Rara vez estoy de acuerdo con las columnas de Agustín Squella en "El Mercurio", en particular porque he leído en ellas que no cree en Dios, aserto tan inexplicable para mí como si él dijera que no cree en los fabricantes de relojes, y ante la evidencia de que hay millones de relojes y nadie nunca ha podido presentar uno que se haya hecho solo. Siendo el ser humano tanto más complejo que un reloj (aunque no por eso normalmente ande mejor que éste) no puedo creer que alguien diga que el ser humano se hizo solo, que es lo mismo que decir que no hay Dios. Pero hoy Squella tiene en su columna un notable acierto: dice que Sebastián Piñera, más que un líder, es un protagonista, y en eso tiene toda la razón.
Es que gobierna para sí mismo, buscando la máxima popularidad y mirando atentamente las encuestas. El aumento del impuesto a las empresas, que él propone, es paradigmático a este respecto. Lo funda en que, como ha dicho reiteradamente, se trata de extraerles dinero a los más ricos para mejorar la condición de los pobres. Este aserto tiene el respaldo de una enorme mayoría en todas las encuestas, pero es ruinoso para el futuro del país, como lo demuestra el hecho de que todos los gobiernos fundados en el propósito de extraerles dinero a los más ricos para dárselo a los pobres terminaron como el chileno de 1973 o los que estaban ubicados tras la Cortina de Hierro o el Muro de Berlín. Y los más moderados de la misma línea -izquierdistas y centroizquierdistas- están terminando como vemos. Varios de Europa que creían haber conseguido un Estado de Bienestar ideal están hoy afrontando la bancarrota.
La proposición de Piñera se engarza en lo que Pablo Longueira les criticaba a los anteriores gobiernos de la Concertación (digo "anteriores" en atención a que muchos estiman que éste es el V Gobierno de la Concertación, aunque yo he preferido catalogarlo como el IV Gobierno DC). Cuando José Miguel Insulza, como Ministro del Interior de Frei Ruiz-Tagle, proponía reformas laborales demagógicas para peraltar la candidatura de Ricardo Lagos y hacer desmerecer a la de Lavín, Longueira lo acusaba de estar propiciando la lucha de clases para aprovecharse electoralmente de ella.
La propuesta tributaria de Piñera tiene ese mismo carácter. Garantiza popularidad de corto plazo, como señalan las encuestas (a la gente le encanta imponer tributos a los más ricos, porque la casi totalidad de ella no se cuenta entre los mismos), pero en el largo plazo eso nos perjudica a todos, porque deteriora al capacidad de ahorro de las empresas, desalienta la inversión y disminuye el empleo y el crecimiento.
Sebastián Piñera está maximizando un beneficio político de corto plazo (ser favorecido por las encuestas), a costa del interés general de largo plazo, que suele no contar con respaldo mayoritario en los sondeos. Es nuevamente la explotación de la lucha de clases: quitarles a los que tienen más para darles a los que tienen menos, con la salvedad de que, a través de los impuestos, son las burocracias las que se quedan con los recursos y los que tienen menos no son, en general, funcionarios burocráticos.
Todo esto sucede porque no tenemos un líder de un movimiento que busque el bienestar de largo plazo, sino sólo un protagonista, que quiere para sí popularidad ahora, aunque sea a costa de no interpretar a la principal de las corrientes que lo llevaron al poder.
El protagonista se beneficiará, ciertamente, de una gran popularidad. Casi tanta como la que tuvo Marmaduke Grove, en 1932, cuando ordenó a la Caja de Crédito Prendario devolver sin pago a la gente las cosas que ésta había empeñado. Las multitudes lo vitoreaban en las calles, pero su gobierno duró pocas semanas. Por cierto, no será el caso del de Piñera, pero en el largo plazo pagará las consecuencias de haber hecho prevalecer el protagonismo y su propia popularidad de corto plazo por sobre un liderazgo serio, a la cabeza de corrientes políticas que buscan consolidar el futuro del país en el largo plazo.
hanía un caballero que se llamaba Darwin, y una cosita que se llama evolución
ResponderEliminar¿Por que todos sus articulos son puras criticas al gobierno del presindente Sebastian Piñera?
ResponderEliminarCordiales saludos desde Coquimbo.
Chris Angel.
A pesar de no estar de acuerdo con usted, ni siquiera con los puntos y las comas que escribe, me provoca un gran placer volver a leer sus columnas.
ResponderEliminarSaludos
La cegera no solo es ficiologica sino es tambien intelectual, con mis mas cincero respeto,a su trayectoria, creo que la edad no debe ser un impedimento para ver que se hicieron cosas buenas en los gobiernos anteriores, y tampoco para ver las nefastas acciones que a llevado este nuevo gobierno y que muchos no ven, la ceguera ideológica es el peor veneno que puede tener una persona, creo que por su preparación intelectual no debiera tenes este síntoma, ya que la edad nos permita ser mas objetivo, mas mesurado, y que nos enseñe a ver todos los colores del arcoiris.
ResponderEliminarCon mis respeto
Fernando
Temuco
LO EXTRAÑÁBAMOS, PERO APOYE UN POCO A QUIENES NOS COSTO TANTOS AÑOS TENER UNA OPORTUNIDAD, GRANDE DON HERMOGENES!!!!
ResponderEliminarCuantos pares son tres moscas, en su blog se podrá encontrar respuestas, no podemos estar en todo de acuerdo, no obstante con sus artículos mejoro la visión de mi país.
ResponderEliminarPor cierto Hermogenes tiene toda la razón, el camino adoptado por el gobierno de subir los impuestos es el más fácil y populista, no tiene ninguna ciencia ni estudio acabado, es la manera de echar mano a dinero de manera rápida con dividendos políticos importantes.
ResponderEliminarPor cierto no soy Piñerista y los que somos de Derecha realmente de derecha, estamos lejos de coincidir con los planteamientos políticos de éste, de verdad no he visto aun todos los cambios necesarios para sacar a todos los concertacioncitas que se encuentran anquilosados en cientos de cargos públicos sin tener la capacidad profesional para ejercerlo. No he visto levantar la voz, golpear la mesa que se sienta y escuche que llegó un gobierno de Derecha a Gobernar que cambio el rumbo del país y que por lo menos durante estos cuatro años tendremos todos los chilenos la posibilidad de conocer realmente una conducción de país que deje en el pasado las medidas populistas que fueron la base de la política de centro izquierda para perpetuarse durante todo este tiempo en el poder.
Veo a contrario sensu un gobierno timorato, que busca acuerdos, que pide permiso y se disculpa. La derecha fue vapuleada durante todos estos años y sin esperar una suerte de venganza, si espero que saquen la voz y ejerzan el gobierno con personalidad y seguridad.
Cuando se señala que es un nuevo gobierno de la Concertación, por cierto que es verdad, cuando se dice que Piñera es Protagonistas, por supuesto que es verdad, si el primer menaje que envió al designar su gabinete tan solo comunicando a los Presidentes de partidos unas horas antes es a lo menos una falta de respeto, no se eligió solo y el apoyo de la UDI y RN, fue sin lugar a dudas fundamental en el logro de la presidencia, tenga por lo tanto un mínimo de respeto y consideración para con aquellos.
Porque la derecha critica a Piñera? Sencillo, está lejos muy lejos aún de cubrir o alcanzar las expectativas que nos represente y se acerca peligrosamente al centro populista. Si no se marca la diferencia en cuatro años más, realmente dará lo mismo por quien votar.
Una gran alegría conocer de la existencia de su blog.Soy un antiguo feligrés y mi gran reliquia política es la primera edición de su libro "Comentarios escogidos",siempre de gran actualidad.
ResponderEliminarGracias Hermógenes
En cosa de 9 dias,se han septuplicado el numero de comentarios.
ResponderEliminarQue bueno que haya vuelto.
hernan Aldana