“¿Los
infantes de Aragón, qué se fizieron?/ ¿Qué fue de tanto galán?/ ¿Qué de tanta
invención que truxieron?/ Las justas y los torneos, paramentos, bordaduras y
cimeras/ ¿Fueron sino devaneos?” Hace casi exactamente seiscientos años, en
1418, Jorge Manrique daba cuenta de la banalidad de todo. Hoy, en 2018, el ser
humano, especialmente si es chileno, sigue siendo igual de banal. Hay demasiada
miseria moral triunfante. Piñera, salvado por los militares, y más que la
mayoría de los chilenos, porque tenía más que perder, desciende un escalón más
en la degradación política y amenaza con privar de sus pensiones a los presos
políticos, a los cuales ya una vez incumplió y vejó. Amenaza esas pensiones de
las cuales viven sus familias, en vista de que los jefes de hogar han sido
sometidos a la más vil y antijurídica venganza que contemplan los anales de la
judicatura chilena.
Dijo Piñera en la TV: “Estamos haciendo un esfuerzo para
corregir este tipo de situaciones que hiere y atenta a la conciencia de todos
los hombres y mujeres”. El mismo lenguaje que usó su ministra de “las Culturas”
para imponer, por orden de Piñera, al Museo Histórico, la censura de una frase y de la efigie del ex
Presidente Pinochet, frase que en un momento dado interpretó al 70 por ciento
lo chilenos: “La gesta del 11 de septiembre incorporó a Chile a la heroica
lucha contra la dictadura marxista”. Cuando el miedo cundía la coreaban todos lo no marxistas.
Pero para
rememorar eso no hay libertad de expresión en Chile. Esa verdad de hace 45 años
no se puede exhibir hoy en un museo. Censura a la libertad de expresión.
¿Qué se fizo el editorial de “El Mercurio” y “La Tercera”, en defensa de esa
libertad, y que rasgaban vestiduras cada vez que era amenazada o conculcada?
¿Qué se fizieron las cartas al diario de Abraham Santibáñez, el periodista libérrimo, anatematizando
cualquier censura? ¿Qué se fizieron las declaraciones del Colegio de Periodistas
en defensa de la libertad de informar? ¿Y otros que invariablemente salían a
romper lanzas citando a Voltaire, cuando decía “estoy en desacuerdo
con tus ideas, pero daría mi vida en defensa de tu derecho a expresarlas”?
Todos fueron
sólo devaneos. En Chile impera hoy la Ley de Goebbels, el ministro de
Propaganda nazi: “una mentira mil veces repetida pasa a ser verdad”. Eso es lo
que vivimos actualmente.
La repetición
de la consigna ha reescrito la historia. Algo tan ridículo como que la
Universidad de Harvard honre a Ricardo Lagos como un adalid de la modernidad
democrática, cuando era un tipo que ponía bombas en su juventud para “destruir
la democracia burguesa” (bombas por las cuales procesaban a Clotario Blest,
según la biografía de este último); el mismo
Ricardo Lagos que en su libro más leído recomendaba, como única solución, que
todos los medios de producción pasaran a manos del Estado; el mismo que fue un
adalid de la Unidad Popular, el gobierno más desastroso de la historia de Chile
y que nos llevaba a la órbita soviética y, precisamente el 11 de septiembre de
1973, se aprestaba a asumir como embajador en Moscú, para guiar la
colonización. Hoy dignificado por Harvard. ¡Qué poco saben en Harvard! Es
cierto que Lagos, como gobernante, no practicó lo que predicó. Pero es que
entonces denle un Premio al Arrepentimiento, la “Medal of Honor of Father Gatica”,
pero no nos lo presenten como un liberador de su pueblo, porque estaba a punto
de incorporarlo a la cohorte de colonias esclavas de la hoy difunta “Hermana
Mayor”, como la bautizara Allende.
Los norteamericanos,
caracterizados maestros en ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el
propio, acosaron durante 16 años al Gobierno Militar por su forma de enfrentar
al terrorismo patrocinado por Moscú y La Habana, y se sumaban año a año a la
mayoría que condenaba a ese régimen en la Comisión de Derechos Humanos. Pero he
aquí cómo actúan ellos: “El Mercurio” del 2 de mayo de 2008 informaba que un
bombardeo norteamericano había matado a los jefes de Al Qaeda, Aden Hashi Adro
y Muhaidin Omar, junto a otras 30 personas que estaban cerca, además de destruir
sus viviendas. Y aplauden a sus hombres de armas por esas cosas, cuando
aparecen en algún aeropuerto. ¿Los autores? Hoy libres y homenajeados por un pueblo
agradecido. Y si usted ve “La Noche Más Oscura” se enterará de las torturas
mediante las cuales averiguaron el paradero de Osama Bin Laden y el
procedimiento con que lo asesinaron por sorpresa junto a varios acompañantes,
hombres y mujeres, y cómo procedieron después a lanzar su cadáver al mar. Allá
condecoran a los autores, pero acá los meten presos por mucho menos. Y el
principal perseguidor de ellos, Piñera, les dice que “cometieron crímenes
atroces”, pero la mayoría lo elije Presidente, la Justicia le garantiza
impunidad (compare el caso de MEO y el de Piñera, idénticos, pero el primero perseguido
por la prensa y los tribunales y el segundo impune, mientras un gerente suyo,
que no fue candidato ni recibió la plata, arrostra el proceso).
La verdad y
la justicia en Chile ya no existen ni son: tal vez fueron, igual que “los torneos, paramentos,
bordaduras y cimeras”, sólo devaneos.
Hay cosas que estan escrita diriamos casi con fuego y una de esas por mucho peligro de caer en la orbita sovietica en los dias del 11 de Septiembre de 1973 pero que se disolvio en esos dias en las 24 primeras horas y que un presidente muera y sea atacado mediante la aviacion quizas los militares en esos dias debieran haberse leido la letra pequeña en algun documento que diese luz acerca de los daños colaterales.
ResponderEliminarPero de ahi a comparar la operacion u operaciones en un ambiente de guerra como lo sucedido ya desde la primera guerra de Irak y la segunda mas la muerte de Sadam Husein condenado a muerte mediante un juicio cosa que a Allende no se le dio ni esa posibilidad.
Quizas hubo mucha prisa y quizas hubiese sido mas oportuno esperar que el pais hubiese entrado en una pre guerra civil con todos esos extremistas fuertemente armados.
Comparar la guerra de Irak y Afganistan con un golpe de estado como el de Chile no tiene por donde encontrarle su ajuste y la politica es la politica y la realidad es que Pinochet despues fue senador y sus gente mas fiel fue entrando en la carcel y nadie que se sepa ha intentado rescatar a ningun militar detenido.
Y sobre la posibilidad que les quiten sus pensiones pues ahi nobleza obliga la familia del general/senador debiera hacerse cargo de estas y por que no pensando en un Ponce Lerou que miles de millones de dolares los tiene.
Tampoco se "perdona" que los rumanos hayan ejecutado a Ceaucescu y esposa y no les hayan llevado a juicio.
Gadafi fue ejecutado y Libia no levanta cabeza.
Quizas esa es la "letra pequeña" que si leyo Fidel Castro no persiguio a Batista en su exilio ni los militares argentinos se ensañaron con Estela de Peron aunque en este caso no habia ningun tipo de confrontacion ideologica como habia en Chile etc etc hay para todos los gustos.
Habria que imaginar como hubiesen sido las cosas en Chile si Allende hubiese sido despuesto mandado al exilio o arrestado en alguna bonita casa en el sur sur de Chile y donde la fuerza aerea no hubiese probado por primera vez los cohetes Sura de fabricacion suiza.
Piñera... es un histérico que odia perder el control, pero en vez de tomar el toro por las astas, se bloquea y se pone tonto, solo por miedo.
ResponderEliminarEstamos jodidos.
TODA LA RAZON DON HERMOGENES,PERO,MUCHOS VOTAMOS POR DON SEBASTIAN SABIENDO DE SU INEPTITUD POLITICA,PERO,RECONOCIENDO SUS HABLIDADES ECONMICAS QUE NO SE IRIA POR EL LADO DE VENEZUELA,EL RESTO DEGRACIADAMENTE ES MUSICA,ESTAMOS DADOS
ResponderEliminarDon Hermógenes, vea este video sobre el "movimiento feminista".
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=lSOrA_dKKR0
Gracias, Máximo
ResponderEliminar¡Excelente como siempre!,…..
ResponderEliminar¿Donde puedo adquirir el libro de la Historia de la Revolución Militar Chilena?,…….en Librería Antártica ni saben….cuando y quien lo distribuye,. gracias.
(MAS DE MANRIQUE...)
ResponderEliminarY estos males que he leido,
yo soy el que los espera;
yo soy el desesperado,
yo soy el que desespera;
yo soy el que presto muera,
y no viva, pues no vivo;
yo soy el que está cautivo
y afectado por el Piñera.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHugo solo nuevamente tu semántica y vision histórica me dejan pensativo...
ResponderEliminarEso es bueno!
ResponderEliminarEl semen es de buena calidad.
EliminarEl Ministro Larraín tenia razon cuando dijo que los jueces eran izquierdistas porque en los últimos 30 años los Gobiernos de Izquierda ocuparon 24 años.
ResponderEliminarLa Izquierda, además, con la complicidad cobardona de la Derecha en la Alianza Publica Privada
Los resultados están a la vista. Cerebros lavados.
En la "transición mas exitosa de la Historia" la Izquierda y la Derecha Unida tienen al país al borde del Frente Amplio, esto es, la Unidad Popular 2.
Pero ¿cual es el problema? ¡para eso están las Islas Virgenes!
Seguiré agradecido de los militares, señor Pérez de Arce ibieta.
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