero héroe, si en el último momento no se hubiera desinflado.
lunes, 7 de junio de 2010
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Personalmente no concuerdo con los dichos del embajador y me parece incorrecto que los haya expresado en el ejercicio de las funciones de un cargo de Estado, cuya posición institucional sí es una sola, de respeto irrestricto a los derechos humanos.
ResponderEliminarSu opinión privada, con todo, me parece perfectamente legítima, y concordante con lo que piensa una fracción de nuestra sociedad que no se puede desconocer.
Sí me parecen sospechosas y convenientes las palabras de Latorre, que muestran una actitud de apropiación indebida de la opinión general, y además, también concuerdo, soslayan la posición pro golpista que tuvo la mayor parte de la DC en 1973, por mucho que el partido hoy publicite a los cuatro vientos su supuesta "identidad" de izquierda.
Andrés.
Que manera de caerse el Sr. Otero. La jauría zurda lo asustó, lo mismo que al general Andrusco. La izquierda vociferante ya sabe a que atenerse le basta con gritar y amenazar para que todos se dobleguen.
ResponderEliminarNo me extrañaría que el Sr Otero tenga que dejar su cargo, así es la fuerza de la izquierda aumentada por su caja de resonancia que es la DC, los mismos que apaludieron y defendieron el pronunciamiento militar.
Incluso encuentro patético que haya hablado de "dictadura". Lo que es el terror al zurderio vocinglero.
Pucha don Hermógenez que de acuerdo estoy con ud. ojalá pudiera difundir más sus escritos. Aun habemos muchos que pensamos así y no nos dejamos engañar por la propaganda ni por la historia maliciosamente incorreta que da esta gente.
ResponderEliminarEspero que algun día se logre reivindicar a el gobierno militar.
Usted exige que se respeten las diferentes versiones, pero comienza su columna con "yo tengo la razón".
ResponderEliminaryo le voy a dar mi versión:
Intente probar lo que quiera, dé los datos duros que quiera. Pero nada quita que en este país hubo un "interdicto" hablando de "dictablanda" que se llevo palos verdes a su casa y que bajo su alero se torturó (que gesto más católico).
Él gobernó para que gente como usted, lo defienda una vez muerto, el fue Pavlov...
Realmente no es grato -aunque si digno de estudio- escribir sobre estos temas con gente como usted, que no les gusta comprender puntos de vista o ampliar el espectro ideológico (tal vez sea la edad). Sólo vomitan soberbia y una dudable calidad bajo el pretexto de "incontinencia literaria".
Hermógenes tienes razón.
ResponderEliminarOtero "arrugó", ¡qué tremenda maquinaria pesada tiene la Concertación!.
Hasta hacen cambiar de intención de gobernar al mismísimo presidente Piñera, quién se está transformando en un dudoso éxito de la presión que está ejerciendo la actual oposición.
Está visto que la verdad la acomodan los vencedores, pero hay que luchar por informar toda la verdad, y ahí ha estado Ud.
Continúe igual, cada día somos más sus seguidores, que nos estamos preocupando por dar a conocer la dirección de su blog.
También concuerdo que usted tiene la razón don Hermógenes, está claro que en estos días se critica a la gente que piensa como usted porque hoy en día solo está la versión de izquierda sobre el pronunciamiento y gobierno militar (como dijo Lagos), esto cada vez concuerda más con la política izquierdista de "miente miente que algo queda". Espero que la gente comience a leer más sus columnas y que lean sus libros, para que se den cuenta de que la real verdad no es como la pintan los izquierdistas. Además la reacción de la gente respecto al gobierno militar es similar a la que hubo cuando los militares salieron a la calle tras el terremoto, cosa que es respaldada por una sabia frase del General Don Augusto Pinochet, "Cuando hay problemas las personas claman a Dios y al soldado, cuando los problemas pasan Dios es olvidado y el soldado despreciado."
ResponderEliminarBueno, está claro que usted tiene su postura firme, por lo que esto lo escribo para la gente a la que usted se refiere como "lavados de cerebro" para que se den cuenta que aun hay personas, y personas jóvenes que piensan como usted.
No estaba yo equivocado, Otero tuvo que dejar su cargo, hoy por hoy, en este país, hablar en favor del gobierno militar es un crimen de lesa humanidad que no se perdona.
ResponderEliminarPienso si que la salida de Otero debió ser digna, mantener sus dichos y renunciar y no salir por la ventana, echado, bajo un disfraz de renuncia voluntaria, quedando mal con Dios y con el diablo ya que los partidarios del gobierno militar no le perdonan su patética petición de perdón y la izquierda vociferante nunca lo ha aceptado, menos entenderá su retractación
ROULIEZ:
ResponderEliminarLo extraño estimado Rouliez, es que ese "interdicto" sacó al país del hoyo al que lo habían conducido los "inteligentes" políticos y economistas de esa época (todos), le dio un nuevo orden y modelo, y lo entregó pacíficamente a manos de la democracia, cnvertido en modelo a seguir, sobre todo a los países de Europa del este que venían de vuelta de la pésima experiencia socialista,....¡La misma que los inteligentes de izquierda, con salvadorcito a la cabeza, nos querían meter....¡Puchas que hay que ser interdicto para no reconocer algo tan elemental, mi estimado!
¿No le parece extraño que quienes estaban llamados y preparados (presuntamente) para conducir los destinos de Chile fueron quienes llevaron a este a la ruina y al caos, y que debieron ser quienes, no tienen ni esa función ni preparación, quienes lo sacaron del fondo del abismo, lo montaron sobre los rieles y lo hicieron caminar exitosamente hasta el día de hoy?
Vaya interdicto....