martes, 26 de agosto de 2025

MUERTES EVITABLES E INEVITABLES

Un sereno analista de la actualidad política afirma que la caída de Evelyn Matthei en las encuestas se debió a que declaró que el 11 de septiembre de 1973 había sido inevitable que hubiera muertes. En realidad, todos los analistas son de la misma opinión.

Pero parece indiscutible que Evelyn Matthei sólo dijo una verdad muy fácil de probar: si hubo un poder público que conminó a los militares a poner término a un régimen y éste había organizado grupos armados para no sólo defenderse sino tomar el poder total, y los militares acogieron el llamado político civil, es de Pero Grullo que el enfrentamiento de ambos contingentes armados debía dar lugar inevitablemente a muertes en ambos bandos. 

Por cierto, cualquier podía anticipar que los caídos de la guerrilla de izquierda iban a ser más que los de las tropas profesionales. De hecho, el Informe Rettig dijo que entre el 11 de septiembre y el 31 de diciembre de 1973 cayeron alrededor de 1.800 personas, unas mil quinientas del bando de la guerrilla y unos 300 uniformados.

Por cierto, entre todas ésas hubo muertes evitables. Los muertos a manos de carabineros del retén de Lonquén fueron evitables, si los primeros hubieran cumplido su deber de respetar la vida de los presos.

La muerte de carabinero Fabriciano González Urzúa a manos de guerrilleros que disparaban desde una industria textil fue evitable, porque aquél sólo auxiliaba a un camarada herido y procuraba arrastrarlo a un lugar seguro. Por su heroísmo hoy la Escuela de Suboficiales de Carabineros lleva su nombre. Su muerte heroica fue evitable.

También fue evitable la de una veintena de asesores y funcionarios de La Moneda, a quienes alguien ordenó fusilar en las instalaciones de un regimiento en Peñalolén el mismo 11.

Pero, en general, era inevitable que hubiera muertos. El problema reside en que la izquierda ha sido mucho más exitosa en condenar el 11 de septiembre que la derecha en defender su necesidad e inevitabilidad.

Los militares ganaron la guerra el extremismo marxista en toda la línea y por eso, al dejar el poder, se condecoraron justificadamente con la medalla "Misión Cumplida". Habían recibido de los civiles un país en ruinas y les habían devuelto otro próspero y que estaba a la cabeza de América Latina.

Ganaron la guerra a la subversión y al terrorismo de izquierda, pero perdieron la posguerra propagandística. Los sectores de derecha, copartícipes del éxito y que tenían la obligación de defender el legado. no lo hicieron. Algunos incluso traicionaron a los militares, pasándose en su mayoría al bando de los que hoy los persiguen y condenan.

Por eso Evelyn Matthei dice una verdad irredargûible, pero cae en las encuestas. Porque en Chile el relato mata al dato y aólo una minoría es capaz de defender la verdad.

5 comentarios:

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  2. Don Hermógenes,
    Sobre el relato, usted puede ver este video que habla por sí solo.

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  3. Ya la cagó Cenutrio con su ortografía...

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  4. Muy interesante entrevista a J. Kaiser en CNN. Excelente respecto al Gobierno Militar. Reguleque respecto a las renovables y muy bien respecto a sus rivales políticos.

    https://www.youtube.com/live/ifsa6rp8ilM?si=X9i2386UcBv9lkgp

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  5. Hermo- si ganase JJara -quien es mucho mas radical que SAllende, se puede repetir la historia?

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