Viendo antenoche el noticiero de TV advertí que en el último episodio de vandalización de nuestras ciudades, protagonizado por comunistas, "compañeros de ruta", "tontos útiles" y "kerenskys chilenos", aparecieron ahora legiones de "cascos azules" con chalecos identificatorios de "observadores de derechos humanos". Ahí supe que ya el país transitaba al borde de la imbecilidad.
Pues estos "cascos azules" son, por supuesto, ex terroristas más viejos, que tienen por misión velar por la impunidad de los actuales y formar gran alboroto si sorprenden a la fuerza pública actuando contra éstos. Pero, por esas paradojas de la existencia, resultó que las "víctimas de violaciones a los derechos humanos" estaban a punto de linchar a un pobre sujeto, como si hubiera sido un Alfonso Márquez de la Plata cualquiera, que había tenido la mala idea de andar por la calle y a quien alguien había acusado de ser un carabinero de civil. Los "observadores de derechos humanos" entonces se vieron obligados, muy a su pesar, a conseguir que "las víctimas" no terminaran de lincharlo y así el sujeto, más muerto que vivo, logró escapar. Por supuesto, los "observadores" no dejarán constancia alguna de este hecho en ninguna parte, porque su misión es denunciar como autor de violación a los derechos humanos a todo carabinero que sorprendan impidiendo a algún encapuchado destruir, incendiar o saquear, pero no la de velar por que las leyes se apliquen a los que asuelan las ciudades.
El estado de imbecilidad es tal que el gobierno se defiende de su evidente incapacidad de mantener el orden diciendo que ha enviado al Congreso un proyecto para castigar a los vándalos, siendo que las actuales leyes, desde el Código Penal hasta la de Seguridad del Estado, castigan precisa y rigurosamente todas las conductas de los "encapuchados". Pero, como en Chile no hay estado de derecho, resulta que de más de cuatrocientos detenidos por Carabineros, uno solo ha sido formalizado, porque fue sorprendido y filmado incendiando un bus policial lleno de efectivos y con la manifiesta intención de que se quemaran adentro, como sucedió tantas veces durante el Gobierno Militar; pero entonces con el resultado de que los extremistas eran apresados, procesados y condenados. Claro, después todos ellos se acogieron a la Ley de Amnistía (que hoy se niega a los uniformados) y los que cometieron delitos después de ella, en su totalidad fueron indultados en 1991 por Patricio Aylwin.
El hecho es que ahora el terrorismo y el vandalismo incendiario campean en el país y quedan impunes, y por eso en el sur los pequeños propietarios constantemente atacados por extremistas han decidido armarse y organizarse. ¿Y qué hace, entretanto, el ministerio del Interior? Yo les voy a decir lo que hace: su medio centenar de abogados de izquierda de su "Instituto de Derechos Humanos" activa más querellas contra ex uniformados por hechos de 1973 y 1974 que se encuentran prescritos, aministiados y muchas veces ya juzgados. Y lo hace con tal saña que días atrás apeló ante la Sala Penal de la Corte Suprema (integrada por cuatro ministros reconocidamente de izquierda y un abogado integrante kerensky) de un fallo que había condenado a 541 días de presidio remitido (es decir, que se cumple en libertad) a tres ex oficiales de la Armada, uno de Carabineros y otro de la policía civil, por hechos de 1973. Entonces los abogados de izquierda del ministerio del Interior apelaron ¡para que se aumentara la pena!, lo que sala de izquierda y su integrante kerensky acogieron por unanimidad, decretando que los hoy ancianos oficiales (r) deben cumplir ¡cinco años y un día y sin remisión!, es decir, presidio efectivo, lo que el sentido común del juez de primera instancia y de la Corte de Apelaciones sureña les había sugerido que era desproporcionado. Pues ya que se estaba violando el derecho para condenarlos, parecía natural que por lo menos no tuvieran que terminar sus días tras las rejas. Pero cuando un país camina, guiado por el odio político, al borde la imbecilidad, estas consideraciones de sentido común no valen.
Pero eso no es ni siquiera todo, pues resulta que la cárcel de uniformados de Punta Peuco ya está repleta, gracias a la acción o inacción del actual gobernante que les prometio a los uniformados pasivos que velaría por la legalidad de los juicios y porque éstos no se eternizaran y se aplicara la prescripción (nada de lo cual ha cumplido, sino al contrario). Y entonces resulta que ya no hay cupos para los cinco oficiales recién e ilegalmente condenados por acción del gobierno y que deben presentarse en los próximos días en Punta Peuco. Sobre todo que en el otro penal, el Cordillera, también ya se dan situaciones de hacinamiento.
De este modo, entre los muchos testimonios de que, bajo su actual conducción, el país camina al borde de la imbecilidad, sin duda el más elocuente es esta situación en que la autoridad es incapaz de aplicar las leyes a los terroristas actuales y activos, mientras sus abogados del ministerio del Interior despliegan ingentes esfuerzos para, con la complicidad de la judicatura de izquierda, materializar la vindicta del odio marxista, atropellar las leyes y poner tras las rejas a quienes, hace casi cuarenta años, sí cumplieron la misión de impedir que el extremismo se enseñoreara del país mediante las armas y le impusiera un yugo totalitario.
Estamos mal...sobre Girardi, no lo pierdan de vista:
ResponderEliminarhttp://diario.latercera.com/2012/06/30/01/contenido/reportajes/25-112826-9-retrato-de-un-sobreviviente.shtml
este pais es mas bien "una cosa" amorfa, una cascara de lo que fue,y en donde nada es serio y cada dia saltamos de una cosa a otra, a golpes fugaces de la "pantalla idiota".
ResponderEliminarPor eso estimado Hermogenes, antes de encogernos de hombros definitivamente, vale la pena que voces de alerta como la tuya lleguen a mas gente, y no solo a esta pequeña tribu de ya convencidos.
El mismo fenomeno "reduccionista" lo veo en los militares, salvo quiza ahora El Plan Ahora...durante años se han reunido entre ellos, se desahogan, y los sigue cazando de a uno.
¿Al borde?.
ResponderEliminarSolo van quedando dos hombres, SOLO DOS, que protegen la obra del Presidente Pinochet en los medios relatando la verdad y denunciando la corrupción generalizada de los gobiernos de la ingobernabilidad: don Hermógenes y Gonzalo Rojas.
ResponderEliminar¿Qué ingredientes hacen falta para que estemos ad portas del desastre de los años 1971 – 72 - 73?
Dos, solo dos.
El primero: el factor económico. Mientras que haya plata que mamar de la ubre pública, la cual se alimenta de la privada y cada vez más en mayores cantidades, no hay mayor riesgo de un colapso fatal y final.
Este factor, si bien aún no se ha dado, perfectamente se podría verificar en el corto plazo. ¿Cómo? Tal como lo han venido haciendo en materia económica los gobiernos de la concertación incluyendo este con el compañero Piñera, el que las ha profundizado. Si se le agregan factores externos, como una recesión mundial más larga con una violenta baja en las exportaciones y del precio del cobre, la mecha estará encendida.
El segundo: que la furia contenida por los traicionados salgan a las calles a manifestarse. En esa situación, se desataría la violencia en un viaje “one way ticket”, pues la izquierda, al igual que en la “funa” al estreno del documental Pinochet, intentaría por todos los medios impedir tales marchas. Pero, con una sola pequeña diferencia: al contrario que en la UP, en esta oportunidad lo harían con armas de fuego y, derechamente, a matar. Pero esto no ocurrirá, pues la derecha, abandonada y traicionada por aquellos en los que confiaron, se ha acobardado a límites vergonzosos para el “ser” chileno.
Todos los otros aspectos propicios para un desastre están dados en abundancia: delincuencia, injusticia, corrupción, burocracia, ingobernabilidad, violación a la Constitución, violencia, decadencia moral y pérdida sostenida de grados de libertad de los chilenos.
Podría pensarse en un tercer factor: una reacción por parte de las FFAA y de Orden por el dolor contenido. Este factor queda desestimado, pues, luego de dos décadas, nada han hecho por sus camaradas caídos tras las líneas enemigas. Hoy pareciera también que ya no representan la última reserva moral del país.
Extrapolando, al terminar este gobierno de pavimentar la carretera al totalitarismo socialista, las condiciones hoy latentes y patentes, pueden perfectamente convertirse nuevamente en realidad, en donde estaremos ante el mismo o peor escenario que en la gloriosa época de la UP, solo que esta vez estará al mando la compañera Bachelet.
De verdad creo que Chile está como en el año 1969 bajo el gobierno del otro desastroso gobierno DC, el del otro Frei y al borde del colapso.
Y lo que tanto costó reconstruir y edificar en 17 años de libertad, prosperidad y paz, no habrá sido más que un increíble sueño.
Al borde? Es Ud. optimista don Hermógenes, ya nos caimos, estamos inmersos en la imbecilidad misma y derivado de ella, en el juego de quien lo hace mejor para entregarle en bandeja el poder total al zurderio. Un presidente DC y ya sabemos quien viene después de un presidente DC, parlamentarios de la alianza más izquierdistas que los mismos socialistas.
ResponderEliminarLa guinda de la torta, los cascos azules que aparecieron como observadores de los DD.HH. Claro que su misión es observar y denunciar a los funcionarios de Carabineros, que, en cumplimiento de su deber, repriman a los delincuentes terroristas que asolan Santiago cada vez que la infiltrada intendenta de Stgo. les da chipe libre para su vandalismo. Hoy por hoy el disolver a los violentistas es violación a sus derechos humanos. Pero si el canal rojo chilevisión mostró a uno de esos sujetos increpando duramente a un funcionario en la puerta de la Comisaría. Entonces no estamos al borde, caimos en la imbecilidad más absoluta y no veo salida.
P.D. Me asalta una duda. Es Ud. Pablo Santander?
ResponderEliminarHunter: Él es protagonista de una novela y yo soy sólo actor secundario de la vida real. Saludos.
EliminarEl día de la exhibición del documental del General Pinochet, por una cuenta de Twitter ligada al pasquín The Clinic estaban conectados estos llamados "Observadores de DDHH" con cascos azules y la cuenta que mencioné @Obsddhh ( no estoy segura si la escribí bien). Vivo en el norte y leía con impotencia como esos desgraciados avisaban por cuáles calles se encontraba adherentes al "Dictador",, ellos eran los encargadados de dar las coordenadas de los nuestros para que hordas de asesinos corrieran trás ellos lanzándoles camotes enormes sin importarlrs si eran adultos mayores, señoras, o hente que no les había hecho absolutamente nada.
ResponderEliminarHoy leía a Moreira y decía que los responsables de los daños y vandalismo de la última manifestación de los "estudiantes" eran Camila Vallejo y Gabriel Boric lo que me llama la atención es que si lo sabe porqué no se querella como lo haría su amigo contrincante Gutiérrez y supongo que es por la característica principal de la nueva derecha chilena, la cobardía.
Más de una vez he criticado los organismos de derechos humanos, que son en realidad, los verdaderos poderes facticos y no de los que hablaba Allamand.
ResponderEliminarEllos son los que nos quieren quitar nuestra libertad a través del Derecho. Son seguidores de Lenin al ciento por ciento.
Hasta podríamos compararlos a la 'Policía del Pensamiento' de Orwell.
Para la entrega del último balance a la Nación, una noticia de 'La Segunda', cuenta que "Observadores de DDHH" viajaron a Valparaíso para ver como actuaban carabineros. Desde luego que no les interesaba los encapuchados y anarquistas.
La Derecha es responsable de haber convertido a estos tipos en autoridad, cuando en realidad, no tienen ninguna y son arbitrarios como un déspota y tirano.
Estos "observadores" tienen un sitio web, son parte del entramado de propaganda castrista nacional y, estoy seguro, se financian con nuestro dinero.
ResponderEliminarIntrigado por la curiosidad, decidí buscar en Internet cómo puedo convertirme en un observador de derechos humanos, porque me interesa saber qué significa serlo, cómo se forman y cómo es la experiencia. Encontré, pues, información acerca de capacitaciones en el Instituto Nacional de Derechos Humanos y me contacté con ellos: me recomendaron contactar a Luciano García para obtener más información. Más recientemente, el Observatorio de Derechos Humanos también me invitó a contactar, de modo que ya les envié (hace un par de días) un primer mensaje.
ResponderEliminarSupongo que, de esta manera, tendré la posibilidad de enterarme mejor acerca de la intrigante labor de los observadores de derechos humanos. Aunque deberé esperar al menos hasta cuando vuelva a Santiago para recibir las capacitaciones.
Falta hoy en Chile una organización de choque para defendernos de los ya organizados y pagados por el estado que hoy nos muestra El Mercurio. El FPMR.
ResponderEliminarEstuve en El Caupolican y me parece indispensable organizarnos como cuando teníamos a Patria y Libertad.
Ya los angustiados agricultores del sur se están organizando, pero estas organizaciones deben contar con buenos abogados para defender su actuar. Cuando yo cumplía 15 años, desfilaba con linchaco, cadena como cinturón y me entrenaban en el uso de baras de coligue. Así debemos formar grupos de choque, con los que empecemos por pegarle a los de cascos azules y seguir con los encapuchados que hoy nos muestra El Mercurio.
O nos organizamos y preparamos, o estamos perdidos.
Aun es tiempo. Viva Chile libre del comunismo.
Ah, y no es estar en la imbecilidad que la derecha, al legislar con el poto, permita el espectáculo que se vió hoy en que el zurderio mandó a sus sicarios y a cuanto flaite legüino, que encontraron y a los infaltables tontos útiles a sueldo para que se inscribieran en la comuna de Providencia con el fin, como sin empacho lo reconocieron, de sacar a Labbé de la alcaldía. Si les resulta, buena arma se le dió al zurderio para eliminar a cualquier político contrario que les cause problemas.
ResponderEliminarPolíticos como Labbé, siempre van a encontrar un lugar para trabajar por Chile.
EliminarTal vez, al alcalde de Providencia, la Providencia le tenga deparado un horizonte más destacado, como lo sería la de candidato a la Presidencia.
La derecha, y la gente decente de esta tierra, clama por un candidato de verdad.
Bueno y yo me cambié a providencia solo para ayudar a dejarlo, aunque no estoy en nada de acuerdo con muchas políticas de este señor.
EliminarEspecialmente el permiso para construir ese monstruo flaitizado y de pésimos accesos que tuve la mala idea de visitar hoy, el "Costanera Center".
Sugerencia: no vayan.
Estimado don Hermógenes:
ResponderEliminarSiguiendo con la tarea de lavarle el cerebro a los chilenos, hoy en El Mercurio, se anuncia que el museo de la desmemoria, pág. D4, se estaría exhibiendo "La Consulta del doctor Allende". Este nefasto personaje de la política chilena, jamás tuvo consulta. Nunca ejerció la medicina.
Tiene un parecido impresionante con otra "víctima" de nuestra criolla estupidez política, el senador Guido Girardi, creo que este es peor.
Es tan triste ver a nuestro país caminando la senda hacia el marxismo más total y anacrónico que es posible en estos tiempos. Se han cumplido todos los requisitos, se adueñaron del magisterio para poder destruir cualquier vestigio de verdad y racionalidad en las mentes de los futuros ciudadanos, minaron cuallquier vestigio de moralidad y valores, anularon nuestra "reserva moral" transformándola en un grupo de personas avergonadas por haber cumplido su deber y vencer a los enemigos de la patria, después infiltraron los medios de comunicación, cosa de machacar día a día una verdad ficticia, hasta el punto que la ciudadanía comenzó a dudar de su capacidad de percibir su realidad... económicamente nos redujeron a esclavos inconscientes de este hecho, por medio de reducciones de salarios a punto de apenas sobrevivir y de exigencias altísima de estándares como reemplazo de una autoestima ausente (producto de la educación marxista), por lo que no quedó más que el endeudamiento, de este modo se evita cualquier germen de duda o de rebelión, por miedo a perder los míseros trabajos y morir en manos de bancos y DICOM... en fin, el mal está hecho y lo creo poco reversible, ya ni queda gente con materia gris para entender estos mensajes, no tenemos esa libertad. NO HAY MEJOR ESCLAVO QUE QUIEN NO SABE QUE LO ES.
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